La Cámara de Diputados de la Nación

RESUELVE:

Declarar su más enérgico repudio al envío por parte del Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte de un submarino de ataque de propulsión nuclear a navegar las aguas territoriales argentinas circundantes a las islas Malvinas

Señor presidente:

En los últimos días se han difundido en los medios de comunicación nacionales e internacionales, noticias que reproducen trascendidos de la prensa Británica donde se señala en envío de un submarino nuclear que llegara a las islas Malvinas el 14 de Junio con motivo de la conmemoración británica de los 30 años del alto al fuego que dio por terminado el conflicto de 1982.

Al igual que señaláramos en otros proyectos y declaraciones, creemos que, junto al envío del Destructor HMS Monrose y a la visita a nuestras islas usurpadas del "Príncipe William", este anunció constituye una nueva provocación no ya a nuestro pais y su justo reclamo, sino a Sudamérica toda.

Luego de reiteradas demostraciones de apoyo y solidaridad para con la causa argentina expresada por la totalidad de los países hermanos, llegando incluso el Gobierno del Perú a rechazar el arribo de una nave de guerra Británica a sus puertos, el gobierno británico, empecinado en demostrar su absoluta falta de respeto por el derecho y el orden internacional, toma nuevamente la decisión de utilizar el despliegue militar para respaldar una usurpación colonial escandalosa para un pais que pretende presentarse como respetable y serio.

Pero lo aún mas grave es que esta vez se trata de submarino nuclear enviado a una zona cercana al océano antártico, donde esta prohibida la navegación por cualquier tipo de nave de propulsión nuclear para cualquier país.

Párrafo aparte merece señalar que la capacidad destructiva de esta nave excede cualquier intención conmemorativa, ya que cuenta con misiles crucero de enorme poder, capaces de penetrar territorio "enemigo" hasta una distancia de 2000 km, capacidad que logra que, ubicado en cualquier punto de la costa argentina, sea capaz de amenazar casi la totalidad del territorio argentino, incluyendo las áreas mas pobladas de nuestro país.

Por todo esto, consideramos necesario que este Congreso como así también las más altas autoridades nacionales y de la región expresen su repudio a esta nueva amenaza a una zona que, luego de décadas de trabajo y entendimiento mutuo, hemos podido constituir como "Zona de Paz", como mensaje al mundo de la voluntad del pueblo sudamericano de desarrollarse en paz y prosperidad y ajenos a toda intervención maliciosa de cualquier potencia extra-regional que demuestre una decadente nostalgia imperialista.