El Senado y Cámara de Diputados...

Art. 1: Inclúyese como inciso i, al artículo séptimo de la LEY DE IMPUESTO AL VALOR AGREGADO, TEXTO ORDENADO EN 1997, el siguiente texto:

"El Pescado fresco, las hortalizas la carne de chivo, cordero, conejo y cerdo ; cuando el comprador sea un consumidor final, el Estado Nacional, las Provincias, Municipalidades o la Ciudad Autónoma de Buenos Aires u organismos centralizados o descentralizados de su dependencia, comedores escolares o universitarios y obras sociales".

Art. 2: De forma

Señor presidente:

El Poder Ejecutivo Nacional ha promovido diversas acciones en procura de contener los fuertes incrementos de los precios al consumidor de la carne vacuna entre ellas el de promover alternativas al consumo de carne vacuna. Como es sabido, el precio de ese bien se ha incrementado considerablemente desde la salida de la convertibilidad.

Argentina encabeza con 65 kilogramos por año per capita el lote de países con mayor consumo de carne vacuna seguido por Uruguay con 42.

Entendiendo que en base a una importante demanda mundial que se conjuga con una disminución de la oferta exportable de países como Brasil y los EEUU mas importantes esfuerzos realizados por nuestro país en tareas de mejoramiento de la calidad, sanidad y la promoción externa de nuestras carnes ha contribuido a que el precio de la carne bobina alcance valores que comprometen la acción gubernamental de mantener estabilidad en los precios al consumidor.

Por ende, se requieren precisas medidas destinadas a incentivar el consumo de sustitutos y de esa manera detraer presión sobre los mercados domésticos de ganado bovino. Una manera clara es la que proponemos: eliminar el Impuesto al Valor Agregado de ciertos bienes. Verbigracia, el pescado, el chivo, el cordero, el conejo, y el cerdo. De esta forma, los precios de mercado de dichos productos descenderán fuertemente, lo cual les otorgará importantes ventajas comparativas y competitivas respecto de la carne bovina.

Entendemos que el incentivo del consumo mediante la reducción de precios de los posibles sustitutos de las carnes bobinas serán una medida con una visión mas de largo plazo que permitirá mejorar los saldos exportables y los stocks ganaderos a fin de poder en el mediano plazo recomponer la oferta cárnica ( hoy en una importante crisis) y permitirá el desarrollo de otros sectores ligados a las economías regionales y a las pequeñas y medianas empresas.

Por estas razones y las que oportunamente brindaré en el recinto de la H. Cámara, es que solicito a mis pares la aprobación del presente Proyecto de Ley.