La Cámara de Diputados de la Nación

RESUELVE:

Expresar su beneplácito y adherir a los actos y festejos previstos al celebrarse, el 3 de Mayo del corriente año, el 81° aniversario de la creación de la localidad de Santo Pipó en la Provincia de Misiones-

Señor presidente:

El objetivo del presente proyecto, es expresar el beneplácito de ésta Honorable Cámara, por la conmemoración el 3 de Mayo, de los 81 años del nacimiento de la localidad de Santo Pipó en la provincia de Misiones y la adhesión al Programa de actividades previsto por tal motivo.

La localidad de Santo Pipó de 311 Km2 se encuentra prácticamente en el centro del Departamento de San Ignacio del cual forma parte, es una franja de posición Noroeste a Suroeste, de aproximadamente 80 Km. de largo. Se encuentra a 77 Km. de la ciudad de Posadas-capital de la provincia- sobre la ruta nacional N° 12. Todo el municipio esta surcado por innumerables arroyos, siendo los mas importantes: Ñacanguazú, Macaco, Chapá, Bonito, etc.

Los comienzos de Santo Pipó, se producen cuando el Sr. Eugenio Lagier amigo del Sr. Leiva quien era propietario de aproximadamente cuarenta mil hectáreas entre los arroyos Santo Pipó y Ñacanguazú, le propone mensurar esas tierras en lotes de 100 hectáreas cada una y él escribiría a Suiza para interesar a los jóvenes a comprar y venir a estas tierras para establecerse en esta zona

Llegaron así contingentes de "Colonos", adinerados y casi todos con títulos universitarios para establecerse en la zona boscosa e inhóspita, con el fin de levantar plantaciones de Yerba Mate. Los recién llegados eran todos jóvenes de la ciudad, no del campo, es decir habían cursado estudios técnicos de agricultura sin ser agricultores.

En la Argentina y sobre todo en Misiones todo esto era nuevo y desconocido. Era natural entonces, que ellos no plantaran, como sucedió con otros inmigrantes que se instalaron en otras zonas de la provincia. En Santo Pipó, éstos Suizos levantaron entre los años 1.923 y 1.933 yerbales de cincuenta a doscientas hectáreas, llegando a cubrir miles de hectáreas.

El comienzo fue difícil, la falta de caminos y medios de transportes se hicieron sentir, por el Río Paraná pasaban lanchas sin horario fijo, lo que motivaba a veces esperar varios días para desplazarse de un lugar a otro. Era una lucha abierta con la naturaleza, pero estos inmigrantes encontraron en el monte y la tierra colorada un lugar donde comenzar una vida nueva. El esfuerzo y empeño puesto por estos colonos sumándose al trabajo duro de los pobladores dieron impulso al desarrollo de Santo Pipó, hoy formado por una población de diversas etnias.

Es tradicional que cada año, al cumplirse un aniversario mas de su creación, se organice un amplio programa de actos conmemorativos, con la participación de las autoridades comunales, los antiguos vecinos, los jóvenes, estudiantes y las familias todas, día tras día se van sumando diferentes actividades artísticas, culturales, deportivas y sociales las cuales resultan un motivo de reunión fraterna de los pobladores quienes con el trabajo, el esfuerzo y la esperanza celebran el desarrollo y crecimiento obtenido de su querido Santo Pipó.

Por lo expresado y dada la importancia de la celebración del LXXXI aniversario de la localidad misionera de Santo Pipó, es que solicito a mis pares el apoyo a esta iniciativa.