La Cámara de Diputados de la Nación

RESUELVE:

Adherir al Día Internacional de las Familias a celebrarse el 15 de mayo, conmemoración proclamada por la Asamblea General de las Naciones Unidas en su resolución 47/237 del 20 de septiembre de 1993, con el objetivo de aumentar el grado de concienciación acerca de los temas relacionados con la familia y fomentar los lazos familiares.

Señor presidente:

Es indudable que universalmente la familia continúa siendo considerada la célula básica de la sociedad. Es uno de los vínculos afectivos más poderosos dónde se nos prepara para la vida en sociedad.

La familia se ha constituido desde su origen primigenio en el lugar de crecimiento de la persona humana, donde encontramos protección y seguridad. Pero este proceso es distinto cuando tomamos una familia de los países más desarrollados y la comparamos con las familias de lo que todavía se define como países del "Tercer Mundo". En estos últimos, las familias padecen más pobreza y necesidades básicas insatisfechas, a la par de muchas veces tener que resignar la posibilidad de darles a sus hijos una vida mejor por no tener oportunidades de hacerlo.

De todas formas, esto no significa que en los países con mejor nivel de vida las familias no tengan problemas, sólo son diferentes, porque las necesidades a las que se enfrentan son más emocionales que económicas.

En este contexto, muchas cuestiones sobre las que el Estado debe legislar tienen que ver con el fortalecimiento de la capacidad de la familia para atender sus propias necesidades, el equilibrio entre el trabajo y las responsabilidades familiares, la reducción de la violencia doméstica y el alivio de la pobreza, entre tantas otras.

Por todo ello, el Día Internacional de la Familia fue proclamado por la Asamblea General de las Naciones Unidas en su resolución 47/237 del 20 de septiembre de 1993, con el objetivo primordial de que, a través de esta celebración anual, se refleje la importancia que la propia comunidad internacional les otorga, al considerarlas como unidades básicas de la sociedad, como así también demostrar su preocupación en cuanto a la situación de la misma en todo el mundo. La ONU reconoce y afirma la importancia de la familia como un lugar privilegiado para la educación.

Así, esta celebración es una oportunidad a nivel mundial para que las familias demuestren su solidaridad y reflexionen sobre cómo mejorar la relación entre todos sus miembros, como así también los Estados se orienten a aumentar su entendimiento en los temas de familia y a mejorar su capacidad institucional para abordar, mediante políticas integrales, los serios problemas relacionados con este asunto, dado que es evidente la necesidad de poner a las familias en el foco del proceso de gestación de las políticas públicas.

Por todo lo expresado anteriormente con motivo de la festividad aludida, solicito el apoyo de mis pares para la sanción del presente proyecto.-