El Senado y Cámara de Diputados...

PARA CORREGIR LA DISTORCIÓN QUE CAUSA EN EL CÁLCULO DEL IMPUESTO A LAS GANANCIAS LA EXISTENCIA FINAL EN ESTABLECIMIENTOS DE CRIA VACUNA

Artículo 1º: Para las determinación del resultado del ejercicio, dentro del ámbito del Impuesto a las Ganancias (t.o. en 1998 y sus modificatorias), a los efectos del cálculo de las existencias iniciales de los inventarios de hacienda vacuna hembra y de reproductores machos, recría y novillos en los establecimiento ganaderos, para la determinación del valor de cada categoría, se tomará el mismo valor unitario correspondiente a su categoría determinada en el cálculo de las existencias finales, exclusivamente, para todos los ejercicios fiscales toda vez que por motivos exógenos (climáticos y/o inflacionarios) la suba sea superior al 30% del valor.

Artículo 2º: De forma.

Señor presidente:

Desde el año 2006, la ganadería vacuna en el país ha venido sufriendo continuas intervenciones por parte del gobierno nacional, las que se resumen en cierre de exportaciones, fijación de precios mínimos de faena, precios mínimos sugeridos, entre otras medidas, con el objeto de impedir un aumento de precio de la carne al consumidor, circunstancia no lograda y que afectara de manera directa a los criadores, lo que vieron congelado o reducido el valor de sus existencias de animales en pie.

Estas políticas erróneas produjeron una significativa baja en el stock ganadero, que de 60 millones de cabezas en el año 2006 se redujo a 48 millones de cabezas en el corriente año, lo que se tradujo en un enorme faltante de carne y, por ende, en un importante aumento de precio de la hacienda ante tan notable escasez de animales para faena. Asimismo, la falta de rentabilidad en la ganadería impulsó una indiscriminada matanza de hembras, que lógicamente coadyuvó a la baja del stock ganadero nacional. A este cuadro de situación debemos agregarle la última sequía, que no solo trajo aparejado una gran mortandad de hacienda sino, también, sensibles reducciones en las tasas de procreo de los rodeos, lo que aceleró el proceso de liquidación de vacunos.

Frente a éste panorama, actualmente estamos ante un proceso de recomposición de precios que ha más que duplicado los valores de la hacienda en pie existentes durante el año 2009, lo que impacta directamente en la determinación del resultado por tenencia de las explotaciones ganaderas y, por ende, en un impuesto a las ganancias que se halla distorsionado por este incremento de precios.

En consecuencia, por medio este proyecto, proponemos corregir de algún modo la referida distorsión en los establecimientos ganaderos, para ayudar a la recomposición de stocks. En caso contrario, si no aplicáramos alguna medida de excepción, los productores se verían en la necesidad de continuar liquidando sus existencias, a fin de poder hacer frente a un abultado impuesto a las ganancias que gravaría el mayor valor de sus existencias, resultados de ningún modo realizados, sino por una mera tenencia de existencias.

Por otra parte, dichos ganaderos deberán determinar sus impuestos patrimoniales -bienes personales, ganancia mínima presunta, bienes personales responsables sustitutos, según corresponda- en base al valor actualizado de sus existencias finales, no afectando los recursos del Tesoro.

Finalmente la distorsión en el Impuesto a las Ganancias se corregiría, en parte, si pudiera aplicarse el mecanismo de ajuste por inflación. Actualmente, las empresas, al no utilizar mecanismo alguno de ajuste, determinan sus resultados económicos e impositivos sobre bases ficticias.

Por las razones expuestas es que solicito a mis pares la aprobación del presente proyecto de ley.-