PROYECTO DE TP
Expediente 2069-D-2010
Sumario: EXPRESAR REPUDIO POR LAS EXPRESIONES DEL SECRETARIO DE ESTADO ADJUNTO DE LOS ESTADOS UNIDOS DE AMERICA, SOBRE UNA POSIBLE CARRERA ARMAMENTISTA EN LA REGION.
Fecha: 12/04/2010
Publicado en: Trámite Parlamentario N° 31
La Cámara de Diputados de la Nación
DECLARA:
Su repudio a las expresiones vertidas
por el Secretario de Estado Adjunto para asuntos del Hemisferio Occidental del
Gobierno de los Estados Unidos de Norteamérica, Arturo Valenzuela, sobre una
posible carrera armamentista en la región, las cuales constituyen una clara
injerencia en asuntos internos de los países latinoamericanos.
FUNDAMENTOS
Señor presidente:
En los últimos días, distintos medios
de comunicación han reproducido expresiones de Arturo Valenzuela, Secretario de
Estado Adjunto para asuntos del Hemisferio Occidental del Gobierno de los Estados
Unidos de Norteamérica, en las cuales el funcionario transmite la preocupación de
su gobierno respecto de una posible carrera armamentista en la región.
Valenzuela opinó que se podría estar
ante el inicio de una "carrera armamentista" entre países de América Latina luego
de evaluar el aumento del gasto militar por parte de algunos gobiernos de la
región. Esta situación, a su juicio -que en este caso representa el del gobierno
estadounidense-, resulta "intolerable".
Una afirmación tan categórica y
tajante merece ser rechazada sin ningún miramento. En primer lugar, porque
hablar de "carrera armamentista" resulta una clara exageración del Secretario ante
una política de defensa que se inscribe en un marco de estrategias
regionales.
Pero por otra parte, ¿qué quiere decir
Valenzuela cuando habla de que esto es "intolerable"? ¿Qué pasará cuando
nuestros gobiernos defiendan y ratifiquen su derecho a políticas soberanas en
materia de defensa? ¿Acaso el gobierno de los Estados Unidos tomará medidas
cuando ya no tolere estas políticas?
A todas luces los dichos del
funcionario suponen un exabrupto y, de una manera u otra, representa una nueva
injerencia del gobierno estadounidense en temas que son de estricta soberanía de
nuestros países.
Ahora bien, como si lo anterior fuera
poco, cabe señalar la hipocresía que representan estas palabras en boca de quien
representa un gobierno que ha hecho del militarismo, la guerra preventiva y la
invasión de países por motivos comerciales la base de su política exterior.
Poco creíble resulta el señor
Valenzuela cuando se muestra tan preocupado por nuestra región y afirma que
"tenemos que asegurarnos de que los países de América Latina podamos vivir en
paz". Cabría recordarle al funcionario que en los últimos años, las pocas amenazas
a la paz y la estabilidad que padecieron nuestros países se vincularon directamente
con la intervención de la Casa Blanca; valga citar como ejemplos la incursión ilegal
de fuerzas militares colombianos en terreno ecuatoriano, los intentos fallidos de
golpe de estado en Bolivia y el derrocamiento de Manuel Zelaya en Honduras.
Bueno sería que si realmente el Sr.
Valenzuela está preocupado por la paz de estas naciones, le recomiende a su
gobierno desactivar la IV Flota, la cual dejó de funcionar en 1950 y fue puesta
nuevamente en funciones en 2008 con el fin de vigilar y controlar las actividades
desarrolladas en nuestros países. Representaría un gesto interesante hacia los
gobiernos de la región, toda vez que la reactivación de la IV Flota representa un
motivo de preocupación para nuestros Estados y no encuentra otra justificación
que la proliferación de gobiernos de claro signo popular en la región.
Es preciso señalar, por otra parte, que
la solución que propone Valenzuela para avanzar en una mayor pacificación (aun si
ello fuera una necesidad para nuestros países) consiste en promover "acuerdos de
confianza mutua" que para Washington suponen instalar sus bases nuestra región.
Esto último, un objetivo recurrente de la política exterior norteamericana, es otro
de los factores que implican graves desestabilizaciones y factores de preocupación
toda vez que es otra flagrante violación de la soberanía de los estados
latinoamericanos.
Para finalizar, es imprescindible
señalar que Estados Unidos es el país que -por muy lejos- más gasta en
armamento en todo el mundo, tanto en términos absolutos como en la relación per
cápita. Si sumamos ello al hecho de que la administración Obama no ha
abandonado el militarismo exacerbado que le imprimió a su política exterior la
gestión de George W. Bush, no parece muy coherente que se sea un funcionario
de su gobierno quien se muestre tan alarmado por la proliferación del gasto militar
en América Latina.
Por todo lo dicho, solicito a mis pares
la aprobación del presente proyecto.
Firmante | Distrito | Bloque |
---|---|---|
BASTEIRO, SERGIO ARIEL | BUENOS AIRES | NUEVO ENCUENTRO POPULAR Y SOLIDARIO |
RIVAS, JORGE | BUENOS AIRES | NUEVO ENCUENTRO POPULAR Y SOLIDARIO |
Giro a comisiones en Diputados
Comisión |
---|
RELACIONES EXTERIORES Y CULTO (Primera Competencia) |