La Cámara de Diputados de la Nación

DECLARA:

Su preocupación por las reiteradas denuncias efectuadas por la Asociación de Entidades Periodísticas de la Argentina, ADEPA, ante las cada vez más frecuentes manifestaciones y expresiones, efectuadas por el gobierno nacional y por sectores del oficialismo, contra la prensa en general y algunos medios en particular.

Señor presidente:

Según declaraciones de ADEPA "Primero fue la sugestiva multiplicación de proyectos y medidas orientados a incidir en la labor periodística o en la actividad de los medios, en un clima de confrontación. Luego, la campaña de afiches desplegada con una poderosa logística contra medios específicos, con sellos afines al gobierno y cuyo financiamiento no ha sido explicado. Ahora se suman nuevos motivos de alarma: la violación y difusión de correos electrónicos privados y los ataques personales contra editores y periodistas del diario Clarín".

ADEPA ha denunciado en diversos comunicados que Ernestina Noble y Héctor Horacio Magneto, entre otras personas han sido víctimas de espionaje informático,

La gravedad de los hechos no puede pasar desapercibida: se trata de un grave delito, que además de su mensaje de amedrentamiento afecta severamente la seguridad de las personas.

No es la primera vez que ADEPA condena estos episodios: el año pasado sufrieron violaciones de sus correos electrónicos periodistas y editores de Clarín, La Nación y Editorial Perfil,sin que hasta ahora haya habido resultados en la investigación.

Para la entidad, estas acciones se ven favorecidas cuando el hostigamiento y la estigmatización se reiteran en la actitud del poder político hacia la prensa y otros sectores de la sociedad, desplazando el diálogo y el debate como herramientas de convivencia.

Señor presidente, acordamos con ADEPA que estas expresiones revelan, una vez más, que la intolerancia, el agravio y la violencia suelen ser la respuesta elegida ante la publicación de informaciones y opiniones que contrastan con las lecturas de la realidad que realiza el oficialismo.

Compartimos con la Asociación de Entidades Periodísticas el concepto que, la labor periodística no está exenta del disenso, la opinión y el debate. Pero, cuando ese intercambio se reemplaza por el ataque personal, la amenaza permanente, la no aceptación del pluralismo o el clima de temor e impunidad, peligra la convivencia democrática, las libertades consagradas en nuestras leyes, y el respeto por los otros y sus creencias y opiniones.

Alentar, insistir o generar estos climas de enfrentamiento desde el poder político lesionan las instituciones de la República y comprometen el orden social y el respeto a la diversidad que deben garantizar los gobiernos democráticos.

Señor presidente por las razones expuestas solicitamos la aprobación del presente proyecto.