La Cámara de Diputados de la Nación

RESUELVE:

Declarar de interés cultural de la Honorable Cámara de Diputados de la Nación la obra "DON ARTURO ILLIA" de Eduardo Rovner, dirigida por Héctor Giovine, que actualmente se representa en el teatro La Comedia de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.

Señor presidente:

Esta obra realiza una breve reseña de la vida de una persona especial como fue Don Arturo Umberto Illia. Esta personalidad fuera de lo común, destacada de nuestra historia desde todo punto de vista, es ejemplo desde lo humano, lo social y, fundamentalmente, desde lo político.

El libro refleja su vida desde 1928, año en que se recibió de médico en la Facultad de Ciencias Médicas de la Universidad de Buenos Aires, y que reuniéndose con el entonces Presidente de la República, Don Hipólito Yrigoyen, desiste de una beca en París y opta por ejercer su profesión en la ciudad de Cruz del Eje -Córdoba-, donde no había médico.

A partir de su militancia política y social paso por muchos cargo elegidos por sus conciudadanos que en ese acto decisivo reconocían al hombre con el que convivían diariamente. Así fue electo senador provincial y vicegobernador de la provincia de Córdoba; luego diputado nacional, gobernador de la provincia de Córdoba, cargo al que no pudo asumir por las presiones militares que obligaron al presidente Frondizi a anular las elecciones. Finalmente llegó a la primera magistratura tras haberse impuesto la fórmula de la UCR del Pueblo, que compartía con el entrerriano Carlos Perette, en los comicios del 7 de julio de 1963.

Esta escenificación muestra la vida de este gran hombre. Se lo ve desde distintas facetas: como médico austero y desinteresado; como hombre que cree en el amor; como marido responsable; como padre que educa con su ejemplo; como político militante, honesto y al servicio de su prójimo; entre otras.

Se recrean los momentos de su acceso al cargo de Presidente de la Nación; su conducta como tal; hechos íntimos que derivaban en la toma de sus decisiones; su respetuoso vínculo con empresarios como defensor de los interés del patrimonio nacional; su relación con las Fuerzas Armadas como Comandante en Jefe; su independiente postura con las potencias internacional reflejada en su relación con la embajada de Estados Unidos; el rol que ocupó a partir de su cargo con otros factores de poder del momento.

También se reflejan los momentos de su derrocamiento. Posteriormente reconocido por sus ejecutores, como un grave error para el país, al alterar una vez más la continuidad democrática. Ese golpe militar impidió un progresivo proceso de definitiva normalización democrática como Don Arturo pretendía.

La obra tiene como objetivo revalorizar el ejemplo de vida de una persona que, a pesar de ocupar el máximo cargo al que una persona puede aspirar, Presidente de la Nación, vivió y murió con tal austeridad que incluso en su internación en un hospital público para terminar sus días se preguntaba quién pagaría todo eso. Es decir que no es una proclama política o ideológica, sino que es la demostración del hombre que fue.

No puede discutirse que toda persona que hace política y se dedica a ella, tiene vocación y pretensión de poder. La vocación de Don Arturo era de servicio con absoluto desinterés económico, guiado por sus convicciones, con convincente fidelidad a los intereses e ideales de su partido, respetando los derechos de los ciudadanos con humildad y honestidad.

Demás está aclarar la importancia que como ejemplo para nuestros jóvenes tiene esta pieza teatral en un momento en que se descree de la actividad política, y cuando muchas veces se busca servirse de ella y servir por ella.

Por lo expuesto, y en reconocimiento de un argentino que es ejemplo de las diferentes generaciones que lo sucedieron, solicito el pronto tratamiento y su aprobación al presente proyecto.