La Cámara de Diputados de la Nación

DECLARA:

1) Rechazar enérgicamente la pretensión del Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte sobre la Plataforma Continental Argentina.

2) Rechazar por inadmisible e ilegal la presentación realizada por el Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte ante la Comisión de Límites de la Plataforma Continental de Naciones Unidas.

3) Repudiar la presencia ilegal de la fuerza colonial de ocupación del Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte en el territorio Nacional Argentino de Islas Malvinas, Georgias del Sur y Sandwich del Sur y aguas adyacentes.

Señor presidente:

El Gobierno Nacional a través de la Cancillería ha expresado su más enérgico repudio a la presentación realizada por el gobierno del Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte ante la Comisión de Límites de la Plataforma Continental (CLCS) de Naciones Unidas. Intentando generar un precedente legal para el futuro sobre las Islas Malvinas, Georgias del Sur y Sandwich del Sur y sus espacios marítimos.

Es importante tener presente que el artículo 76° de la Convención de la ONU sobre Derecho del Mar permite solo a los estados ribereños fundamentar sus pretensiones sobre la jurisdicción soberana. Está Convención debe determinar la extensión de los derechos nacionales de soberanía aplicables a la plataforma continental, así como el límite entre dichas plataformas y las zonas que permanezcan bajo jurisdicción de la Autoridad Internacional de los Fondos Marinos.

Este artículo 76° permite a los Estados Ribereños procurar la proyección de un límite exterior de su plataforma más allá de las 200 millas marinas y hasta una distancia de 350 millas marinas de la costa o 100 millas desde el punto en el que el mar alcance una profundidad de 2500 metros, siempre que se verifiquen las condiciones geológicas estipuladas. La Cancillería ha manifestado que los británicos pretenden arrogarse competencias relativas al límite exterior de la plataforma continental generada a partir de los archipiélagos que forman parte del territorio Nacional Argentino, lo que resulta inaceptable e inadmisible por corresponder el ejercicio de tales competencias únicamente al Estado Soberano: la República Argentina.

El Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte viene realizando desde 1833 una ocupación ilegal de parte del territorio Nacional Argentino, lo cual ha sido rechazado por todos los gobiernos y el Pueblo Argentino durante los 176 años de usurpación. La Asamblea General y el Comité de Descolonización de las Naciones Unidas han destacado reiteradamente la existencia de una disputa de soberanía sobre las Islas Malvinas, Georgias del Sur y Sandwich del Sur y los espacios marítimos circundantes. El 21 de abril del corriente año y en estricto cumplimiento de lo dispuesto por la Convención de las Naciones Unidas sobre Derechos del Mar, la República Argentina hizo entrega oficial de su presentación ante la Comisión de Límites de la Plataforma Continental para determinar en forma definitiva y obligatoria, la extensión geográfica de la totalidad del territorio Nacional.

En conjunto con la Cancillería de nuestro país reafirmamos los legitimos derechos de soberanía sobre Malvinas, Georgias (San Pedro) y Sandwich (Santiago) y los espacios marítimos circundantes, que son parte integrante del territorio nacional ArgentinoLa República Argentina jamás ha reconocido como legítima la usurpación británica de una parte de nuestro territorio. Por ello en cada foro internacional, en cada organismo internacional, y en la oportunidad que se nos brinde seguiremos bregando e insistiendo en que nuestro país posee legítimos derechos soberanos sobre nuestras Islas Malvinas, Georgias y Sandwich del Sur, y rechazaremos cualquier intervención colonialista sobre dicho territorio, basados en fundamentos históricos, geográficos y legales.

Que quede perfectamente claro, el Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte no es una nación ribereña en el Atlántico Sur, ya que es una potencia militar colonial extranjera, usurpándo por la fuerza nuestro territorio.

Es importante tener muy presente para comprender en su magnitud la conducta política británica violenta, colonialista, intervencionista e ilegal y de conflicto permanente contra nuestro pueblo y territorio, el intento frustrado de dominación con las invasiones de 1806 y 1807, la usurpación de Malvinas en 1833, la acción de la flota anglo-francesa con un punto culminante en la Batalla de la Vuelta de Obligado en 1845, y más recientemente la guerra de 1982 con su secuela de muertos y heridos.

Por último, entendemos que en forma inmediata nuestro país debe volver a presentar el tratamiento de la ocupación colonial en Malvinas a la Asamblea General de la ONU para su votación, tal como se hizo con éxito hasta 1989, en que el gobierno de entonces la retiró de ese ámbito, reduciéndola al Comité de Descolonización.

Por todo ello, solicito de mis pares el acompañamiento del presente proyecto de declaración.