La Cámara de Diputados de la Nación

DECLARA:

Que vería con agrado que el Poder Ejecutivo Nacional reglamentase la ley Nº 14.800, que declara a la actividad teatral de interés nacional, fijando un plazo de cumplimiento de la obligación de construir nuevas salas de teatro.

Señor presidente:

La ley Nº 14.800, promulgada en 1959, que declara a la actividad teatral como de interés nacional, establece que, en caso de demolición de salas de teatro, el propietario del predio está obligado a "construir en el nuevo edificio, un ambiente teatral de características semejantes a la sala demolida".

El antiguo Teatro Odeón, ubicado en la esquina de Avenida Corrientes y Esmeralda, de la Ciudad de Buenos Aires, fue demolido en 1990. Además de la protección de la citada ley, el inmueble había sido declarado de interés cultural y arquitectónico, pero más adelante un secretario de Cultura dejó tal protección sin efecto.

A pesar de que los propietarios del sitio se comprometieron a construir en ese lugar un nuevo teatro, de acuerdo con la ley anteriormente mencionada, la Resolución 1221/97 del Ministerio de Economía de la Nación interpretó que la ley había quedado sin efecto, por imperio de la desregulación de actividades. De más está decir que consideramos que la desregulación no tiene nada que ver con las cargas que poseen los bienes que integran el patrimonio cultural, pues con ese criterio se podría transformar el Teatro Colón en una choripanería.

La medida del Ministerio de Economía ocasionó fuertes protestas de diversas personalidades vinculadas al mundo de la cultura, hasta que una nueva secretaria de Cultura informó que un decreto dejaría sin efecto la resolución. El mencionado decreto, sin embargo, nunca se firmó. Un grupo de ciudadanos procedió entonces a presentar un recurso de amparo tendiente a lograr la nulidad de la resolución. En esa acción judicial el Estado Nacional defendió la validez de la medida, pero afortunadamente la Corte Suprema de Justicia de la Nación falló declarando su ilegalidad.

No obstante ello, las cosas no se solucionan. Es que al no estar reglamentada la ley, no existen aún plazos para que los propietarios procedan a la construcción de un nuevo teatro. La zona con mayor concentración de salas de teatro del país, reconocida internacionalmente como tal, frecuentada por infinidad de argentinos y turistas de muchas partes del mundo, es hoy una playa de estacionamiento. No se cumple la ley y las autoridades nada hacen para evitarlo. La Argentina ha perdido un teatro, la Ciudad de Buenos Aires ha perdido el Odeón y la Secretaría de Cultura no eleva una reglamentación de la ley, que ya va a cumplir 47 años.

Por lo anteriormente expuesto es que solicitamos a esta Honorable Cámara la aprobación de presente proyecto de declaración.