La Cámara de Diputados de la Nación

RESUELVE:

Expresar su hondo pesar por el fallecimiento del compositor, pianista y director Antonio Tauriello, el 20 de abril de 2011.

Señor presidente:

Con la muerte de Antonio Tauriello, el 20 de abril en Buenos Aires, a los 80 años, la Argentina pierde uno de sus más grandes músicos.

Compositor, pianista y director, Tauriello se había formado con Alberto Ginastera, Raúl Seivak y Walter Gieseking; dotado como pocos, la dirección orquestal la había encarado de forma autodidacta, primero en conciertos de música contemporánea, más tarde como director invitado en los principales teatros de ópera del mundo.

Pianista extraordinario, podía tocar la reducción de Wozzeck con el "90 por ciento de las notas", como él mismo admitía; y fue así, en carácter de maestro preparador de esa ópera de Alban Berg, que Tauriello comenzó su fecunda colaboración con la Opera de Chicago. Fue maestro interno del Colón entre 1957 y 1993.

Fue además un compositor exquisito: obras como el Cuarteto, Arlechino, Impromptus, Al menor ruido los pájaros se callan figuran entre lo mejor de toda la música contemporánea. Un día Tauriello explicó su filosofía de la composición; tomó una reproducción de las pilas de heno de Monet -una de esas series en que un mismo objeto brilla con las distintas luces del día- y simplemente dijo: "Esto es lo que Gerardo Gandini y yo quisimos hacer con la música".

Por la profunda huella que este talentoso artista ha dejado en el acervo cultural de los argentinos, es que solicitamos la aprobación de este proyecto de resolución.