PROYECTO DE TP
Expediente 2218-D-2011
Sumario: DECLARAR DE INTERES DE LA HONORABLE CAMARA DE DIPUTADOS DE LA NACION LA ENTRONIZACION DEL MURAL "LA CONSTITUCION GUIA AL PUEBLO", DEL PINTOR ARGENTINO GUILLERMO ROUX, REALIZADA EL DIA 6 DE ABRIL DE 2011 EN LA PROVINCIA DE SANTA FE.
Fecha: 02/05/2011
Publicado en: Trámite Parlamentario N° 39
La Cámara de Diputados de la Nación
RESUELVE:
Declarar de interés
parlamentario el mural "La Constitución Guía al Pueblo", obra
del destacado pintor argentino Guillermo Roux, entronizada en
el recinto de la Cámara de Diputados de la provincia de Santa
Fe el 6 de abril del presente año.
FUNDAMENTOS
Señor presidente:
El edificio de la
Legislatura de la provincia de Santa Fe se terminó de construir
en 1914. Desde su misma concepción, el recinto de sesiones de
la Cámara de Diputados guardaba un espacio en blanco para
ser ocupado por una obra de arte. Por fin en este año de 2011, a
casi cien años de inaugurado dicho palacio, el espacio es
ocupado por una obra mural de autoría del célebre pintor
argentino Guillermo Roux.
En un principio, iba
a estar allí la obra "Los Constituyentes del '53", ahora propiedad
del Congreso de la Nación. La majestuosa obra, ubicada en el
Salón de los pasos perdidos de la Cámara de Diputados de la
Nación, es un óleo sobre lienzo de Antonio Alice, quien
representó a la Asamblea nocturna del 20 de abril de 1853,
donde se abogó por que fuera sancionada la Constitución
Nacional.
Corría el año 1922
cuando Antonio Alice, que había viajado de Buenos Aires a
Santa Fe para conocer la ciudad, el Museo de Bellas Artes Rosa
Galisteo de Rodríguez y la Legislatura, se entusiasmó con la
idea de hacer una pintura sobre el día 20 de abril de 1853 para
que la misma fuera expuesta en el recinto de la Cámara de
Diputados. Joaquín V. González junto a otros intelectuales de la
época lo alentaron, y Alice comenzó a relevar información y a
preparar bocetos sin que -según los antecedentes históricos- el
entonces gobernador, Enrique Mosca o el presidente de la
Cámara de Diputados, Rodolfo Freyre (h), le hubieran encargado
formalmente el trabajo.
Alice investigó,
estudió, recogió información y datos de archivos o de personas
que conocieron a los congresales constituyentes. Viajó por las
provincias buscando testimonios familiares, rasgos heredados y
antiguos daguerrotipos. Para organizar su trabajo confeccionó
un cuadro sinóptico que le permitió reconocer a los veinticinco
personajes con su aspecto físico, edad, particularidades de su
idiosincrasia, etc. La composición debía tener una naturalidad
perfectamente humana, con todos los detalles posibles, capaces
de transmitir el sentimiento de aquel glorioso instante.
Utilizó modelos con
trajes de aquellos tiempos, confeccionados especialmente, y
realizó bocetos al óleo, tinta y grafito. Representó retratos,
estudios fragmentarios de gestos y manos, de las salas que
albergaron dicha reunión. Inclusive, bocetó al óleo el recinto de
la Cámara de Diputados de Santa Fe con la obra ubicada en el
panel para la que fue pensada. Muchos fueron los
inconvenientes con los que Alice se encontró para realizar los
bocetos de la obra: uno de ellos fue que el Cabildo de Santa Fe,
donde se habían reunido aquellos ilustres miembros del
Congreso, había sido demolido en 1908. Pero esto no fue un
impedimento; el artista construyó un diorama, una especie de
maqueta en escala de la sala del Cabildo, con los 25 personajes,
muebles, cortinas y adornos realizados en arcilla y recubiertos
por una capa de yeso coloreado.
En la
obra final, representó el total de los congresales, si bien cuatro
de ellos estuvieron ausentes el día de la Asamblea: "Hubiera
sido injusto olvidar en imagen a quienes deben ser
inmortales...".
Alice dispuso a los
diputados de modo que se los viera de frente, algunos sentados
y otros de pie; inclusive al presidente lo ubicó de espaldas,
sentado junto a la mesa.
Muchas veces
pintaba de noche, a la luz de las velas, para lograr esa
atmósfera dorada con tonos rojizos. Si observamos
detenidamente la obra de los constituyentes del 53, tenemos la
impresión de estar espiando toda la escena por la mirilla de una
cerradura, como si fuese realmente la Asamblea...
En marzo de 1933 -
once años después de haber comenzado la obra- Alice la
terminó y la ofreció al gobierno de Santa Fe, primero, y a las
máximas autoridades de la Nación, después. Finalmente, fue el
Congreso Nacional el que la hizo suya y la exhibe hasta hoy en
el Salón de los Pasos Perdidos, ya que en 1942 el Congreso de la
Nación resolvió comprarlo por ley en $ 75.000.
A su vez, en 1944, el
Gobierno de la provincia de Santa Fe adquirió los bocetos y las
piezas de arcilla que integraron el diorama: todas estas obras
son patrimonio del Museo Provincial de Bellas Artes Rosa
Galisteo de Rodríguez.
Los legisladores
nacionales por Santa Fe realizaron repetidamente proyectos
solicitando la restitución del cuadro a la provincia, para que el
cuadro estuviera finalmente en el sitio para el que había sido
proyectado, en la Ciudad de Santa Fe, cuna de la Constitución
nacional, pero nada de eso ocurrió ya que la adquisición se
había concretado por parte de la Nación.
Sólo se consiguió
llevar este cuadro a la Ciudad de Santa Fe en carácter de
préstamo en una oportunidad: en el año 1973, mientras
duraron los actos por los 400 años de la fundación de la
ciudad.
En la Ciudad de
Santa Fe descansan los restos del pintor que, con el
consentimiento de la familia, fueron trasladados en 1999 desde
el panteón militar del cementerio de la Chacarita al Museo del
Convento de San Francisco.
Muchos años
transcurrieron, y finalmente en 2008, a instancias del
Presidente de la Cámara de Diputados de Santa Fe, Sr. Eduardo
Di Pollina, y con el acuerdo de todos los bloques, se votó por
unanimidad la realización de una nueva obra para que
finalmente ocupe el espacio vacío en el recinto provincial, y para
ello se convocó al muralista argentino Guillermo Roux.
Su nombre fue
sugerido por especialistas y consultado al director del Museo
Rosa Galisteo, quien coincidió con otros entendidos en que
Guillermo Roux era el artista que debía plasmar la obra.
En mayo de 2008, el
presidente de la Cámara de Diputados viajó a Buenos Aires
para proponerle el trabajo a Guillermo Roux. En octubre del
mismo año, el pintor comunicó su decisión de hacer la obra
para Santa Fe, rechazando otros ofrecimientos que llegaban
desde el exterior.
Lo
sucedido fue una parábola de la vida, según el relato de
Guillermo Roux. El artista narra: "cuando tenía 10 años, mi
padre -un artista valorado en ambas orillas del Río de la Plata-
llegó al taller con varios bocetos. Me los mostró y me dijo: "Me
gustaría que algún día vos pintaras como mi maestro"...Y ¿saben
quién era su maestro?: Antonio Alice, y ¿saben qué bocetos me
estaba mostrando?: los del cuadro "Los Constituyentes del
53".
"Fíjense lo que es la vida -continuó Guillermo- que 70 años
después de aquel episodio, que nunca conté hasta hoy, un fin de
semana llegó a mi casa Eduardo Di Pollina, el presidente de la
Cámara de Diputados, a proponerme que para ese espacio donde
tenía que haber estado el cuadro de Alice yo hiciera una nueva
obra".
Alice era un patrón a
seguir en las primeras décadas del siglo XX. Sin embargo, las
ansias de realizar búsquedas y encontrar un lenguaje propio
llevaron a Roux a proponer nuevas perspectivas, nuevos
horizontes, nuevas miradas.
"Hoy,
con esta obra que me han encargado siento que puedo decirle a
mi padre: ¿ves que pude cumplir tu deseo desde otro lugar, con
otros trazos, luces y colores?...que más allá del tono intimista y
especular de Alice sobre los actores de la jura, es posible abrir
una ventana, salir, y darle paso a todo un pueblo para que
acompañe a la Constitución hasta el recinto".
Efectivamente,
Guillermo se vuelve sobre la tela y, del mismo modo que
Velázquez en "Las Meninas", gira la vista y da un vuelco de
ciento ochenta grados para plasmar a otros protagonistas de la
historia en la escena, protagonistas que le dan el fundamento y
la base a esta nueva "lectura sobre la Constitución": hombres y
mujeres avanzando sobre el ritmo ondulante del río y las luces
del espacio exterior.
Todo comenzó con
un collage de papeles satinados, de distintos tamaños,
agrupados sobre una superficie. El artista dispuso esos papeles
de manera que se produjeran manchas y tonalidades, y allí
aparecieron los indicios de la obra.
Una vez delineado el
primer bosquejo, las figuras fueron moldeadas por Roux en
pequeñas estatuillas de arcilla para la realización de una
maqueta que permitió una visualización en tres
dimensiones.
Cada figura, semana
tras semana, tuvo su modelo, un hombre o una mujer según el
personaje, que el artista fue dibujado individualmente de cuerpo
entero, en distintas posiciones, así como en minuciosos retratos
de cada rostro en particular.
Las proporciones
que debía guardar la obra con el ámbito, su arquitectura y los
colores del entorno del recinto de sesiones de la Cámara de
Diputados demandaron una especial atención. Esto llevó a
Roux a trabajar cuidadosamente las perspectivas, y cada
proceso culminó con la realización de pruebas in situ del
bosquejo a tamaño real.
Luego el boceto
definitivo y las figuras delineadas en la tela, después los trazos
y las pinceladas con las que el artista le ha dado a esta nueva
pintura de la Constitución "las sombras, las luces, los brillos y
los colores con los que ha cobrado vida", según las palabras del
propio Roux:
"En ella quise expresar mi ideario en este momento
particular de mi vida y de la República, que son los
pensamientos y necesidades de un simple ciudadano
pintor.
La Constitución guía
al pueblo es el título que le di, y en ello quiero
sintetizar lo que percibí en mis compatriotas y en mis
propias necesidades. Son los ciudadanos de la calle,
marchando juntos sin agresiones ni violencias, unidos
por el color de la misma bandera, que se hacen
presentes en este recinto, otorgándoles a ustedes,
señores diputados y senadores, la comprensión y
defensa de sus derechos.
De esta manera la calle
entra en el Parlamento y el diálogo entre
representados y representantes queda simbolizado en
el espacio pintado.
No quise un cuadro histórico
que nos llevara al pasado.
Porque para mí, que soy un
simple ciudadano antes que pintor, estamos en el
momento de afirmar las instituciones, de darle a la
justicia toda su fuerza, de enseñar más y más, de
escuelas y más escuelas, y de seguir al pie de la letra
lo que manda nuestra Constitución.
Y todos, cada uno con su
idea, seguro que tenemos un lugar donde
encontrarnos, sin renunciar a nuestras creencias, que
de eso se trata la democracia, y ese lugar no es otro
que el bien y el progreso de nuestra Nación.
La composición responde a
este pensamiento.
Es un friso que se desarrolla
horizontalmente, de tal manera que esas horizontales
responden a los niveles de la arquitectura del
recinto.
Arriba, el río, las banderas,
las figuras y la hierba que pisan.
Las figuras son verticales y
contrastan con la horizontalidad, y todo ondula como el
río, como las banderas, como las polleras y el
pasto.
El ritmo del pincel lo une con
una caligrafía que crea el movimiento.
Las figuras no se separan la
una de la otra por el color ni por otra característica que
indique diferencias de oficio o de clase.
Cierran a ambos lados del
friso, girasoles, y todo se ordena en la figura central, la
más blanca, que concluye en la pollera, que como una
flor nace de la tierra y vuela al viento.
Sin embargo, la parte de
arriba de esta figura está encuadrada en una rigurosa
forma geométrica, porque en una mano lleva un lazo
con los colores de Santa Fe y en la otra el blanco y
celeste de la bandera argentina.
La figura central no es ni
griega ni romana, no lleva laureles ni gorro frigio ni
pliegues fuera del tiempo.
Es de hoy, viviente,
deseable, como una hermosa mujer argentina, porque
creo que es hora de darle a nuestros símbolos un
sentido actual, necesario y cotidiano.
Estilísticamente, y ya en el
plano de la teoría del Arte, elegí el lenguaje más
natural, el que más espontáneamente nació de mi
esencialidad.
Quise ser claro, directo, y ya
se sabe que las cosas son confusas cuando no se
tienen las ideas claras, llegar a todos ustedes, y a la
gente que está más allá de este recinto.
Al intelectual y al campesino.
Al padre de familia. A la madre y al hijo. Y a los que
sufren todos los días esta vida difícil.
(Palabras de Guillermo Roux en el acto de inauguración de la
obra)
Sr. Presidente nos
parece más que justo rendir nuestro homenaje a tan bello
mural, que además revaloriza y recuerda a nuestra carta magna
en la ciudad que la viera nacer.
Por todo lo expuesto,
solicitamos a nuestros pares nos acompañen en la pronta
aprobación de este Proyecto de Resolución.
Firmante | Distrito | Bloque |
---|---|---|
BARRIOS, MIGUEL ANGEL | SANTA FE | PARTIDO SOCIALISTA |
PERALTA, FABIAN FRANCISCO | SANTA FE | GEN |
ALVAREZ, JORGE MARIO | SANTA FE | UCR |
FAVARIO, CARLOS ALBERTO | SANTA FE | DEMOCRATA PROGRESISTA |
CICILIANI, ALICIA MABEL | SANTA FE | PARTIDO SOCIALISTA |
CUCCOVILLO, RICARDO OSCAR | BUENOS AIRES | PARTIDO SOCIALISTA |
BENAS, VERONICA CLAUDIA | SANTA FE | SI POR LA UNIDAD POPULAR |
VIALE, LISANDRO ALFREDO | ENTRE RIOS | PARTIDO SOCIALISTA |
Giro a comisiones en Diputados
Comisión |
---|
CULTURA (Primera Competencia) |
Trámite en comisión (Cámara de Diputados)
Fecha | Movimiento | Resultado |
---|---|---|
07/09/2011 | DICTAMEN | Aprobado por unanimidad con modificaciones en los términos del articulo 114 del reglamento de la H. Cámara |
Dictamen
Cámara | Dictamen | Texto | Fecha |
---|---|---|---|
Diputados | Orden del Dia 2459/2011 | CON MODIFICACIONES; ARTICULO 114 DEL REGLAMENTO DE LA H. CAMARA DE DIPUTADOS DE LA NACION, BAE 27/2011 | 19/09/2011 |
Trámite
Cámara | Movimiento | Fecha | Resultado |
---|---|---|---|
Diputados | APROBACION ARTICULO 114 DEL REGLAMENTO DE LA H CAMARA DE DIPUTADOS; COMUNICADO EL 05/10/2011 | APROBADO |