La Cámara de Diputados de la Nación

RESUELVE:

1º - Rendir homenaje al general don Martín Miguel de Güemes, con motivo de conmemorarse el día 17 de junio de 2007 el 186º aniversario de su muerte en defensa de nuestra independencia.

2º - Declarar de interés parlamentario el actos conmemorativos y la "guardia bajo las estrellas" que se llevarán a cabo los días 22 y 23 de Junio de 2007 al pie del monumento al general don Martín Miguel de Güemes, ubicado en la avenida Figueroa Alcorta de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires,

3º - Adherir a los homenajes que se realizaran en la Provincia de Salta.

4º - Comunicar la presente resolución a los gobiernos provinciales y de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, a fin de invitarlos a adherir a la misma.

Señor presidente:

El 17 de junio de 1821 moría en la provincia de Salta el general Martín Miguel de Güemes, héroe de nuestra independencia.

Hay que destacar que el general Güemes dedicó su vida entera al servicio de la patria.

Apenas salido de la adolescencia participó en Buenos Aires de la lucha contra el invasor inglés. Le cupo asimismo una destacadísima intervención en Suipacha, la primer victoria de las armas de la patria. Su actuación posterior, al frente de las milicias gauchas, tuvo trascendencia continental, dado que resultó imprescindible para el desarrollo de las actividades militares de San Martín y Bolívar.

Hay que tener presente que el territorio que hoy ocupan las provincias de Jujuy y Salta era de paso obligado para cualquier fuerza realista que intentase llegar desde el Perú, centro del poderío español en el continente, hasta la capital del Virreinato del Río de la Plata. Y fue por eso que los realistas hicieron entre los años 1815 y 1821 numerosos intentos para realizar ese camino y sofocar la revolución, y nunca lo lograron porque lo detuvieron siempre las milicias saltojujeñas.

Güemes fue elevado al rango de general a instancias del propio San Martín, y su accionar se encuadró definidamente dentro del plan continental de la independencia sudamericana.

Con el fin de aclarar y dar un ejemplo del rol que cupo a las milicias de Güemes, podemos reseñar una de las invasiones realistas que detuvieron, la sucedida en el año 1817.

Esa invasión fue comandada por el mariscal La Serna. Un dato de singular importancia es que tanto él como sus oficiales llegaban de Europa tras haber vencido nada menos que a las fuerzas napoleónicas.

En un oficio a Pezuela, virrey del Perú, La Serna expuso decididamente que su plan era invadir Buenos Aires, partiendo desde el Alto Perú.

En esos días, el general San Martín partía hacia Chile cruzando la cordillera de los Andes. Todos los esfuerzos realizados por el país se hacían en soporte de esa empresa. El Ejército del Norte, al mando del general Belgrano, que se hallaba estacionado en Tucumán habían partido previamente hacia Mendoza llevando a sus más brillantes oficiales como Alvarado, Arenales, Necochea, entre otros, y a los regimientos enteros de la tropa. La debilidad en que había quedado dicho ejército era evidente, por lo que el general Belgrano, al conocer la noticia de que los realistas se hallaban a las puertas de Jujuy, se vio obligado a emitir un bando en que se ordenaba a la población estar preparada para un éxodo.

Las fuerzas de La Serna ascendían a unos 5.500 hombres, y como hemos dicho sus oficiales estaban brillantemente preparados para las batallas de campo, eran militares muy experimentados que venían de vencer nada menos que a los ejércitos de Napoleón.

Con estos acontecimientos, la suerte de la patria y la del propio plan sanmartiniano, dependían entonces exclusivamente de la manera en que se desempeñasen las milicias comandadas por Güemes.

En este ámbito, no corresponde hacer el detalle de todas las acciones de guerra que se sucedieron en ocasión de esta invasión, sólo cabe decir que la invasión de 1817 fue el intento más importante llevado a cabo por el ejército español para recuperar el territorio del Virreinato del Río de la Plata, y que luego de seis meses de lucha las fuerzas realistas tuvieron que retroceder derrotadas por la hábil guerra de recursos y de guerrillas que jujeños y salteños le opusieron.

Güemes, soldado heroico de la patria, es sólo la cabeza, el genio militar que coordinó el accionar de todo un pueblo. La gesta de Güemes es el símbolo y la culminación del esfuerzo supremo que para la causa de la patria supieron realizar el pueblo jujeño, que fue el más afectado por la guerra, el salteño y el de Tarija, hoy perteneciente a la hermana República de Bolivia.

Hay que reconocer que sus lecciones de patriotismo han sido tan notables, y duraderas en el sentir del pueblo salteño, que es digno y honroso que cada año sea conmemorada su muerte con la "guardia bajo las estrellas" al pie de los monumentos que en su nombre se alzan tanto en la capital de la provincia que fuera su cuna como en la capital del país.

Si bien la finalidad del presente proyecto de resolución es que la Honorable Cámara de Diputados de la Nación rinda un justo y sincero homenaje a la ejemplar figura del general Güemes con motivo de cumplirse el 186º aniversario de su muerte; es igualmente oportuno solicitar que se comunique esta declaración a los gobiernos provinciales y al de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, a fin de invitarlos a adherir a la misma.

Es por el orgullo que despierta la figura del general Martín Miguel de Güemes en el pueblo salteño, como en el resto del país, que solicito a mis pares me acompañen en la aprobación del presente proyecto de resolución.