PROYECTO DE TP
Expediente 1382-D-2014
Sumario: PEDIDO DE INFORMES AL PODER EJECUTIVO NACIONAL SOBRE DIVERSAS CUESTIONES RELACIONADAS CON LA SUPUESTA COMPRA DE AERONAVES ISRAELIES "KFIR C10" PARA LA "FUERZA AEREA ARGENTINA (FAA)".
Fecha: 26/03/2014
Publicado en: Trámite Parlamentario N° 15
La Cámara de Diputados de la Nación
RESUELVE:
Solicitar al Poder Ejecutivo que, a
través de los organismos que resulten competentes, informe lo que a
continuación se solicita con referencia a la supuesta compra de aeronaves
israelíes Kfir C10 para la Fuerza Aérea Argentina (FAA):
Si existen negociaciones con la
Industria Aeroespacial de Israel (IAI) con el objeto de adquirir aviones de
combate tipo Kfir C10;
En caso de una respuesta
afirmativa al punto anterior, informe si se trata de unidades que Israel dio de
baja en su uso operativo, causas de esa baja operativa, antigüedad de las
aeronaves, estado de uso y conservación, y si han sido sometidos a trabajos de
modernización;
Indique si dichas aeronaves son
del tipo "Bloque 60" que ofrece la Industria Aeroespacial de Israel (IAI);
Detalle cantidad de unidades a
adquirir, forma de contratación, plazo de entrega de las aeronaves, informe
técnico sobre equipamiento, cableado, aviónica, sistemas informáticos, radar y
armamentos, horas de vuelo, garantía del fabricante, existencia de repuestos y
armamentos para su equipamiento, servicios de mantenimiento, entrenamiento
y transferencia de tecnología incluidos;
Precise el monto total involucrado,
discriminado por rubro, y forma de pago acordada;
Con qué otras unidades de
similares características y prestaciones se ha comparado a este tipo de
aeronaves;
Fundamente las razones por las
cuales se optó por esta adquisición;
Informe sobre otras propuestas
recibidas, tipo de aeronaves y montos involucrados, y compare las mismas con
la de la Industria Aeroespacial de Israel (IAI);
Cómo se inscribe esta compra en
el Plan de Capacidades Militares (CAMIL);
Describa y desarrolle el plan de
acción global, su proyección presupuestaria plurianual y su cronograma de
desarrollo e implementación;
Cuántas aeronaves, de qué tipo y
con qué capacidades, necesitaría la Fuerza Aérea Argentina (FAA) para
desarrollar un efectivo control de nuestro espacio aéreo;
Qué evaluaciones de carácter
geopolítico y tecnológico sustentan la decisión de adquirir Kfir israelíes;
Si se ha analizado la posibilidad de
adquirir cazas de cuarta generación con mayor vida útil del tipo Dassault Rafale
(Francia), Sukhoi Su-35 (Rusia), F-18 (EE.UU) o Gripen (Suecia).
FUNDAMENTOS
Señor presidente:
La historia de los Mirage en
Argentina comienza en 1968, cuando el gobierno compró a la corporación
Dassault 10 aeronaves monoplazas Mirage III y 2 biplazas de entrenamiento
avanzado, designados EA y DA respectivamente, y continuó entre 1972 y 1983
hasta alcanzar, aparentemente, más de 90 aeronaves provenientes de Francia,
Israel y Perú. Dejando de lado los primeros aparatos de origen francés, que
eran nuevos, el resto era material usado.
Los Mirage III realizaron misiones
de intercepción, caza, escolta, cazabombardeo, despliegues operativos a
diversos puntos del país y, obviamente, de formación de nuevos pilotos.
También participan en ejercitaciones de la Fuerza Aérea Argentina, conjuntas y
combinadas con otras fuerzas, como actúan en la defensa aérea de cobertura
en eventos que involucran a líderes internacionales (Cumbre de las Américas,
Cumbre Iberoamericana, Unasur, Mercosur, etc.).
Los últimos los últimos Mirage III y
V se desprogramarían en diciembre de 2015, lo cual obliga al Ministerio de
Defensa a su inmediato reemplazo, dado que cualquier compra de aviones
seguramente tardaría al menos un año.
En los últimos días trascendió que
una delegación militar argentina visitó Israel para cerrar la compra de entre 12
y 14 aviones de combate israelíes del tipo Kfir C-10 que, según el diario israelí
Haaretz, no habrían operado en los últimos 20 años y necesitarían mejoras.
Varias decenas de estos 200 aviones fabricados por fabricados por Israel entre
los 70 y los 80, fueron vendidos en los últimos 20 años a las Fuerzas Aéreas de
estados como Sri Lanka, Colombia o Ecuador, con actualizaciones como la
inclusión de sistemas radar Elta.
En 1978, nuestro país adquirió 39
aviones de combate de segunda mano clase Neshers, el primer
cazabombardero desarrollado por Israel y similar a los Mirage 5s franceses,
conocidos como "Daggers" en nuestro país, los cuales participaron del conflicto
de Malvinas en 1982.
Según el diario Israelí Hareetz, la
Industria Aérea de Israel, aceptó actualizar las prestaciones de estos Kfir que la
Fuerza Aérea israelí utilizó hasta los noventa, para que Argentina pudiera
reemplazar sus Mirage con más de 40 años de servicio.
Este lote de 12 a 18 Kfir israelíes,
de los cuales 6 serían C10 (células repasadas a 0 horas) y el resto se
ensamblaria progresivamente con línea de montaje y técnicos israelíes en
FADEA, tendría un costo variable entre los US$ 200 millones y los U$S 280
millones. Se trataría de aviones que también tienen 40 años -como los Mirage
argentinos-, pero que supuestamente llegarían al país modernizados con el
motor estadounidense J-79 de General Electric totalmente revisado y con el
radar de barrido electrónico EL/M-2032 de Elta Systems, filial de la Industria
Aeroespacial de Israel (IAI), fabricante de los Kfir.
La situación de nuestra flota aérea
es desolador, lo cual redunda, no sólo en que nuestro amplio espacio aéreo se
encuentra desprotegido, sino también la propia ciudad de Buenos Aires, sede
de las autoridades de gobierno, carece absolutamente de protección aérea,
dado que ni siquiera canibalizando gran parte de la flota se logra mantener
aviones en condiciones de volar.
Frente a este panorama, el
ministerio de Defensa habría estado evaluando distintas alternativas para no
perder la capacidad de control del espacio aéreo y la defensa de nuestros
recursos naturales. Por su parte, la Fuerza Aérea, en el Plan de Capacidades
Militares (CAMIL), que realizaron las Fuerzas Armadas entre 2009 y 2010 y
elevaron al Ministerio de Defensa en 2011, planteó tres alternativas: cerrar la VI
Brigada Aérea, con asiento en Tandil, donde están los Mirage; comprar entre 30
y 36 aeronaves, o utilizar los nuevos entrenadores Pampa que se produzcan en
la Fábrica de Aviones de Córdoba hasta contar con un reemplazo definitivo.
Tanto la primera como la tercera
de estas alternativas dejarían al país prácticamente desprotegido, dado que los
aviones de industria nacional no llegarían a tiempo para diciembre de 2015 por
el atraso que vienen sufriendo en su fabricación. En función de esto, se optó
por la segunda alternativa.
La Fuerza Aérea planteó dos
posibilidades diferentes con miras a los próximos veinte años: una de mediano
plazo y más costosa, y otra de coyuntura y menor económica. La primera
incluía cazas de cuarta generación, entre ellos los Dassault Rafale (Francia), los
Sukhoi Su-35 (Rusia), los F-18 (EE.UU) y los Gripen (Suecia). Una operación de
esta naturaleza demandaría el desembolso, para la compra de 36 aeronaves, de
entre U$S 1.400 millones a U$S 5.000 millones, de acuerdo a si se trate de los
Su-35 o los Rafale. Esta opción, obviamente fue descartada por el Ministerio de
Defensa.
La segunda alternativa era
comprar aviones usados, que nos permitieran volar durante dos décadas, hasta
que se pudieran adquirir los de cuarta generación. Entre los seleccionados
estaban los Kfir C10 (Israel), los Mirage 2000-5 (Francia) y los MiG 29 (Rusia) y
se necesitarían entre U$S 500 millones y U$S 1.500 millones para alcanzar las
36 unidades deseadas.
Cuando se filtró la noticia de que
la Argentina estaba analizando la posibilidad de comprar aviones, entre mayo y
septiembre de 2013 llegaron ofertas de Israel por los Kfir C10 y de España por
los Mirage F-1.
La oferta española, no
contemplada en el CAMIL porque los F-1 tendrían una vida útil de diez años,
aparentemente incluía 12 aviones sin ningún tipo de modernización, otros 5
para utilizar como repuestos, simulador de vuelo y entrenamiento para los
pilotos y técnicos, tanto en España como en Argentina. A pesar de que la oferta
habría interesado a la Fuerza Aérea, fue descartada cuando los costos totales
alcanzaron un valor cercano a los 200 millones de euros (272,56 millones de
dólares) por la suma de los gastos por mantenimiento, puesta a punto y
logística para su envío.
Los Kfir, por el contrario, se
encontraban dentro de las alternativas que barajaban en el plan CAMIL. El
acuerdo incluiría 14 Kfir C10 monoplaza y 2 biplaza con las turbinas General
Electric J79 recorridas (overhaul) a cero, al igual que su estructura, y radar Elta
EL/M 2032, adaptados a estándares similares a los que cuenta Colombia (que
los compró en 2010).
Teóricamente, 6 de los aviones
podrían llegar al país un año después de firmado el contrato, y el resto podría
modernizarse en Córdoba o en Israel. A esto habría que sumarle los repuestos,
sistemas de armas para utilizar los misiles Sidewinder que tiene la Fuerza
Aérea, y los entrenamientos a pilotos y técnicos en Tel Aviv y Argentina, todo lo
cual haría ascender el monto total del contrato, teóricamente, hasta los U$S
200 a U$S 280 millones según la configuración final que se decida tengan las
aeronaves.
Este valor sería coincidente con el
publicado por la agencia de noticias israelí Globes en 2013, cuando anunció que
estos aviones, en su versión más completa y actualizados con nueva aviónica y
radares, tendrían un costo de U$S 20 millones cada uno, incluyendo nuevo
cableado, casco equipado para operaciones diurnas y nocturnas y con pobres
condiciones climáticas, y reabastecimiento de combustible aéreo para misiones
de largo alcance.
La Argentina habría ofrecido la
posibilidad de abonar parte del valor en exportaciones, para que el desembolso
de efectivo no sea tan grande y evitar que supere demasiado los $ 1.217
millones (155 millones de dólares) aprobados en el Presupuesto 2014, lo cual
es francamente otro farsesca página del relato kirchnerista. ¿Qué puede
interesarle a Israel de Argentina? Seguramente carne, trigo o soja, productos
que Argentina vende sin inconvenientes en el mercado internacional y se hace
de los dólares.
La oferta de los Kfir supera a la
española por la vida útil de los aviones, por la tecnología con la que contaban,
por la posibilidad de comprar más unidades y armar un banco de
mantenimiento para los aviones en el futuro, que les permitiría reparar y
actualizar las turbinas en el país
Para Oren Aviram, Director de
Marketing y Desarrollo de Negocios en la "fábrica Lahav del IAI", y Yossi
Melamed, director de "Lahav", si bien han pasado los 38 años de edad, el Kfir
es perfectamente apto y aunque desde fuera parece casi lo mismo, en su
interior posee tecnología instalada de la segunda década del Siglo XXI, por lo
que es un caza con capacidades no menos poderosas que las de aviones de
combate de la cuarta generación como los F-16, F-15, Eurofighter, Rafale, MiG-
29 o Sukhoi-30.
El "Bloque 60", un modelo hecho
en 2013 del Kfir, es un avión de combate mejorado que se sometió a un
"pelado" antes del comienzo del proceso de actualización. Esto es, se le quita
todo, hasta el cilindro central que constituye el fuselaje, y luego se le instala
todo lo nuevo: el cableado, la aviónica, los sistemas informáticos, radar y varios
tipos de armamentos y sistemas de avión con vuelo de la hora cero, dejándolo
con la capacidad de volar 8.000 horas, con la garantía del fabricante.
El principal cliente del Kfir es la
Fuerza Aérea Colombiana, que hasta hace pocos años operaba alrededor de
una docena de cazas Kfir de tercera generación.
Lahav pone un énfasis en la
característica Costo -Beneficio del "Bloque 60" modelo 2013 del Kfir, el cual
estaría "en línea con los aviones de cuarta generación y traería consigo entre 80
a 120 por ciento de su capacidad en términos de aviónica, armamento, carga
útil y vainas como el 'Lightning' para ataques nocturnos y la capacidad de
designación láser para un ataque preciso, capacidades de radar que incluyen
mapeo terrestre de alta resolución, capacidad de SAR que permite la
recopilación de información y ataques en todas las condiciones meteorológicas,
todo ello a un tercio del precio de los aviones de cuarta generación y con una
hora de vuelo a una cuarta parte del precio de la cuarta generación aviones
occidentales con un solo motor". Los usuarios actuales de Kfirs previamente
acondicionadas son Colombia y Ecuador.
Si bien pareciera ser una decisión
más acertada que la de comprar los F-1 españoles, sigue sobrevolando la duda
si no resultaría mejor inversión comprar algunos aviones menos, pero ya de
4G++, como los Sukhoi Su-30 o Su-35, que podrían conseguirse en el mercado
por valores que oscilan entre los U$S 35 millones a U$S 45 millones.
El Su-35 resulta el escalón
intermedio con el que los pilotos militares asimilen las tecnologías de nueva
generación, pero en un avión que supera claramente a todos los cazas
europeos de la generación 4G+, como el Rafale y el Eurofighter-2000, así como
a los cazas modernizados americanos F-15, F-16 y F-18, y es capaz de competir
efectivamente con los cazas de quinta generación F-35 y F-22.
El caza puede rastrear hasta 30
objetivos y apuntar con sus armas a diez simultáneamente. También tiene una
cabina de pilotaje de quinta generación, con dos grandes pantallas de color de
cristal líquido (LCD) donde se muestran todos los datos necesarios para el
piloto, de la manera en que funciona un televisor convencional, en el modo de
imagen en imagen.
Un Raptor cuesta 133,1 millones
de dólares, el ruso T-50, aunque más barato, también costará un dineral. En
cambio, el precio del Su-35 ronda los U$S 30-38 millones para una aeronave
con etiqueta '5G menos', y estamos frente a un avión nuevo para ser usado 30
o 40 años.
Queda claro que el parque aéreo
militar argentino es total y absolutamente obsoleto, y que no controlamos
nuestro espacio aéreo. Por ello se hace necesario replantearse con seriedad y
sin especulaciones, la necesidad de una importante inversión para reequipar a
nuestras fuerzas armadas. No hacerlo, significa apostar a su disolución.
En este sentido, la decisión de
haber incluido en el Presupuesto 2014 la suma de $ 1.200 millones para la
compra de aviones resulta auspiciosa si constituye el primer paso en un camino
sistemático tendiente a reducir la brecha tecnológica y el estado de indefensión
en el que nos encontramos frente a los demás países, no ya del primer mundo,
sino del tercero, como nosotros.
Nos interesa sobremanera
conocer, dentro de nuestras posibilidades, que alternativas se barajaron y
cuáles son los elementos que fueron tenidos en cuenta a la hora de optar por
esta alternativa.
De hecho, no podemos prescindir,
en este tema, de las consideraciones geoestratégicas que nos indican que
seguimos comprándole armamento a países con fuertes vínculos con quienes
mantenemos disputas de soberanía, como es el caso de Israel durante nuestro
conflicto con el Reino Unido.
Por todo lo expuesto solicito a mis
pares me acompañen en la aprobación del presente pedido de informes.
Firmante | Distrito | Bloque |
---|---|---|
MARTINEZ, JULIO CESAR | LA RIOJA | UCR |
Giro a comisiones en Diputados
Comisión |
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DEFENSA NACIONAL (Primera Competencia) |