La Cámara de Diputados de la Nación

RESUELVE:

Expresar beneplácito y satisfacción por la actuación del golfista Angel ¨Pato¨ Cabrera quien obtuvo la victoria en el torneo ¨US Open¨, el día 17 de Junio de 2007, en el Oakmond Country Club (Estados Unidos).

Señor presidente:

No son muchos los afortunados que logran cumplir en algún momento sus anhelos. El famoso sueño del pibe vive en la memoria esperando convertirse en realidad. Este es el caso del golfista Ángel ¨Pato¨ Cabrera, quien pasó de una infancia dura a un presente cargado de gloria. No contaba aún con diez años cuando empezó a caminar diariamente los 500 metros que lo separaban del Córdoba Golf Club para recoger pelotitas y hacer algunos trabajos como jardinero el oficio de su padre, Miguel Ángel. Terminó la primaria y no podía seguir estudiando, entonces decidió quedarse en el ámbito del golf y de ahí no se fue nunca más.

En poco más de una década en la cual trabajó como caddy (cargando bolsas de palos de aficionados, asesorándolos sobre qué hierro o qué madera usar, dándoles las distancias a las banderas o indicándoles las caídas de los greens). Cabrera arrasaba entre sus pares. Hasta que en 1989 tomó una decisión importante: se hizo profesional, terreno en el cual su ascenso fue constante. Ganó 16 torneos internacionales, tres de ellos en el exigente circuito europeo y uno, el domingo 17 de Junio de este año, en la gira de Estados Unidos, la NBA del golf.

Los logros de Cabrera exceden los títulos: en mayo del 2001 fue el primer argentino en quedar al tope del ranking europeo. Y en octubre del 2005 quedó noveno en la clasificación mundial, algo que ningún otro compatriota había conseguido hasta entonces.

Cabrera tuvo una histórica victoria, en una fantástica vuelta final de 69 golpes y logró, a los 37 años, el título en el complicadísimo campo de Oakmond, donde se desarrolló el segundo Grand Slam del año. Lo escoltaron el número uno y el número tres del mundo.

Tigger Woods y Jim Furyk. Esta sorprendente victoria tiene la misma dimensión que la de Roberto De Vicenzo en el Abierto Británico de 1967. Además, fue uno de los máximos logros del deporte argentino.

El plan de Ángel Cabrera era ¨Atacar¨. No podía hacer otra cosa en esta vuelta final del US Open. Salió a jugar a cuatro golpes de la punta y muy dentro de sí, sabía que esta era "la" oportunidad de festejar a lo grande en el golf mundial. Pasó con éxito los tres primeros hoyos, con respectivos pares, y de ahí se dió cuenta que podía ser el mejor día de su vida.

Este desempeño ubica a Cabrera entre los deportistas más destacados de la historia de la Argentina. premiando esfuerzo, sacrificio y perseverancia, para lograr inscribir su nombre en las páginas más gloriosas del deporte de Argentina y del mundo.

Señor Presidente, por todo lo expuesto solicito a mis pares la aprobación del presente proyecto.