La Cámara de Diputados de la Nación

RESUELVE:

Dirigirse al Poder Ejecutivo Nacional en los términos del art. 100 inciso 11 de la C.N. para que por intermedio del Ministerio de Relaciones Exteriores y Culto y demás organismos competentes en la materia, informen a esta H. Cámara de Diputados respecto de las siguientes cuestiones vinculadas a presuntas irregularidades administrativas acontecidas en la Embajada de la República Argentina acreditada ante el gobierno del Estado Plurinacional de Bolivia.

1.- Acompañar la totalidad de la documentación concerniente a los pedidos de extensión de visa y franquicia diplomática para los funcionarios argentinos acreditados en La Paz, desde que el embajador Ariel Basteiro se halla encabezando la misión.

2.- Efectuar un prolijo detalle sustentado con la pertinente documentación respaldatoria de los trámites y notas precedentes que, según el Ministerio de Relaciones Exteriores y Culto avalarían el accionar de nuestra embajada, a fin de demostrar que los agentes diplomáticos nacionales actuaron en el marco de la legislación boliviana y de la Convención de Viena.

3.- Acreditar fehacientemente si el ex agregado aeronáutico en la sede diplomática argentina en La Paz, Comodoro Edgardo Gustavo Sigler, quien debía dejar su cargo y trasladarse de regreso a Buenos Aires el 27 de octubre de 2014, junto a otros tres militares; recibió el 20 de octubre de 2014, por conducto del embajador Basteiro y de la consejera de embajada Alejandra Elena di Vico la ampliación de funciones y privilegios, solicitaron mediante nota dirigida a la cancillería boliviana, cuando ya se le había vencido su estancia. Adjuntar la correspondiente autorización que debió ordenar la cancillería argentina.

4.- Certificar de manera fidedigna si el ex Comodoro Edgardo Gustavo agregado Sigler, fue beneficiado por nuestra representación diplomática a fin que pudiera tener una franquicia diplomática, con la consiguiente liberación de impuestos (arts. 23, 34 y 36 de la Convención de Viena sobre Relaciones Diplomáticas), para una camioneta Nissan que costó US$ 24.789, indicando si Sigler ya tenía otra franquicia previa para su vehículo Citröen comprado en la Argentina, que entró a Bolivia con placa de cortesía por pedido del embajador argentino, dado que la ley prohíbe la doble franquicia.

Señor presidente:

Entre las autoridades de la Cancillería de nuestro país cunde cierta preocupación por lo que ocurre con la sede diplomática en La Paz. Si en el pasado hubo que llamar al orden al embajador en Bolivia Ariel Basteiro, por sus abiertas expresiones, sin autorización, a favor de una salida al mar para Bolivia (lo que irritó a los chilenos), las "desmedidas" atribuciones que se adjudicó son las que preocupan ahora.

Según pudo saber Clarín, el exdiputado mandó a autorizar a la Cancillería boliviana la extensión de la visa y la franquicia diplomática de funcionarios argentinos, acreditados en La Paz, que no pertenecían al cuerpo diplomático del Ministerio de Relaciones Exteriores y Culto.

El hecho recuerda otro escándalo de irregularidades con franquicias diplomáticas de autos nacionalizados en forma irregular, pero en la Argentina. Esta vez, involucra a Basteiro como jefe de misión, pero también a su consejera Alejandra Elena di Vico, pues, como se aprecia en la documentación, es quien terminaba firmando los papeles.

Sin embargo, la denuncia fue desmentida por la Cancillería argentina, a través de un comunicado, y califica de "ser falsa, mal intencionada, parcializada y utilizada con la clara intención de desinformar". "El artículo omite maliciosamente mencionar la existencia de trámites y notas precedentes que avalan el accionar de la embajada, con el claro propósito de afectar a funcionarios que actuaron en el marco de la legislación boliviana y de la Convención de Viena" (Fuente: Página 7, diario de Bolivia).

"Clarín" informó que tiene la certidumbre que de estos asuntos no son de conocimiento del canciller Héctor Timerman. En la oficina de prensa del Ministerio de Relaciones Exteriores no quisieron dar opinión ante la consulta de "Clarín. Lo que falta confirmar es si Basteiro pidió autorización a Buenos Aires para realizar esas gestiones.

"Clarín" confirmó al menos una de las irregularidades señaladas. Es la que involucra al ex agregado aeronáutico en la sede diplomática argentina en La Paz, Comodoro Edgardo Gustavo Sigler, quien debía dejar su cargo y

trasladarse de regreso a Buenos Aires el 27 de octubre de 2014, junto a otros tres militares. Sin embargo, el 20 de octubre de 2014, De Vico y Basteiro solicitaron mediante nota dirigida a la cancillería boliviana, la ampliación de funciones y privilegios, cuando ya se le había vencido su estancia.

De los varios documentos y facturas de compra que exhibe "Clarín", surge una segunda irregularidad que tiene que ver con las gestiones de Basteiro para que el ex agregado Sigler pudiera tener una franquicia diplomática, lo que implica liberación de impuestos, para una camioneta Nissan que costó US$ 24.789. El problema es que Sigler ya tenía otra franquicia previa para su vehículo Citröen comprado en la Argentina, que entró a Bolivia con placa de cortesía por pedido del embajador argentino. La ley prohíbe la doble franquicia.

Los jefes de misión tienen la obligación de controlar todo lo referido a franquicias diplomáticas, según un apartado del reglamento para las representaciones diplomáticas en el exterior. El artículo 115° establece la preeminencia de las leyes locales, y en Bolivia sólo se permite tener una franquicia (Fuente: EJU TV de Bolivia).

A efectos de conocer lo acontecido con la embajada de nuestro país en la hermana República de Bolivia- una misión diplomática vital y sensible para nuestros intereses nacionales -, interpongo el presente pedido de informes, cuya aprobación solicito a mis colegas diputados y diputadas.