La Cámara de Diputados de la Nación

RESUELVE:

Dirigirse a los organismos pertinentes del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, a los fines de proponer la sustitución del nombre de la Avenida Rivadavia, por la de Avenida "Del Bicentenario", conforme al hecho histórico y significativo para todo el país, y convocar a los Municipios de la Provincia de Buenos Aires, por los que recorre la mencionada Avenida, para que se adhieran al presente proyecto.

Señor presidente:

Para empezar el análisis de esta propuesta primero debemos tener en cuenta que, como todos sabemos la Avenida Rivadavia es una de las más importantes arterias de la Ciudad de Buenos Aires y del oeste del Gran Buenos Aires.

Debe su nombre al primer presidente de las Provincias Unidas del Río de la Plata, Bernardino Rivadavia. Desde 1935 hasta 1988 el tramo que se encuentra fuera de la Ciudad de Buenos Aires formó parte de la Ruta Nacional 7.

Según cifras de Tránsito de la Ciudad, sólo en la ciudad de Buenos Aires, la avenida tiene 106 cruces con semáforos. En toda su extensión pasan 83 líneas de colectivos. 11 de las 16 estaciones de la línea Línea A de la red de subterráneos porteña corre bajo la avenida, la línea Línea D nace en la intersección de esta avenida y Diagonal Norte; y en el barrio de Balvanera a la altura de Avenida Pueyrredón, cruza la línea Línea H.

Comúnmente se la denomina como el límite entre la zona norte y la zona sur de la ciudad de Buenos Aires. Todas las calles y avenidas cambian de nombre al cruzarla, con excepción de las Avenidas 9 de Julio y General Paz.

Nace en la Plaza de Mayo, centro histórico de la ciudad de Buenos Aires y finaliza 30 km después, en el Río Reconquista, en el partido de Merlo, Provincia de Buenos Aires.

Su nacimiento se encuentra en el casco histórico de la ciudad de Buenos Aires, desde la punta noroeste de la Casa Rosada, transcurre por el borde de la histórica Plaza de Mayo, la casa central del Banco Nación y la Catedral Metropolitana.

Durante sus primeros 1.000 m, corre como una calle estrecha, rodeada de grandes edificios de oficinas del micro-centro porteño y gran aglomeración de peatones que transcurren por sus transversales, como la peatonal más famosa de la ciudad, la Calle Florida que nace hacia el norte, a la altura de Rivadavia al 600.

Al ser paralela a la Avenida de Mayo, ocupada por grandes edificios cuyos lotes tienen entrada por ambas calles, dan a ella las puertas traseras de importantes residencias y edificios empresariales construidos a fines del siglo XIX, como el ex diario La Prensa (Casa de Cultura) y el Palacio Municipal, aunque también hay torres modernas: la Torre La Buenos Aires y la Pérez Companc. Al 800 de Rivadavia se encuentran los estudios de Radio Continental, y sobre la mano derecha, la primera entrada que tuvo el Café Tortoni en 1880.

Continúa su recorrido hacia al oeste, siendo límite entre los barrios de Monserrat y San Nicolás, cruzando la Avenida 9 de Julio (en la esquina de la calle Carlos Pellegrini hay un edificio racionalista del arquitecto Arturo Dubourg, que alojó en la planta baja durante largos años a la Ferretería Francesa, actualmente un supermercado Norte) para recorrer sus últimos 400 m como calle.

A la altura de la Calle Paraná y la Plaza del Congreso se convierte en Avenida Rivadavia. El Teatro Liceo, ubicado en Rivadavia 1495, es el más antiguo de Buenos Aires. En la esquina opuesta funciona en la planta baja el Consulado de Perú en Buenos Aires. En el nº 1635 está el Cine Gaumont, espacio cultural del INCAA.

200 metros más adelante se encuentra el Congreso Nacional y la intersección de Avenida Callao y Avenida Entre Ríos. En la otras esquinas de este importante cruce están el edificio de la cerrada Confitería del Molino (arq. Francesco Gianotti 1917/1917) y el restaurante Plaza del Carmen. Frente al Palacio del Congreso se inauguró en 1984 (reinicio de las actividades parlamentarias luego del Proceso de Reorganización Nacional) el Anexo de la Cámara de Diputados de la Nación, un moderno edificio vidriado proyectado dos décadas antes por el estudio Mateo / Sánchez / Gómez / Santos / Solsona / Viñoly

Bajo desde este punto empieza a correr la línea A Línea A de subtes. En la esquina de la calle Ayacucho resalta la cúpula vidriada de un edificio de estilo art nouveau que homenajea al catalán Antonio Gaudí (arq. Eduardo Rodríguez Ortega, año 1907). En la esquina de la calle Sarandí fue reconstruido en 2007 un mítico reducto tanguero, el Café de los Angelitos que se había incendiado en 1992.

Al ingresar al barrio de Balvanera en inmediaciones de Plaza Miserere, área comúnmente llamado Once se encuentran numerosos locales de ropa y de comidas rápidas. En el nº 2774 está el edificio de departamentos construido para el Nuevo Banco Italiano.

La Plaza Once de Septiembre es uno de los nodos de transportes más importantes de la ciudad, aquí se encuentra la Estación Once del Ferrocarril Sarmiento, las estaciones Plaza Miserere y Once de la red de subterráneos, y decenas de paradas de colectivos alrededor de la Plaza Miserere con destino a diferentes puntos de la ciudad y el conurbano bonaerense, recorriendo parte de esta arteria vial, así también como de las avenidas Pueyrredón y Jujuy. Bajo la recova de esta avenida también se toman buses que parten hacia Bolivia.

Al oeste de las calles Sánchez de Loria (hacia el sur) y Sánchez de Bustamante, Rivadavia atraviesa longitudinalmente el barrio de Almagro. En esta área se encuentran muchos edificios residenciales de mediana altura, como las clásicas casas "de los Lirios" (Rivadavia 2013) y "de los Pavos Reales" (Rivadavia 3216); el edificio racionalista de la Sucursal Once del Automóvil Club Argentino (Rivadavia 3319) y la tradicional Confitería Las Violetas en la esquina con la Avenida Medrano.

Al llegar a Caballito, la avenida se pierde entre altos edificios residenciales de la segunda mitad del siglo XX y grandes centros comerciales. Pasa frente al Parque Rivadavia, el Edificio Ángel Giménez levantado por la cooperativa El Hogar Obrero (en cuya planta baja funciona el Caballito Shopping Center), el Mercado del Progreso y la Plaza Primera Junta, importante centro de transbordo de transportes. Desde la calle Emilio Mitre hacia el oeste la avenida tiene doble sentido de circulación, al unirse con la calle Rosario que circula hacia el este.

En la zona del barrio de Flores, la avenida se llena de bares y discotecas de vida nocturna, cerca de la Avenida Nazca. En la zona del cruce con la Avenida Carabobo hay gran cantidad de sucursales bancarias que forman un polo financiero que alcanza la Plaza Pueyrredón (conocida como Plaza Flores), frente a la cual se levanta la antigua Iglesia de San José de Flores que dio nombre al barrio. En la esquina de la calle Culpina se destaca el moderno edificio de la Sucursal Flores del Banco Ciudad, otra obra del estudio de arquitectos Manteola / Sánchez Gómez / Santos / Solsona / Viñoly.

En el sector comprendido entre Floresta y Villa Luro, predominan las edificaciones medianas y bajas. En la esquina de la calle Pergamino, en el antiguo edificio del Cine Teatro Fénix funciona la discoteca Retro. Al cruzar la Autopista Perito Moreno, hay un acceso a la misma en dirección al este. Allí se encuentra un gran edificio comenzado a construir por El Hogar Obrero, abandonado inconcluso y finalizado en 1996 por la Comisión Municipal de la Vivienda. El pequeño centro comercial de Villa Luro se nuclea alrededor de la Plaza Ejército de los Andes, y se destacan los altos edificios gemelos de El Hogar Obrero llamados Juan José Díaz Arana, con un supermercado Coto en su planta baja a la altura del 9800.

En inmediaciones a la estación ferroviaria del barrio de Liniers, se concentra un amplio centro comercial a cielo abierto, con un shopping, varias sucursales bancarias y diversos negocios de todos los rubros. Predominan los comercios sin vivienda en el piso superior, pero los pocos edificios del barrio son de grandes dimensiones y altura. A partir de la estación Liniers del Ferrocarril Domingo Faustino Sarmiento la avenida empieza a correr paralelamente a las vías. Esto requiere un complicado intercambiador con la Avenida General Paz dada la imposibilidad de poner las rampas de acceso a la autopista sobre las vías del ferrocarril.

En la Provincia de Buenos Aires:

En Ciudadela la avenida pasa a sólo 100 metros del Cementerio Israelita de Liniers, que se encuentra cruzando las vías.

En Ramos Mejía y Villa Sarmiento presenta grandes edificios en su entorno, así como numerosos bares.

Al llegar a Haedo toma una curva y contracurva, para seguir camino bordeando los antiguos talleres ferroviarios.

Al llegar a Morón se hace mano únicamente hacia el oeste, recorriendo su centro comercial, y finalizando abruptamente en las instalaciones del Club Deportivo Morón. Es de allí, que vuelve a aparecer como una simple calle ya en la localidad de Castelar; bordea las vías del ferrocarril del lado norte, luego retoma hacia el sur, para perderse nuevamente en los talleres ferroviarios. Unos metros más adelante, reaparece como gran avenida, siendo continuación de la Avenida Zeballos.

A partir de este punto y a través de toda la localidad de Ituzaingó, es el último tramo en el que todavía recibe el nombre de Avenida Rivadavia.

Al ingresar en la ciudad de San Antonio de Padua sigue manteniendo su numeración, pero toma el nombre oficial de Av. Presidente Perón, siendo igualmente común en esta zona, seguirla llamando simplemente Rivadavia. El último trayecto se da en la ciudad de Merlo, donde luego de pasar por su centro, toma rumbo paralelo norte a las vías de tren, para finalizar en el puente sobre el Río Reconquista, límite con el partido de Moreno, donde la arteria pasa a llamarse Avenida Bartolomé Mitre y comenzando con numeración 0.

Historia

En el siglo XVIII, la actual avenida sufrió varios cambios de nombre. Hacia 1782 se la conoció como Calle de Las Torres o de Los Reynos Del Arriba, más tarde se la denominó calle Plata y en su extensión, fuera del ámbito urbano fue el llamada Camino Real del Oeste, que extendía su recorrido desde la ciudad de Buenos Aires, pasando por Luján, hasta la ciudad de Mendoza. En 1835, se le asignó el nombre del caudillo riojano Facundo Quiroga luego de que sus restos fueron llevados a Buenos Aires a través de este camino. En 1836, el gobernador Juan Manuel de Rosas la bautizó Federación. Recién en 1857 fue Rivadavia. Excepto entre 1893 y 1901, cuando el tramo entre Av. La Plata y Liniers se llamó Primera Junta. Por esta avenida circuló en 1928, el primer colectivo, desde Primera Junta hasta Lacarra. Desde 1935 formó parte de la Ruta Nacional 7, hasta que esta asignación se le fue dada a la Autopista Acceso Oeste, por lo cual Avenida Rivadavia pasó a ser parte de la Ruta Provincial 7 de la Provincia de Buenos Aires.

Como segundo punto es de suma importancia considerar la conflictiva y contradictoria historia política y diplomática de Bernardino Rivadavia, en general siempre fuertemente influenciada por su formación o adoctrinamiento pro británico y liberal. Entre otros, y simbólico, se reconoce que le es dado un poder para tomar el primer empréstito bochornoso de la historia Argentina, otorgado por la famosa firma inglesa The Baring Brothers a tasas espectaculares y con comisiones muy dudosamente consentidas y cuyos intermediarios se quedaron con casi la mitad del millón de libras esterlinas prestadas y la devolución fue finalizada ochenta años después por casi veinte veces la suma original y el destino para el que fue autorizado el préstamo nunca se cumplió, que era la construcción de un puerto, tres ciudades, un banco y la red de agua y cloacas. En cambio termina por prestarse a particulares a tasas muy inferiores a las que, con la garantía de "toda la renta, tierra y bienes", el estado argentino estaba empezando a pagar. O la inagotable energía con la que contradijo y boicoteó todos los intentos de nuestro Padre de la Patria para asumir mas poder y recursos para finalizar la lucha por la independencia definitiva del Alto Perú y que tuvo que cederla a Sucre dividiendo el territorio y creándose la República de Bolivar, actual Bolivia (mayor logro de los ideólogos de la zoncera que reza: "el mal que aqueja a la Argentina es la extensión"). Y otra razón no menos importante (entre varias mas, iguales de asombrosas) de este punto a considerar es la expresa última voluntad de este personaje tan importante e influyente de nuestra historia que pidió que a su muerte su cuerpo "no volviera jamás a Buenos Aires" y a pesar de ello, sus restos fueron repatriados en el año 1857 y desde 1932 descansan en el mausoleo levantado en su honor en Plaza Miserere y de norte a sur se le erigen toda clase de distinciones, nombramiento de calles, plazas, ciudades, eventos etc.

Finalmente, como tercer punto, me interesa expresar que en toda la extensión del país se están realizando homenajes y conmemoraciones, eventos artísticos e intelectuales, balances y discusiones sobre el bicentenario. En todo el sub-continente el bicentenario es tema de reivindicaciones y debates, como en época del centenario pero con una visión ideológica diferente de las luchas revolucionarias, de los modelos históricos, de los planes estratégicos de "la Patria Grande". Una visión más cercana a la de San Martín, Artigas, Bolívar, Nuestros Gauchos y originarios del Norte como Güemes, Manuel Padilla, Juana Azurduy, las montoneras de Varela y Peñaloza, la defensa Mbya guaraní de las invasiones lusitanas con Nicolás Ñeenguirú e Ignacio Abiarú a la cabeza, los próceres de mayo como Mariano Moreno y Manuel Belgrano. Una visión integradora de todas las culturas y naciones a través de la eliminación definitiva de cualquier tipo de colonialismo avasallante y con la decidida intención de los diversos gobiernos de construir un nuevo tipo de relación a través de las coincidencias históricas.

Por lo tanto considero que una de las avenidas mas características de la Argentina debería llevar el nombre de este momento histórico concreto que se viene sucediendo con tantas emociones y actividades reivindicativas con muchas esperanzas de la construcción de un país decididamente justo y solidario, que reconoce a sus minorías y realza a sus verdaderos héroes y mártires y que avanza hacia la soberanía política y financiera con el respeto de la comunidad regional y con el espíritu de bloque, fundamentalmente cultural, en el que vamos construyendo las relaciones internacionales.

Es necesario recordar la caracterización que de Rivadavia hacía el padre de la Patria, don José de San Martín cuando se refería a éste "malvado personaje que tanto daño causara a la nación y a su pueblo".

Por todo lo acá expuesto, solicito a mis pares, acompañen el presente proyecto de Resolución.