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LEY DE fomento a la exportación y consumo de peras y manzanas Y DE CREACIÓN DEL INSTITUTO NACIONAL DE LA PERA Y LA MANZANA

Créase el Instituto Nacional de la Pera y la Manzana bajo la órbita del Ministerio de Agricultura, Ganadería y Pesca de la Nación.

El Instituto Nacional de la Pera y la Manzana es un organismo descentralizado, cuya sede debe radicarse en la región de mayor producción de frutas de pepita.

El Instituto Nacional de la Pera y la Manzana tiene como su objetivo principal el fomento y desarrollo de la producción de peras y manzanas; la incorporación de nuevos productos con valor agregado; la ampliación del consumo interno; y la promoción de las exportaciones.

Para el cumplimiento del artículo precedente, el Instituto debe:

Investigar la situación actual de la producción y comercialización de pera y manzana, para promover políticas tendientes a su mejoramiento y expansión.

Desarrollar políticas que estimulen la competitividad del sector y su inserción en el mercado regional e internacional.

Implementar acciones específicas que alienten el consumo de la pera y la manzana.

Fomentar el uso de nuevas tecnologías agropecuarias e industriales tendientes a una mejor calidad y cantidad en la producción de pera y manzana.

Elaborar programas de fortalecimiento al pequeño productor, a la economía social de mercado, y a las cooperativas que se dediquen a la producción o comercialización de pera y manzana.

Otorgar asistencia técnica y financiera a las zonas de cultivo a cargo de pequeños productores.

Otorgar asistencia técnica y financiera para la realización de estudios de factibilidad para la incorporación de nuevas zonas de cultivo.

Desarrollar nuevas variedades de peras y manzanas con valor comercial;

Desarrollar un área de Marketing y comercio interior para acompañar a los exportadores en la búsqueda de nuevos mercados;

Convocar a entidades públicas y privadas para la búsqueda de alternativas de incorporación de valor agregado a la producción de peras y manzanas en las zonas de cultivo;

Crear un fondo compensador para asistir a los productores cuando:

La zona cultivada se vea afectada por desastres climáticos: lluvias intensas, caída de granizo, heladas, entre otros.

Los precios del mercado no alcancen a cubrir los costos de producción. Dichos precios se establecen a partir de un estudio anual por parte de una Universidad Nacional conforme lo establezca la reglamentación de la presente ley.

Estimular la exportación de peras y manzanas y sus derivados.

El Instituto Nacional de la Pera y la Manzana tiene un directorio integrado por:

Un representante del Ministerio de Agricultura, Ganadería y Pesca de la Nación

Un representante de cada una de las provincias donde existan cultivos de pera y manzana, en la medida en que éstos cuenten con cierta significación en la producción total.

Un representante por cada una de las cámaras que comercialicen la producción de frutas y sus derivados.

Un representante por los productores de frutas de pepita no integrados. Entiéndase a los fines de esta ley como productores no integrados a aquellos agentes que se dediquen a la producción de peras y manzanas pero que no participan en la conservación, industrialización y comercialización del producto.

Un representante del instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA).

Un representante del Instituto Nacional de Tecnología Industrial (INTI)

Un representante de la Secretaría de Comercio Interior

Un representante de la Secretaría de Comercio Exterior.

El representante del Ministerio de Agricultura, Ganadería y Pesca de la Nación es el presidente del directorio y tiene la representación legal del Instituto.

Se designa igual número de suplentes de los miembros del directorio, por idéntico procedimiento y con el mismo plazo de duración; que reemplazarán a los titulares en causa de ausencia con las mismas facultades.

Los integrantes del directorio duran 4 (cuatro) años en sus funciones y pueden ser designados por un segundo período consecutivo.

El procedimiento eleccionario así como también la organización interna del instituto serán establecidos por vía reglamentaria.

Los fondos necesarios para el cometido del Instituto Nacional de la Pera y la Manzana provienen de:

Recursos propios;

Contribuciones, legados y/o donaciones generadas en la ayuda económica dispuesta por personas públicas o privadas interesadas en el desarrollo del sector;

Multas que se apliquen por infracciones a la legislación vigente;

Percepción de aranceles por servicios derivados de la aplicación del sistema;

El 50 % (cincuenta por ciento) de lo recaudado en concepto de retenciones a las exportaciones frutícolas.

El Poder Ejecutivo Nacional reglamenta esta ley dentro de los ciento veinte (120) días de sancionada.

Dentro de los ciento veinte (120) días de constituido el Instituto Nacional de la Pera y la Manzana dictará su reglamento interno.

Comuníquese al Poder Ejecutivo.

Señor presidente:

El presente proyecto propone la creación del Instituto Nacional de la Pera y la Manzana con la finalidad de estimular la producción, consumo y exportación de la fruta de pepita, como así también el fortalecimiento y estimulación de los pequeños y medianos productores.

Consideramos importante para el apuntalamiento de una de las economías regionales más importantes del país contar con un organismo que se avoque exclusivamente al fruto de su actividad. A través del Estado se pretende, además, intervenir a favor de los pequeños productores con el objetivo de proteger su actividad frente a las desigualdades existentes no sólo en la distribución de la tierra sino también en los distintos eslabones de la cadena productiva.

Cuando se hace mención a las economías regionales en general se hace por descarte a aquellas actividades productivas que se desarrollan fuera del área pampeana. Asimismo, los productos de estas actividades históricamente se vincularon al mercado interno. No obstante lo cual, con el correo de los años y los cambios acontecidos en las producciones y en los procesos de comercialización muchas de estas economías lograron un lugar en el mercado internacional.

Si tomamos la producción de peras y manzanas, observamos un mercado que a nivel mundial alcanza los 90 millones de toneladas. Argentina aporta 1,8 millones de toneladas, repartidos casi en partes iguales.

En Argentina se produce anualmente 1,8 millones de toneladas de peras y manzanas de los cuales 726.750 toneladas de manzanas (76,5%) y 640.800 de peras (67,4%) tienen origen en la provincia de Río Negro (distribuidos principalmente entre las regiones del Alto Valle y el Valle Medio). El resto de las provincias productoras son Neuquén, Mendoza, La Pampa y San Juan.

En la actualidad se estima que esta economía regional ocupa a 50.000 trabajadores de forma directa y a otros 15.000 en forma indirecta.

Si analizamos el destino que se le da a cada uno de estas frutas, vemos que tan solo el 22% de las manzanas son exportadas. Los principales países importadores son Brasil, Estados Unidos, Rusia y Holanda. Por su parte, el mercado internacional de peras alcanza el 59%, siendo los principales destinos Brasil, Rusia y la Unión Europea. Además el 37% de las manzanas son direccionadas al mercado interno, mientras que 14% de las peras son consumidas en nuestro país. Por último, en cuanto a la producción frutícola industrializada, el 83 % se destina a jugo concentrado; un 5 % a deshidratados y otros derivados; y el 12 % a la elaboración de sidras. Nuestro país junto a la República Popular China son los principales exportadores de jugos de fruta de pepita a nivel mundial y su principal importador es Estados Unidos.

Si bien un análisis apresurado de la situación de la fruta en pepita parecería dar signos positivos, lo cierto es que la realidad de la mayoría de nuestros productores no es para nada alentador. Para encontrar las razones por las cuales estos atraviesan esta difícil situación es necesario remontarnos al año 1976, cuando el golpe de Estado comienza a implementar el modelo económico político y social conocido como "neoliberalismo", el cual alcanza su máxima profundización en la década de 1990. Respecto a las economías regionales, el plan económico se caracterizó por favorecer al capital financiero y a los intereses vinculados a empresas trasnacionales. Alcanzando así una alta concentración de las tierras productivas en pocas manos y la mayoría de ellas extranjeras.

Actualmente el área productiva equivale a 50.000 hectáreas repartidas en 2256 productores de peras y manzanas. Sin embargo, conviven en estas regiones productores que poseen extensiones que no superan la unidad productiva o que se encuentran por debajo de las mismas, es decir, tierras entre 12 y 15 hectáreas. Estos representan al 56% de la totalidad de los productores y al 16% de la zona productiva. La mayor consecuencia de este proceso es que en el sistema actual de producción, el minifundio pone fuera del mercado a mencionados productores.

No obstante, la mayor producción se encuentra en los niveles medios de extensión territorial (entre 20 y 50 hectáreas), donde se ubican el 14% de los productores y ocupan el 22% de la superficie de producción.

Por otro lado, nos encontramos con los productores que poseen una extensión de tierra que supera por exceso la unidad productiva, estos son tan solo el 2% y ocupan el 36% de la superficie. Además estos son quienes dominan la cadena productiva en forma vertical, lo que los ubica en una posición de dominio respecto de aquellos que poseen pocas hectáreas y no se encuentran integrados.

Con la creación del Instituto Nacional de la Pera y la Manzana se busca fomentar las exportaciones. Argentina fue uno de los países de mayor exportación de estos productos a lo largo de la historia. Respecto a la manzana perdió su liderazgo en los últimos años. Los motivos fueron varios pero sin duda la falta de financiamiento para ampliar la producción a varietales de mayor aceptación a nivel mundial tales como la "Golden" y "Fuji" fue gravitante. En la actualidad del total de la producción de manzanas Argentinas solo el 1% corresponden a esas especies. El 99% restante de la producción equivalen a "Red delicius" y "Granny Smith" que se encuentran en baja respecto a sus volumenes y precios internacionales. En ese sentido, durante el 2014 nuestro país exporto 209.0000 toneladas. Si analizamos el mercado mundial, las estadísticas indican que actualmente la República Popular China lidera este ranking con la exportación de alrededor de un millón de toneladas, seguido por Polonia, Italia, Estados Unidos y Chile donde sus exportaciones ascienden a 800.000 toneladas. Respecto a la pera, Argentina sigue siendo el principal exportador a nivel mundial con 460.000 toneladas, seguido de cerca por la República Popular China con volúmenes que rondan en 430.000 toneladas y en tercer lugar la Unión Europea con exportaciones de 260.000 toneladas.

Por otro lado, el proyecto busca ser un estímulo para el consumo interno de manzanas y peras por habitante. En la actualidad se estima que en Argentina se consumen 8 Kg de manzanas por persona al año y 2 Kg de peras. Estos índices son bajos si lo comparamos a años anteriores, en 1997 el consumo de manzanas era de 11,2 Kg y lo mismo sucede si lo cotejamos con otros países: Unión Europa 25,6 Kg de manzanas y 5 Kg de peras, Nueva Zelanda 12,6 Kg de manzanas y 3,4 Kg de peras por habitante al año.

En suma Sr. Presidente , es por los motivos antes expuestos, que solicito la aprobación del presente proyecto.