La Cámara de Diputados de la Nación

RESUELVE:

Dirigirse al Poder Ejecutivo nacional para que, a través de los organismos que correspondan, informe en relación al llamado virus del Nilo occidental (VNO) que ha tomado inusitada fuerza en los últimos meses, no solo en diversos lugares del mundo, sino ahora también en la provincia de Buenos Aires, sobre las siguientes cuestiones:

1) El número de denuncias que fueron recibidas en los últimos doce meses por parte de personas que aseguran haber sido sus animales damnificados.

2) El número de casos comprobados, características y detalle de los mismos.

3) El número de animales sospechados aproximado de haberlo contraído.

4) Si existen casos comprobados de la enfermedad en otras provincias del país, al margen de la provincia de Buenos Aires.

5) Las medidas que eventualmente adoptará el Poder Ejecutivo nacional en carácter preventivo u otro, para intentar combatir ésta peste, y que no se traslade a otras regiones del país.

6) ¿Qué grado de verosimilitud tienen las versiones periodísticas que señalan la llegada de éste virus a distintos países de Latinoamérica?

7) Si ya se ha efectuado un entrecruzamiento exhaustivo de datos en

relación a los hechos registrados en el último año, a fin de intentar

su investigación y esclarecimiento, tal como vienen reclamando un número de dueños de animales víctimas de dicha enfermedad.

8) Informe finalmente, si ya se están tomando las medidas necesarias

para contrarrestar riesgos.

Señor presidente:

El virus del Nilo occidental (VNO) es una enfermedad que puede ser grave; los expertos consideran que se ha convertido en una epidemia de temporada en EE.UU., que recrudece en el verano y continúa hasta el otoño.

El VNO es transmitido por el mosquito Culex, que se infecta al alimentarse de aves ya infectadas y después transmite el virus a los seres humanos y a los animales a través de picaduras. Una vez que se encuentra en el torrente sanguíneo, el virus se multiplica y se propaga y si llega al cerebro, provoca una encefalitis: una inflamación del cerebro que puede afectar a todo el sistema nervioso; y si bien es infrecuente, la encefalitis, la meningitis o la meningoencefalitis son las complicaciones más graves o severas que conlleva el mismo.

La mayor parte de las veces, la infección causada por el VNO provoca una enfermedad leve. Una persona puede presentar síntomas similares a los de la gripe, tales como fiebre, dolor de cabeza, dolor en el cuerpo y, a veces, una erupción en la piel e inflamación en los ganglios; incluyendo síntomas de jaqueca, fiebre elevada, rigidez en el cuello, desorientación y, en algunos casos, convulsiones. Aunque es bastante inusual, la infección severa por el VNO en personas jóvenes y saludables puede resultar fatal, pero son las personas mayores quienes presentan más riesgos de complicaciones graves a causa del virus.

El VNO está instalado desde hace varias décadas. Generalmente, se lo encuentra en África, Europa del Este, Asia occidental y Medio Oriente, pero hasta el año 1999 no había sido hallado en el hemisferio occidental; se ignora de qué manera entró en los Estados Unidos, pero los expertos aseguran que es muy similar a las cepas que existen en Medio Oriente. Generando el caso preocupación en la industria hípica argentina, inquieta por el recuerdo de lo ocurrido en aquel país en 2002, cuando el mal enfermó a más de 15.000 caballos, registrando un 30% de mortandad ante pérdidas millonarias para el sector de las carreras.

El hecho alarmante nos tocó en nuestro país, cuando el pasado 24 de abril, autoridades de la provincia de Buenos Aires a través de la dirección de Epidemiología confirmaron la muerte de dos pura sangre por el VNO, constatación comunicada por el Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) por muestras evaluadas en el Instituto Nacional de Enfermedades Virales Humanas (Inevh); anunciándose la suspensión de las exportaciones de equinos, un rubro fuerte en la Argentina, en especial los destinados a la actividad deportiva. El ministerio de Salud bonaerense aseguró que no se han reportado casos en seres humanos y que se trabaja en una campaña de prevención en todo el país.

El Presidente de la Asociación Argentina de Veterinaria Equina, Mario López Oliva, consideró que no sería necesario por el momento suspender las carreras a menos que se reporten más casos en las últimas semanas. Nuestro país es un fuerte vendedor de caballos deportivos al exterior, actividad que ahora quedará suspendida a partir de estos reportes por la supuesta llegada del VNO, a la espera que se conozcan los nuevos regímenes sanitarios que los equinos deberán cumplir.

Desde 2005 y contando sólo los de carrera, más de 500 caballos se han exportado para integrarse al turf de otras naciones; anualmente desde la Argentina se exportan unos 5.000 -entre petisos de polo, pura sangre y aquellos preparados para equitación- a un promedio estimado de 100.000 dólares c/u, lo que determina un ingreso que superaría los 500 millones de esa moneda estadounidense. Los equinos que ganan un par de carreras importantes en la Argentina pueden llegar a venderse entre 300.000 y 400.000 dólares, con un piso de entre 40.000 a 1.5 millón de la misma moneda a compradores de Estados Unidos, Emiratos Árabes, Francia, Italia, Arabia Saudita e Inglaterra.

Por lo expuesto, solicito el informe correspondiente, para el estudio, tratamiento y prevención correspondiente de dicha enfermedad.