La Cámara de Diputados de la Nación

DECLARA:

Expresar su beneplácito por la decisión adoptada por la hermana República del Perú de no permitir que la nave HMS Montrose, de la marina Británica, repostara en el Puerto del Callao.

Señor presidente:

En un nuevo escenario regional que se construye todos los días en Sudamérica, que tiene como soporte la solidaridad y dignidad entre sus pueblos, la hermana República del Perú, ha dado otro paso que consolida con acciones, los acuerdos planteados por los países de la región.

La diplomacia latinoamericana continúa siendo homogénea, ante los embates de la potencia colonialista, y no deja fisuras a pesar de la presión permanente que sufre. Por ello, es más que digno los argumentos esgrimidos por el Canciller que la decisión fue adoptada "en el espíritu de los compromisos de solidaridad latinoamericana asumidos en el marco de la Unasur respecto de los legítimos derechos de la Argentina en la disputa de soberanía sobre las Islas Malvinas, Georgias del Sur y Sandwich del Sur y los espacios marítimos circundantes"

No es un hecho menor haber ejercido un acto de soberanía, cuando se sufre la presión de una potencia mundial, que suma otro fracaso a pesar de haber mandado hace menos de una semana a un funcionario de máxima jerarquía al Perú.

Es destacable la estrategia desarrollada por nuestro País en todos los organismos multilaterales, donde marcamos nuestra presencia con el reclamo sostenido y constante sobre la soberanía de las Islas Malvinas, Georgias del Sur y Sandwich del Sur y los espacios marítimos circundantes, que rinde sus frutos tempranamente, sin renunciar al reclamo por las vías pacíficas y diplomáticas. Al mismo tiempo, es importante manifestar el respaldo a las gestiones que se vienen desarrollando con el objetivo de que el conjunto de la comunidad internacional se manifieste a favor del cumplimiento de la Resolución 2065 de Naciones Unidas.

Es evidente que los resultado obtenidos por nuestra diplomacia, dan sobrada muestra que estamos en el camino correcto. Hemos vuelto a poner en la agenda internacional el anacronismo que significa el colonialismo y la injusticia que ello conlleva. Pero además, la cuestión Malvinas se vuelve a expresar con fuerza en el contexto mundial para tomar cuerpo en hechos concretos que tiendan a finalizar esta usurpación

Esta situación colonial, de la que somos víctima, merece el repudio y la reprobación no solo por la presencia militar británica, sino también por la explotación de los recursos naturales que nos pertenecen.

Es necesario dar un respaldo político institucional legítimo a estas acciones y decisiones que toman los países latinoamericanos cuando defienden solidariamente nuestros intereses, por ese motivo es importante que esta Honorable Cámara de un fuerte mensaje de apoyo y a la vez de agradecimiento al Gobierno y al pueblo peruano que nos han honrado.

Por este motivo, solicito a mis pares la aprobación de este proyecto.