La Cámara de Diputados de la Nación

DECLARA:

Expresar pesar por el fallecimiento del prestigioso médico clínico Dr. Alberto Agrest ocurrido el día 2 de febrero del corriente.

Señor presidente:

El Dr. Alberto Agrest fue uno de los maestros de varias generaciones de médicos argentinos y participó activamente del nacimiento de los centros de excelencia en la educación médica del país. Y fundamentalmente, se preocupó por los pacientes priorizando su integridad como ser humano.

Se graduó como doctor en medicina en la Facultad de Ciencias Médicas de la Universidad de Buenos Aires en 1952. Trabajó en el Hospital de Clínicas de la UBA y en el Hospital Rawson. En 1953 se trasladó a Estados Unidos con beca para perfeccionarse en el Hospital Universitario de Ann Arbor, Michigan, Estados Unidos.

De regreso a la Argentina, se incorporó al Centro de Investigaciones Cardiológicas y dejó su huella en el Hospital Tornú, el Instituto Ferrer y el Hospital Privado Güemes, entre otras instituciones.

Fue también investigador clínico y llegó a ser miembro de la Academia Nacional de Medicina, donde impulsó un programa sobre el error en Medicina y la seguridad del paciente, que ya se ha implementado en hospitales de Buenos Aires, Córdoba y Bahía Blanca.

Jefe de Clínica y de Hipertensión del Instituto de Investigaciones Médicas (UBA, 1957-79). Director del Programa de Seguridad del paciente, error en medicina del Instituto de Investigaciones Epidemiológicas de la Academia Nacional de Medicina. Miembro Honorario Nacional de la Sociedad Argentina de Hipertensión Arterial (1998). Miembro de las Academias Nacionales de Medicina de Buenos Aires y de Córdoba. Miembro del Comité de Ética de la Sociedad Argentina de Investigación Clínica, del grupo de trabajo para la modificación curricular de la Facultad de Medicina de la UBA y asesor académico de su Decano. Relator y moderador del panel sobre Medicalización de la Cultura en el Congreso Anual de la Sociedad Argentina de Investigación Clínica (1997). Premio Maestro de la Medicina de la Prensa Médica Argentina y Arco de Triunfo del Hospital Francés (2002). Diploma al Mérito, Medicina Interna, otorgado por la Fundación Konex (2003).

Publicó los libros Nuevas reflexiones inexactas de un observador médico (2002) y Ser médico ayer, hoy y mañana (2008).

En Ser médico ayer, hoy y mañana (editado por Libros del Zorzal), advirtió sobre la "economización de la medicina". Allí escribió: "La medicina hoy es más científica, más ética, más jurídica, más económica, más organizada y más controlada que hace cincuenta años. Más científica (más basada en evidencias demostrativas), pero menos observacional y menos basada en la importancia. Más ética (más respetuosa), pero menos comprometida, menos afectuosa y menos generosa. Más jurídica, pero más temerosa, más preocupada por el consentimiento (un documento), que por la información, que exige comprensión y comunicación. Más económica, pero menos equitativa. Más organizada, pero menos creativa y menos estimulante de generosidad. Más controlada, pero con evaluaciones más rígidas, más preocupada por las guías y reglas que por la individualización, la propia experiencia y la capacidad de mantener la atención. Más preocupada por cometer el menor error posible que por obtener el mayor beneficio probable para el enfermo. Más preocupada por el oro que por el bronce. Es cierto, la medicina de hoy es más científica, más ética, más jurídica, más organizada y más controlada... pero es menos medicina. Lo deseable es que la medicina sea más sin ser menos".

El Dr. Alberto Agrest, durante los últimos 10 años, se había pronunciado en conferencias y publicado numerosos artículos sobre la posición del médico clínico en la atención médica y los aspectos económicos y sociales de la asistencia médica y sobre ética en medicina.

En una entrevista que le concedió al portal médico INTRAMED en el año 2007, había expresado que "más vale un instructor al lado que un sabio en el estrado".

Fue un profesional excepcional, muy preocupado por las personas, en sus artículos expresaba sus ideas de cómo los médicos debían tratar a los pacientes. Fue muy admirado y respetado por sus colegas. Su vasta experiencia y compromiso merecen nuestro más amplio reconocimiento.

Por todo lo expuesto es que solicito a mis pares, me acompañen en la aprobación del presente proyecto.

Fuente: INTRAMED, Fundación Konex, portal de la Sociedad Argentina de Pediatría.