La Cámara de Diputados de la Nación

RESUELVE:

Dirigirse al Poder Ejecutivo Nacional, a los fines de solicitarle que al implementar el Programa recientemente anunciado de medidas de acción positiva a favor de los pequeños y medianos productores agropecuarios, tenga a bien considerar la siguiente propuesta:

1) Se dé intervención a los gobiernos provinciales en la implementación de las políticas.

2) Se garantice la participación de las organizaciones representativas de los productores agropecuarios, sectoriales y regionales.

3) Se cree una "mesa técnica de seguimiento", con el objetivo de analizar la rentabilidad de los productores, en particular los costos de producción, el valor de los productos, el valor de los insumos, como así también las diferencias regionales y la situación de los pequeños y medianos productores para evitar la concentración de las actividades en pocas manos.

4) Se estudie la viabilidad de destinar parte de la renta captada mediante las retenciones a la exportación de soja, a la promoción de otros cultivos, entre ellos el maíz y el sorgo.

5) Se contemple la posibilidad de reducir los aranceles de importación aplicados a plaguicidas y fertilizantes.

6) Se diseñen políticas de apoyo a las economías regionales que permitan mejorar su rentabilidad, a través de la generación de fondos específicos, con parte de los montos que se obtienen de las retenciones, que serian transferidos a los gobiernos provinciales para que estos los administren con intervención de los sectores involucrados. Concretamente en el caso de Entre Ríos, mediante incentivos a la citricultura, apicultura, arroz, etc.

Señor presidente:

Este proyecto de Resolución tiene como objetivo aportar, en el ámbito que consideramos más adecuado para la deliberación pública, un conjunto de ideas fuerza, que ayuden a salir del conflicto planteado por el sector agropecuario y que tuviera una particular intensidad en la provincia de Entre Ríos.

Estamos convencidos que fue el modelo económico que se instaló en la Argentina bajo la presidencia del Dr. Kirchner, lo que permitió un crecimiento del 7 al 9 % anual en los últimos cinco años, la acumulación de más de cincuenta mil millones de dólares de reservas en el Banco Central, el sostenimiento del dólar a valores competitivos para la exportación, el superávit fiscal, el superávit comercial, la disminución de los niveles de desocupación a valores impensables del 7% anual, como así también la baja de los índices de pobreza. Todas estas variables macroeconómicas son las que permiten que hoy Argentina no esté "temblando" ante la crisis financiera internacional más grande de los últimos cincuenta años, generada ella por la burbuja hipotecaria en EEUU (más importante que la ocurrida en Méjico, Sudeste Asiático y Rusia en la década del 90).

A su vez, el aumento del precio internacional de los alimentos y el petróleo ha generado una competencia entre un mercado interno donde el consumo de los mismos se encuentra en un sostenido crecimiento, producto de la disminución de la desocupación y el aumento de los salarios - aunque aún bajos con referencia a los países desarrollados- y un mercado internacional con altos precios y alta demanda. En ese contexto, Argentina tiene una gran posibilidad, dado que es uno de los pocos países que puede seguir aumentando su oferta. Indudablemente abastecer el mercado interno y satisfacer la demanda externa requiere de políticas que permitan seguir aumentando la producción de granos, carne bovina, ovina, avícola, porcina, leche, biocombustibles, etc.

Dado el levantamiento del paro resuelto por las organizaciones sectoriales el 2 de abril pasado, y considerando las mesas de diálogo que seguramente se implementarán entre el gobierno nacional y los productores, creemos que es el momento oportuno para que se le dé una fuerte participación a los gobiernos provinciales en la implementación de futuras medidas. También estimamos conveniente que, en representación de las organizaciones de productores se garantice la participación de dirigentes de organizaciones sectoriales y regionales.

El eje de análisis de estas mesas debe centrarse sobre la rentabilidad al productor, para permitir que el sector siga creciendo, creando en el ámbito de las mismas una "Mesa Técnica de Seguimiento" de costos de producción, valor de los productos, valor de los insumos, contemplando las distintas regiones del país y la situación de pequeños y medianos productores para evitar la concentración de actividades en pocas manos.

El predominio del cultivo de la soja se debe en gran medida a que es el que más rentabilidad posee, producto de un menor costo por hectárea y de ser un cultivo resistente ante situaciones climáticas adversas, de gran rusticidad y adaptabilidad a distintas condiciones de suelos, todo lo cual, junto con la tecnología de la siembra directa, permitió la ampliación de la frontera agrícola. Estamos de acuerdo en que una mayor retención a esta oleaginosa le hace disminuir la rentabilidad, pero a los efectos de sustituir esa superficie con maíz y sorgo, es necesario darle a éstos una mayor rentabilidad. Una alternativa sería que parte de los recursos obtenidos de las retenciones de la soja vean volcados a la promoción de dichos cultivos, que por otro lado tienen la particularidad de incorporar mayor cantidad de materia orgánica a los suelos, manteniendo la fertilidad de los mismos y haciendo sustentable la agricultura hacia el futuro.

Otra forma de sostener las retenciones y garantizar la rentabilidad agropecuaria, es la de contemplar la reducción de los aranceles de importación de plaguicidas y fertilizantes estratégicos para la producción. La idea es que lo que el Estado deja de recaudar por aranceles a la importación, lo que recupera por un mayor ingreso por retenciones, dado el aumento de producción que se alcanza.

En relación a las economías regionales que son mano de obra intensiva, que generan desarrollo local y radican población en el territorio, sería importante crear políticas de apoyo que permitan mejorar su rentabilidad y a su vez consolidarlas. Entre Ríos cuenta con algunas de ellas, como la citricultura, apicultura, el arroz, etc., cuya base productiva son pequeños y medianos productores. Para consolidar estas actividades sería necesario generar un fondo específico de apoyo a las mismas, a partir de los montos que se obtienen de las retenciones, donde estos recursos sean transferidos a los gobiernos provinciales, para que en un ámbito conjunto con los productores involucrados en esas actividades, se vean ellas fortalecidas y puedan garantizar calidad de producto para el consumo interno y la exportación.

En relación a la creación de la Subsecretaría de Desarrollo Rural y Agricultura Familiar propuesto por la SAGPyA, valoramos como necesario y oportuno se avance en este proyecto. En efecto, en Entre Ríos, en el período 2003-2007, hemos avanzado sustancialmente en coordinación con la citada Secretaría y con el INTA en programas de apoyo de pequeños y medianos productores, creándose el Consejo Provincial de Políticas para el Desarrollo Rural, donde se coordinan acciones entre las distintas instituciones públicas y privadas comprometidas con el arraigo de los productores y sus familias al medio rural, y así evitar el éxodo de población hacia grandes centros urbanos.

No fue ésta la única medida ideada por aquella gestión gubernamental a favor de los pequeños y medianos productores, como lo demuestran los siguientes números:

Las Exportaciones entrerrianas:

- Año 2003, 532 Millones de dólares.

- Año 2006, 945 Millones de dólares.

- Año 2007, record histórico superando los 1.150 Millones de dólares FOB.-

Esto implicó un crecimiento del 116% de las exportaciones durante la mencionada gestión de Gobierno, lo que hizo que Entre Ríos pase del lugar 13 al 7 en el ranking de provincias exportadoras argentinas.

Las Empresas exportadoras:

También creció el número de empresas exportadoras:

- Año 2003 exportaban 345 firmas.-

- Año 2007, 496 empresas.-

Lo que implica un aumento del 44% en la cantidad de firmas entrerrianas que exportan.

Si analizamos solamente las Pymes exportadoras, el crecimiento fue mayor todavía pasando de 264 firmas, en el 2003, a 412 firmas en el 2007, es decir, una evolución del 56%.

Asistencia crediticia a Pymes:

Otro objetivo de nuestra política de desarrollo productivo, fue la generación de líneas de crédito competitivas para las Pymes en general, y para cada uno de los sectores de la economía provincial.

- Se colocaron a la fecha 98 millones de pesos financiando 1245 proyectos en las distintas líneas.

- A través del CFI, se firmaron 689 proyectos por un monto de 32 millones de pesos.

Es decir, fueron financiados a través del Estado provincial 1934 proyectos por un monto de 130 millones de pesos, a partir del cual se consolidaron más de 3000 puestos de trabajo directo.

Así las cosas, la visión común sobre el modelo económico en base al cual debe organizarse el país, y la experiencia de gobierno acumulada a través de tres gestiones en la Provincia de Entre Ríos en las que se apoyó en forma decidida a los pequeños y medianos productores, nos permite plantear de modo constructivo al gobierno nacional las ideas contenidas en éste Proyecto de Resolución, inspiradas, todas ellas, en una racionalidad política de inclusión social, redistributiva, federal, participativa y productiva.

Por todo lo expuesto, es que pedimos a nuestros pares la probación del presente Proyecto de Resolución.