La Cámara de Diputados de la Nación

DECLARA:

Que vería con agrado que el Banco de la Nación Argentina capacite a sus gerentes y empleados de todas las sucursales del país en lo que respecta a las características y particularidades que tiene el sector del turismo y su relación con la actividad del Banco, para poder dar respuesta así a la necesidad de atender a un sector con excelentes perspectivas de inversión en la Argentina.

Señor presidente:

El turismo es una de las actividades productivas con mejores perspectivas en la Argentina. Las estadísticas demuestran que desde el extranjero se mira con interés al país en ese aspecto, lo cual queda demostrado en forma cabal por el sostenido incremento de la bien denominada industria sin humo.

Durante 1990, la Argentina captó 2.116.476 turistas; en 1998, esa cifra ascendió a 4.859.867, hoy sin dudas esa cifra ha aumentado considerablemente por el tipo de cambio actual, y además en este contexto, también ha aumentado el turismo interno, interprovincial.

Varios factores contribuyeron para que se produjese ese sustancial incremento: el formidable aumento de la capacidad hotelera, porque ahora Buenos Aires posee más de una decena de hoteles de cinco estrellas, hay establecimientos de parecida importancia en diversos puntos del interior y a ellos se suman, en calidad de oferta no tradicional, cabañas, moteles, estancias turísticas, posadas, etcétera. Toda esa infraestructura permite que a lo largo y lo ancho de nuestro país -invalorable ayuda para las economías regionales- se pueda escuchar hablar en los más diversos idiomas extranjeros.

Por su parte, el Banco de la Nación Argentina debe tener un perfil concentrado a prestar asistencia financiera a las micro, pequeñas y medianas empresas con especial énfasis en algunas actividades entre las que se puede destacar al turismo, como principal herramienta para el desarrollo en varias provincias del país.

En este contexto cabe destacar que se debe aumentar las líneas de financiamiento del Banco destinadas a apoyar inversiones en: ampliación, refacción y terminación de hoteles; construcción de instalaciones; equipamiento; y refuerzo de capital de trabajo de pretemporada y actividades de servicios relacionadas con el turismo.

La importancia que está adquiriendo la actividad turística en nuestro país, empuja a preparar y capacitar a los empleados de la entidad para poder dar respuestas a las necesidades de un sector con particularidades especiales como es el turismo.

Un producto implica distintas variables: competitividad, calidad, características únicas. El tango de Buenos Aires, el turismo urbano, el termalismo en la provincia de Entre Ríos, la nieve y la montaña, los glaciares en el sur argentino, el vino de Mendoza, la observación de flora y fauna, el ecoturismo en los parques nacionales argentinos son algunos de nuestros productos distintivos que serán posicionados en el mercado internacional.

Todos estos puntos pueden ser abordados desde múltiples alternativas turísticas, tales como los llamados paquetes de fin de semana o de tres días, el miniturismo, el turismo aventura, el histórico, el naturista puro, el deportivo y muchas otras propuestas por el estilo.

Dada esta diversidad de productos y destinos turísticos, nuestro país posee la enorme oportunidad de atacar fuertemente, con políticas de Estado apoyadas desde el sector privado, a los países más gastadores en turismo y de esta manera obtener un crecimiento sostenido en las provincias que desarrollaron y desarrollan esta actividad. La capacitación es el camino adecuado para enfrentar este desafío.

Por todo lo expuesto, solicito la aprobación del presente proyecto de declaración.