La Cámara de Diputados de la Nación

RESUELVE:

Adherir a la recordación del próximo 12 de junio como "Día Mundial contra el Trabajo Infantil ", para reforzar y promover la voluntad política y el compromiso de los gobiernos y de los diferentes actores sociales, con su erradicación.

Señor presidente:

El trabajo infantil es concebido por diversos marcos jurídicos como aquellas actividades que desarrollan las niñas y los niños en el marco de la economía formal o informal, para su propia subsistencia o para contribuir a la economía familiar, fuera de la protección jurídica y social prevista en la ley. Se debe entender como cualquier trabajo físico o mental que interfiere en su escolarización o que exige que intente combinar la asistencia a la escuela con largas jornadas de trabajo pesado.

El convenio 182 de la Organización Mundial del Trabajo (OIT) define como una de las peores lacras de este siglo, el aumento de trabajo infantil en diversas formas de esclavitud, la utilización o reclutamiento de niños para la prostitución y el crimen organizado, su utilización para la realización de actividades ilícitas (como el tráfico de drogas), y el trabajo que por su naturaleza es probable que dañe la salud o moralidad de los niños.

Según este organismo, la pobreza empuja a trabajar a 218 millones de niños y niñas en todo el mundo. De ellos, 8.5 millones lo hacen en condiciones de esclavitud, sin recibir un salario y mucho menos ir a la escuela. Además, otros 126 millones trabajan en condiciones peligrosas para su salud.

Por su parte, la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO), denunció que cada día, unos 132 millones de niños, de 5 a 14 años, se ven forzados a trabajar la tierra, a menudo en condiciones insalubres y peligrosas.

La trata infantil mueve alrededor 23.500 millones de euros al año y afecta a 1.2 millón de niños y bebés (se incluye la adopción ilegal y el tráfico de órganos). El turismo sexual es el culpable, además, de que haya 1.8 millón de víctimas de la explotación sexual con fines comerciales. Y existen por los menos 300.000 niños soldados reclutados para conflictos armados.

La Argentina asumió el compromiso internacional de eliminar por completo el trabajo infantil para el 2015, pero lamentablemente, es el país de América Latina donde ha crecido de forma más alarmante, al aumentar seis veces en pocos años, como consecuencia de la crisis económica, según informes el Ministerio de Trabajo Nacional, en la Encuesta de Actividades de Niños, Niñas y Adolescentes, que abarca distintas áreas geográficas del país. Esa encuesta reveló también que el 6,5% de los niños de entre 5 y 13 años cumplen alguna tarea, y que trabaja el 20,1% de los adolescentes de entre 14 y 17.

En las ciudades, los chicos se desempeñan como cartoneros, vendedores callejeros, mendigos, cirujas o explotados sexuales, y están más expuestos al contacto con drogas de todo tipo y su consumo.

Especialmente sensible es la situación de los niños, niñas y adolescentes que trabajan en la agricultura y el sector rural, principalmente las provincias del norte, entre ellas Chaco, Misiones y Tucumán, junto con Mendoza, donde se utilizan chicos y chicas en las actividades de cultivos y cosechas más diversas.

Por las razones expuestas solicito la aprobación de la presente Resolución.