La Cámara de Diputados de la Nación

DECLARA:

Expresar su preocupación por el creciente desabastecimiento en supermercados y otros comercios minoristas del país de mercaderías que integran la canasta básica familiar .

Señor presidente:

En los últimos días se ha observado una notoria escasez de productos de consumo básico del núcleo familiar.

Ya en los días previos a la Semana Santa, se observaron faltantes de carne vacuna y de productos lácteos.

En el caso de los lácteos, la oferta de leche se redujo en un 12% en el primer cuatrimestre del año. De acuerdo al índice lácteo de la Secretaría de Agricultura, la leche acumula un alza del 12% respecto del año anterior ( Diario Clarín, 23/04/07).

Según informo el diario La Nación el día 08/04/07, en el caso de las carnes, la escasez parece ser consecuencia de que el Gobierno dispuso en noviembre pasado un tope de $ 2,50 por kilo vivo de novillo, pero a ese precio no hay oferta. Entonces, los supermercados obligados a vender a los precios concertados por el Gobierno, no encuentran hacienda a esos valores, y por lo tanto, sus góndolas muestran grandes huecos. En tanto, las carnicerías optaron por una solución diferente: para asegurarse la provisión de carne y así no perder clientes aceptan pagar precios superiores a los indicados por Comercio Interior. Pero el resultado es el mismo: en los mostradores casi no se consiguen los cortes al precio oficial.

El mismo periódico anoticia que desde que se impuso la lista de precios máximos en el Mercado de Liniers, los ingresos en ese mercado se redujeron en más de un 40%, pasando de 200.000 cabezas mensuales a menos de 80.000.

Asimismo, es preocupante la información suministrada por el diario Clarín en fecha 18 de Abril de 2007, en tanto publica que en el mes pasado se han mandado a matar un 18% más de hembras que en el mismo período del año 2006. Ello, sumado a la baja oferta en el mercado de liniers, junto al incremento de la faena de animales jóvenes y livianos ( terneros, que se incrementó en un 73,9% ) son señales inconfundibles del desinterés que impera en el sector productor.

Es importante tener en cuenta las declaraciones del Secretario General de la Organización Mundial del Comercio, Pascal Lamy, al diario La Nación el 13/2/07: " La cuestión que ahora se plantea es la sostenibilidad del presente modelo de desarrollo a largo plazo. ¿Por qué? Los principales riesgos que veo provienen de un sobrecalentamiento de la economía y una posible aceleración de la inflación. Por otra parte, algunas de las medidas económicas adoptadas en los últimos años han generado distorsiones en la asignación de recursos y ello conllevaría un problema si estas distorsiones se asentaran en la economía de forma permanente. Sé que éstas son preocupaciones compartidas por el gobierno argentino. A largo plazo creo que sería bueno que las fuerzas del mercado tuviesen una mayor influencia tanto en la asignación de recursos como en la determinación de los precios."

Sr. Presidente, las dificultades que comienzan a vislumbrarse en estos tiempos, deben ser resueltas, de lo contrario, se tornarán en flagelo que padeceremos en el mediano y largo plazo, cuyos costos recaerán como hoy, en los consumidores, en nuestras familias que día a día requieren de los productos básicos.

Este Congreso no puede desentenderse de este problema que afecta a todos los argentinos.

De acuerdo a las leyes del mercado, la escasez de productos provoca un aumento en los precios de los bienes, lo que genera un impuesto inflacionario que es trasladado a los habitantes, quienes pagan las consecuencias de una política económica que busca mantener competitividad internacional a costa del mercado interno.

En diciembre pasado, la inflación de precios tuvo un impacto elevado para el sector más pobre, ya que el conjunto de bienes que se considera para medir la pobreza -la canasta básica total- se incrementó en un 2,3% en relación al mes anterior.

Según informó en el mes de Enero de 2007 el Instituto Nacional de Estadística y Censos, una familia tipo necesitó en el mes de Diciembre de 2006 de $ 899,44 para no vivir en la pobreza, dado que los rubros que mayor incremento sufrieron - comida y bebida- son los más consumidos por los sectores más bajos de ingresos ( La Nación, 09/01/07). Posteriormente, en el mes de Enero, el aumento del Índice de Precios al Consumidor, alcanzó el 1,5% ( La Nación, 01/02/07).

Ante la gravedad de la situación descripta, que se observa a lo largo y a lo ancho de nuestra nación, es nuestro deber como representantes de los ciudadanos de esta República Argentina, expresar nuestra preocupación en procura de una solución consensuada, que preserve la cobertura de las necesidades básicas de toda nuestra ciudadanía

Es por ello, que solicito a mis pares acompañen el presente proyecto de declaración.