La Cámara de Diputados de la Nación

RESUELVE:

Solicitar al Poder Ejecutivo y por su intermedio a quien corresponda, en virtud de las informaciones periodísticas sobre la crisis edilicia del sistema judicial, informe:

1)Cuales son los motivos de la crisis edilicia del sistema judicial

2)Que cantidad de edificios se necesitan incorporar para solucionar este problema.

3)Quien es la autoridad de aplicación encargada de resolver la crisis edilicia

4)Que medidas toma la autoridad de aplicación frente a esta grave problemática.

Señor presidente:

Es dable poner de manifiesto que la crisis de la Justicia, de la que tanto se habla de Ushuaia a La Quiaca, tiene aquí un implacable sostén estadístico.

En apenas 10 años, la demanda sobre los jueces creció el 117 por ciento, mientras que el presupuesto del Poder Judicial ha ido disminuyendo en proporción con respecto al presupuesto general.

No hay que ser matemático para conocer el resultado de la ecuación: a más trabajo y menos recursos, se ha empobrecido, atentando, claro, contra el servicio que debe ofrecer. Cabe destacar que no existen registros actuales de la crisis edilicia de la Justicia Nacional . Ante ello, si tomamos como ejemplo las Estadísticas de la Administración de la Suprema Corte bonaerense, las mismas nos indican que durante 1998 ingresaron a los juzgados de la provincia 599.078 expedientes, mientras que en 2007 la cifra, aproximada, trepó a 1.300.000. Este notable aumento viene alertando hace tiempo al universo judicial, pero nunca había sido mensurado con certeza

¿Por qué aumentan los juicios? Fuentes del Poder Judicial manifestaron que ello sucede en tiempos de una crisis edilicia inédita y de una disminución generalizada de recursos que agrava aún más al ya colapsado sistema.

CAUSAS DE LA CRISIS:

*El aumento de la litigiosidad, como reflejo social: A pesar del desprestigio del servicio de justicia, en el que coinciden todos sus actores, es mayor aún la pérdida de confianza de la sociedad en otras vías de solución a sus conflictos, como la vía policial o el simple diálogo.

*Un sistema acusatorio sin criterio de oportunidad: Ante la duda, hoy los fiscales de la Provincia acusan al sospechoso y lo llevan a juicio oral. La Procuración de la provincia de Buenos Aires -que dirige a todos los fiscales-, les ha dado directivas para que acusen siempre, excepto que estén totalmente convencidos de la inocencia del sospechoso. Esta especie de "mano dura" judicial, que obliga a abrir expedientes por cualquier motivo, ha llegado a extremos insólitos, como el que cita el titular de la Cámara de Casación Penal provincial, Federico Domínguez. "En Lomas de Zamora iniciaron un juicio contra un señor por tentativa de hurto de dos melones. Ni siquiera los había robado", se ofusca.

*La ausencia de canales alternativos para la solución de conflictos. Los tribunales arbitrales o las instancias de mediación son todavía muy limitadas, ya que se utilizan para el ámbito civil y laboral.

Un ejemplo de lo expresado precedentemente, es el debate que ha existido en la Cámara diputados sobre la prorroga de la ley 24.573 frente a ciertos grupos de personas que quieren eliminarla del sistema legislativo ignorando que dicha decisión puede acarrear un COLAPSO JUDICIAL TOTAL.

En Francia, por ejemplo, se ha creado una "Casa de la Justicia", que atiende reclamos, asesora legalmente y ayuda al vecino a decidir si le conviene o no ir a la Justicia. Según Domínguez, "con ese método disminuyeron la litigiosidad entre 30 y 40 por ciento".

*Aumento poblacional y del delito. "Parte del problema es inevitable. Si hay más gente y mayores conflictos, la Justicia va a tener más trabajo.

El estado invierte en el Poder Judicial una porción cada vez menor de sus recursos. El punto flaco del sistema está por un lado en los problemas edilicios y por otro en la falta de productividad de los juzgados.

Muchos jueces dicen que no tienen lugar para sentar a sus empleados, que no tienen computadoras suficientes, a veces ni siquiera acceso a Internet ni fotocopiadora. Esto, además de atentar contra el servicio de justicia que se les debe a los vecinos, aleja a los jueces de la posibilidad de dar con la delincuencia más sofisticada.

Es fácil inferir que es muy difícil trabajar en estas condiciones. Hoy los delincuentes se mueven con sistemas satelitales GPS y para muchos juzgados Internet es una utopía

Todo ello, sin profundizar en este pedido de informes que además, no existe un Registro de la Reincidencia Único que permita a los jueces frente a la detención de un delincuente saber si el mismo tiene procesos o condenas en otras provincias.

De lo expuesto, se deduce claramente que estamos cada vez mas lejos del futuro, de la eficacia del sistema, de la informatización de los juzgado y del funcionamiento pleno de la Justicia que es uno de los pilares fundamentales del Estado.

En realidad, estamos a un paso del COLAPSO JUDICIAL que aumentara aun más la inseguridad jurídica existente.

En virtud de lo expuesto, solicito a los Sres. Diputados que me acompañen en la aprobación del presente proyecto de resolución.