La Cámara de Diputados de la Nación

RESUELVE:

Solicitar la concurrencia del Sr. Ministro de Planificación, Inversión Pública y Servicios, Arq. Julio Miguel de Vido, conforme al artículo 71 de la Constitución Nacional, para brindar las explicaciones e informes convenientes sobre las obras y actividades llevadas a cabo en el último trienio, tendientes a mejorar el servicio ferroviario, particularmente las realizadas con los servicios metropolitanos. Específicamente, conforme el art. 204 de esta Honorable Cámara, se requieren los siguientes puntos:

-Plan de soterramiento del Ferrocarril Sarmiento (Estado de Ejecución)

-Planes de inversión de las empresas concesionarias (Compromiso y grado de cumplimiento)

-Nivel de desarrollo y ejecución de los Programas de Control de los Organismos Responsables del Control y Regulación de ese tipo de transporte.

-Sobre la tragedia acaecida el día 22 de febrero del cte. año en la estación Terminal Plaza Miserere del Ferrocarril Sarmiento y sobre el estado en general del Plan de Infraestructura Ferroviario.

Señor presidente:

Como es de público conocimiento por estas horas, debemos soportar con gran angustia la pérdida de cincuenta y uno de nuestros compatriotas y más de siete centenares de lesionados de distintas gravedades en un accidente, si es que puede llamárselo así, debiendo dilucidarse en esferas administrativas y judiciales si la empresa concesionaria y los organismos de control del Poder Ejecutivo han cumplido con sus obligaciones en materia de Prevención e inversión respectivas.

Pasadas las ocho de la mañana del día 22 de febrero, en plena hora pico, una formación de la ex línea Sarmiento, procedente de la localidad de Moreno, no logró frenar a tiempo por un aparente desperfecto técnico e impactó contra el parachoques de la estación Terminal de Once.

El número de victimas de este trágico impacto aún se desconoce con exactitud, ya que los servicios de emergencia y salud siguen trabajando en la zona y en los hospitales de la Ciudad de Buenos Aires. A pesar de ello los números que se informaron hasta el momento son ya realmente desconsoladores: cincuenta y un muertos y más de setecientos heridos.

El peor accidente ferroviario de la Capital Federal y uno de los más trágicos de la historia del país. Ante tan descomunal fatalidad es menester desentrañar algunas cuestiones fundamentales con el fin de clarificar si se podría haber evitado.

En primer lugar, este suceso ocurre en el marco de una serie accidentes ferroviarios en esta y otras líneas que denotan la creciente pauperización del servicio producto de la falta de inversiones en formaciones e infraestructura. Sin ir muy lejos en el tiempo, esta misma línea sufre un gravísimo accidente con saldo de 11 muertos y 228 heridos hace solo cinco meses cuando una formación impacta con un colectivo de la línea noventa y dos a la altura de la estación de Flores.

Pese a que la negligencia del conductor tiene gran parte de responsabilidad en este incidente, cabe señalar que el mismo podría haberse evitado con la presencia de un guardabarrera en un paso a nivel con tanta afluencia como el mencionado. Asimismo, los choferes y automovilistas denunciaron en reiteradas oportunidades que en ese como en otros pasos a nivel de la línea Sarmiento es común que las barreras no funcionen o lo hagan incorrectamente, forzando a los conductores a realizar maniobras peligrosas para sobrepasar los mismos.

Señor Presidente, otro indicador de la gran falta de inversión es el estado en que se encuentran las formaciones y las estaciones. Aunque el servicio es utilizado día a día por millones de trabajadores de la ciudad de Buenos Aires y el conurbano bonaerense que pagan una tarifa por él, este es realmente pésimo. Se viaja hacinado, el servicio sufre demoras importantes e interrupciones regularmente, las formaciones se encuentran sucias y deterioradas, ventanas con vidrios rotos, aires acondicionados que no funcionan en formaciones con ventanas selladas, puertas que no cierran mientras estas circulan, entre otras complicaciones.

Esta situación ha sido denunciada por usuarios y trabajadores del sector en reiteradas oportunidades y hasta fue llevada a la justicia: La empresa Trenes de Buenos Aires (TBA) fue condenada en aquella oportunidad por someter "a los pasajeros del ferrocarril Sarmiento a un trato "peyorativo" y "discriminatorio".

En segundo lugar, la falta de control por parte de los organismos pertinentes, con la CNRT a la cabeza, ha llegado a niveles críticos por demás intolerables. Si la empresa concesionaria no cumple con los requisitos mínimos de prestación del servicio así como de seguridad y no realiza las inversiones necesarias, quien debería y debe velar por los intereses de la Nación y sus ciudadanos y el obligado a hacer cumplir la ley y los contratos de concesión firmados es el Poder Ejecutivo a través de sus órganos de contralor.

Por todo lo expuesto resulta conveniente y necesario que el Poder Ejecutivo Nacional brinde a esta Cámara un pormenorizado informe de las actividades desarrolladas en el último trienio a efectos de mejorar sustancialmente la calidad del servicio brindados por los Ferrocarriles mencionados, así como los planes de inversión proyectados y ejecutados en tal sentido.