El Senado y Cámara de Diputados...

Artículo 1°. A partir de la sanción de la presente, los sujetos que optaren por el régimen de ahorro en moneda extranjera de acuerdo a lo establecido por la circular A 5526 del BCRA, y cuyo monto autorizado por la AFIP exceda los 1.000 dólares mensuales dejarán de percibir el subsidio sobre los servicios de energía eléctrica, gas natural y agua potable y desagües cloacales con el que se beneficiaban, en el caso que no hubieran ya renunciado al mismo o acreditaren razones de excepción ante la autoridad de aplicación .

Artículo 2°. De forma.

Señor presidente:

Los subsidios constituyen una prestación política asistencial que el Estado otorga a particulares, con el objeto de expandir el consumo o incentivar actividades. Se encuadran, conforme a la doctrina mayoritaria de Derecho Administrativo, en las llamadas "políticas de fomento", que difieren lógicamente de la tarifa o precio (ver autos CANTERAS MALAGUEÑO S.A.C.I.F. c/ GAS DEL ESTADO s/ REPETICION - CAMARA NAC. DE APELACIONES EN LO CIVIL COMERCIAL FEDERAL. 9/11/1994).

En nuestro país se otorgan por ejemplo a empresas privadas para evitar precisamente que posibles aumento de tarifas lleguen a los productos o servicios que ellas proveen. También se pueden otorgar a algunas provincias o regiones con distintas metas económicas o sociales. En tanto potestad o facultad de la Administración, todo subsidio es esencialmente revocable, limitado, y puede modificarse de acuerdo a las necesidades del Estado. También es necesario puntualizar que son fondos no retornables, y que se otorgan por tiempo limitado, si bien algunos suponen equivocadamente que se trata de un derecho adquirido.

Si bien el subsidio es un instrumento de política económica que permite, entre otras cosas, defender a los sectores más vulnerables de la sociedad, también es cierto que cuando el Estado sale al auxilio de esos sectores en medio de profundas crisis económicas o sociales, por la urgencia en la instrumentación, puede caer en injustas asimetrías que se deben enmendar una vez superada la urgencia.

Hace algo más de una década la Argentina estalló como resultado de una profunda crisis social, económica y política producida por la aplicación de políticas neoliberales: el índice de desempleo llegó al 27, renunció el presidente, y se desató un fuerte descontento social.

De ahí que desde 2003, el gobierno nacional haya aplicado una política de subsidios a los servicios públicos cuyo objetivo proclamado ha sido lograr una mejora en la calidad de vida de todos los argentinos, a través de la recuperación del empleo y de la actividad industrial. Mediante esta política, el Estado se ha hecho cargo de ciertos componentes de la tarifa, reduciendo sustancialmente el monto final que abona el usuario. El contexto de urgencia en el que se tomaron esas medidas, como señalamos antes, produjo algunas inequidades. Si bien aún perduran sectores vulnerables que requieren la ayuda del Estado, el contexto ha mejorado lo suficiente como para que procuremos corregir esas deficiencias.

En los últimos años, el gobierno nacional ya ha encarado por su parte un proceso de personalización de los subsidios para que lleguen a aquellos que realmente los necesitan. Para ello, el Ministerio de Planificación Federal encomendó en 2011 al Grupo de Trabajo creado con los Organismos Públicos Nacionales, Provinciales y Municipales vinculados a la regulación, control y seguimiento de la prestación de estos servicios y a las Cámaras y asociaciones representativas del sector privado, que llevara a cabo un análisis de los indicadores, parámetros y toda información necesaria y suficiente para la revisión y adecuación de los subsidios.

En este marco, y en atención al informe técnico elaborado en el ámbito del Ministerio de Planificación Federal, Inversión Pública y Servicios, con fecha 24 de noviembre de 2011, se recomendó la eliminación de los subsidios sobre los servicios de energía eléctrica, gas natural y agua potable y desagües cloacales a los usuarios residenciales comprendidos en los Barrios de Puerto Madero y Barrio Parque de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires y a los usuarios residenciales comprendidos en countries, barrios cerrados, clubes de campo y clubes de chacras. Además, se aprobó el Formulario de Renuncia Voluntaria al Subsidio para aquellos sujetos que así lo manifestaran.

Con el fin de avanzar con la adopción de las medidas necesarias para la consecución de una mayor equidad en la aplicación de los subsidios por parte del estado nacional, resulta indispensable continuar aplicando las medidas propuestas para lograr distribuir el esfuerzo contributivo en forma más equitativa.

En ese sentido, señor Presidente, creemos que aquellos usuarios con suficiente capacidad de ahorro como para destinar parte de sus ingresos a adquirir mensualmente al menos 1.000 dólares estadounidenses deben encontrarse en condiciones de afrontar el pago del precio pleno de servicios públicos de gas natural, energía eléctrica y agua potable. Por lo tanto, en caso de que no hubieran renunciado ya a los subsidios, deberían dejar de beneficiarse de ellos desde el momento en que acceden a la compra de esa cantidad de moneda extranjera con fines de atesoramiento.

Entendemos, señor Presidente, que esta medida contribuirá a que la política de subsidios que sostiene el Estado nacional se concentre en los sectores realmente más necesitados. Por las razones que acabamos de exponer, solicitamos la aprobación del presente proyecto.