PROYECTO DE TP
Expediente 3234-D-2010
Sumario: DERECHOS DE EXPORTACION APLICABLES A LAS DISTINTAS VARIEDADES DE TRIGO Y MAIZ, GIRASOL Y SORGO COMPRENDIDOS EN LAS POSICIONES ARANCELARIAS DE LA "NOMENCLATURA COMUN DEL MERCOSUR - NMC -": FIJACION DE LA ALICUOTA EN UN CERO POR CIENTO (O%).
Fecha: 14/05/2010
Publicado en: Trámite Parlamentario N° 55
El Senado y Cámara de Diputados...
ARTICULO 1º.- Fíjase la alícuota
del derecho de exportación, aplicable a las distintas variedades de trigo y
maíz comprendidas en las posiciones arancelarias de la Nomenclatura Común
del MERCOSUR (N.M.C.), en un cero por ciento (0%).-
ARTICULO 2º.- Fíjase la alícuota
del derecho de exportación, aplicable a las distintas variedades de girasol
comprendidas en las posiciones arancelarias de la Nomenclatura Común del
MERCOSUR (N.M.C.), en un cero por ciento (0%).-
ARTICULO 3º.- Fíjase la alícuota
del derecho de exportación, aplicable a las distintas variedades de sorgo
comprendidas en las posiciones arancelarias de la Nomenclatura Común del
MERCOSUR (N.M.C.), en un cero por ciento (0%).-
ARTICULO 4°.- Comuníquese al
Poder Ejecutivo.-
FUNDAMENTOS
Señor presidente:
El presente proyecto de ley
tiene como objeto contribuir en la búsqueda de diferentes soluciones a la
problemática actual del sector agrícola nacional, otorgando mayor
certidumbre en un escenario internacional que se caracteriza por su
volatilidad, generando gran incógnita y desaliento entre los productores
agropecuarios.
Las retenciones han sido un
tema muy discutido y mucho se ha dicho sobre las mismas, generándose en
torno a ellas discusiones a distintos niveles de poder y los productores
agropecuarios. Lo cierto es que la problemática en torno a este tema tan
delicado, continua siendo una gran preocupación para el sector
productivo.
En el año 2002, cuando las
cuestionadas "retenciones" fueron restablecidas, la discusión era en torno a
cómo debía distribuirse la renta, que en ese momento el Poder Ejecutivo
Nacional consideraba, era extraordinaria debido a los altos precios
internacionales de los granos, como así también, se las consideraba como un
instrumento de control de precios de los alimentos para que de esta manera
no se impactara sobre los niveles de pobreza e indigencia. Todo esto no
pudo ser efectivamente demostrada que así sucediera.
Creemos ciertamente que
debemos encontrar un equilibrio entre los legítimos intereses fiscales y
redistributivos del Gobierno y los también legítimos intereses de los
productores agropecuarios que, en algunos casos, siguen viendo como su
rentabilidad se reduce a niveles insignificantes o hasta negativos.
Otro problema altamente
preocupante es el referido al tema de los subsidios al precio de los alimentos
(por ejemplo al pan), ya que los mismos terminan beneficiando a toda la
población, así el setenta por ciento (70%) recae sobre los sectores no
necesitados, no cumpliendo eficazmente con el cometido de beneficiar a
quienes más lo necesitan.
Manifestamos que no estamos
en desacuerdo con las retenciones como herramienta de política económica,
pero creemos no es cierto que éstas sean un factor de equilibrio social,
tendiente a mantener estables los precios internos en un escenario de altos
precios internacionales, pues así ha quedado demostrado a través del paso
del tiempo. Este mecanismo no contribuye de forma alguna a la
redistribución de la mayor riqueza generada por estos precios, y por ende,
entendemos que este impuesto a las exportaciones no es la forma de
solucionar dicha problemática.
Asimismo, queremos resaltar
que nuestras provincias hoy se encuentran con grandes dificultades
financieras y debemos garantizarles los medios para que puedan generar
recursos que consecuentemente repercutan en una mejor calidad de vida de
sus habitantes.
Por otro lado, y enfocándonos
en los actores principales del sector, vemos que resulta fundamental
entender la situación en la que se encuentran, teniendo en cuenta los gastos
que deben afrontar tanto el productor agropecuario a la hora de la siembra,
como así también el costo de los insumos como ser: semillas, agroquímicos,
fertilizantes, gas-oil; todos ellos impredecibles de determinar, teniendo en
cuenta la variación de precios que los mismos sufren, y que en algunos casos
los valores que se abonan son a precio dólar.
A todo lo expuesto, cabe
agregar un dato más y es que la actividad agropecuaria es una actividad de
riesgo, y que, actualmente los productores vienen reacomodándose de unas
históricas sequías, de aquellas que se repiten una vez cada veinte años o
más, que, entre otras consecuencias provocó, en la provincia de Santa Fe,
por ejemplo, caídas en los rendimientos estimados por hectárea, superiores
al 40% y casi totales para algunos cultivos. Hemos tenido un escenario
bastante desolador para el productor y sin indicadores que permitieran
vislumbrar una salida a esta simultaneidad de factores adversos, que como
siempre los hombres de campo, con el esfuerzo, trabajo y sacrificio que los
caracterizan, intentaron e intentan seguir adelante.
En este orden de idea, resulta
necesario adoptar medidas que alivien, aunque sea en parte, la situación del
sector agrario, resultando urgente y necesario contar con políticas acordes a
las necesidades del sector.
La provincia de Santa Fe, por
ejemplo, se caracteriza por estar muy ligada a la actividad agropecuaria y
también a todo tipo de producción vinculada con el campo. En esta provincia
se produce soja, maíz, trigo, girasol, sorgo, arroz y algodón. Existen
consecuentemente industrias vinculadas al sector agropecuario, como la
industria oleaginosa, cárnica, láctea, molinera y de maquinas agrícolas, que
incluye cosechadoras, sembradoras y pulverizadoras. Por esa razón, las
medidas que afecten al campo, afectarán obviamente a toda la cadena
productiva, repercutiendo de esta forma en todos sus habitantes. Como
representantes de la misma, elegidos por el voto popular, somos testigos
diarios y directos de la problemática diaria que enfrenta el sector.
Este proyecto tiene como
cometido otorgar previsibilidad a la producción agrícola reduciendo a cero las
alícuotas de los derechos de exportación para los distintos tipos de trigo,
maíz, girasol y sorgo. De esta forma, se estaría dando la posibilidad al
productor de no tener que optar siempre por la siembra de soja, cumpliendo
con la rotación cultivos, contribuyendo así, al mejoramiento del suelo,
evitando el deterioro de los nutrientes del mismo, respetando, en definitiva,
el criterio de sustentabilidad incorporado a nuestra Constitución Nacional con
la reforma de 1994, en el artículo 41.
Creemos que, hasta hoy, las
medidas adoptada hacia el sector no han favorecido a la desojización, sino,
por el contrario se han generado mayores incentivos al monocultivo de soja,
lo que queda demostrado con sólo transitar por las provincias fuertemente
agrícolas, donde la siembra es casi total de este grano.
Este proyecto, que propone
eliminar las retenciones para el trigo, maíz, sorgo y girasol, tiene como
finalidad dar un marco de certidumbre y confianza a aquellos que
representamos.
Por las razones expuestas
solicitamos de nuestros pares la aprobación del presente proyecto de ley.
Firmante | Distrito | Bloque |
---|---|---|
ARENA, CELIA ISABEL | SANTA FE | PERONISMO FEDERAL |
OBEID, JORGE ALBERTO | SANTA FE | PERONISMO FEDERAL |
CARRANZA, CARLOS ALBERTO | SANTA FE | PERONISMO FEDERAL |
GERMANO, DANIEL | SANTA FE | PERONISMO FEDERAL |
AGOSTO, WALTER ALFREDO | SANTA FE | PERONISMO FEDERAL |
FORCONI, JUAN CARLOS | SANTA FE | PERONISMO FEDERAL |
Giro a comisiones en Diputados
Comisión |
---|
AGRICULTURA Y GANADERIA (Primera Competencia) |
COMERCIO |
PRESUPUESTO Y HACIENDA |
Trámite en comisión (Cámara de Diputados)
Fecha | Movimiento | Resultado |
---|---|---|
10/08/2010 | INICIACIÓN DE ESTUDIO | Aprobado sin modificaciones con dictamen de mayoría y dictamen de minoría |