La Cámara de Diputados de la Nación

RESUELVE:

La H. Cámara de Diputados de la Nación,

RESUELVE:

Solicitar al Poder Ejecutivo que implemente una Política de Estado tendiente a incentivar y apoyar a la producción agrícola-ganadera, por sus características estratégicas y por su importancia en el desenvolvimiento de la vida de los argentinos, en el marco del respeto por los presupuestos mínimos de protección ambiental.

Señor presidente:

Teniendo en cuenta los debates que se sucedieron con respecto al proyecto de ley sobre "presupuestos mínimos de protección ambiental para las bosques nativos" que recientemente obtuvo media sanción en la H. Cámara de Diputados, considero que es imprescindible que el Poder Ejecutivo instrumente los medios pertinentes para establecer una Política de Estado en materia de producción agrícola-ganadera, siempre en el marco del cuidado ambiental.

Bien sabemos que ambos factores, el productivo y el ambiental, contribuyen positivamente a elevar el desarrollo socio- económico y mejorar la calidad de vida de todos los argentinos y eso exige un compromiso indelegable de parte del Estado en la temática en cuestión.

Complemento estos fundamentos con las observaciones que realiza en un artículo de opinión el Dr. Ángel Girardi, doctor en Derecho y Ciencias Sociales, productor agropecuario, hombre de campo y defensor de las riquezas naturales de cada región de nuestro bendito país, que deben ser tenidas en cuenta como pilares para la elaboración de una Política de Estado en la materia.

Sólo una disidencia con Oppenheimer - Dr. Ángel Fernando Girardi

(Diario La Capital, de Rosario, 14 de Febrero de 2007)

"...Disiento con el cierre del artículo del 24/02/07: "Mi conclusión: la historia del éxito de Bagalore debería ser enseñada en las escuelas de América latina, donde la mayoría de los países depende de los recursos naturales y poca atención le prestan a la creación de una fuerza laboral calificada. En la economía del siglo XXI, los recursos naturales pueden ser una receta para la competencia y el atraso, mientras que las mentes capacitadas significan un pasaporte a la prosperidad".

Conociendo nuestra realidad, no podemos estar de acuerdo con lo dicho. Es entendible que la India pueda apostar a obtener válidamente ingresos económicos merced a los 330.000 ingenieros en informática que egresan de sus universidades, pero no es menos cierto que su apuesta a tal sector tiene una relación directa derivada de su tremenda desproporción entre habitantes y tierras aptas para la producción de alimentos, caso éste muy similar al de Japón, Corea, etc., quienes han producido "milagros" económicos similares. De allí que para este país aspirar a este tipo de formación profesional es acertado. Pero ello nada tiene que ver con América latina, donde merced a los incontables recursos naturales, está destinada a ser la abastecedora de una población mundial de más de seis mil millones de almas en la actualidad y de un estimado de aproximadamente diez mil millones para el 2020. Por lo demás, lejos estamos de manejar dichos recursos para "la complacencia y el atraso", todo lo contrario, los recursos naturales están siendo altamente optimizados merced a una constante labor profesional y, desde el punto de vista de su incidencia económica, la Argentina es un caso testigo por excelencia donde se puede apreciar que tales bienes no sólo han sido el pilar fundamental, que le permitió generar la suficiente cantidad de divisas para superar la crisis económica más importante de su historia, sino que también se ha convertido en una prolífica fuente de ingresos para mejorar su posición financiera y reactivar la absorción laboral mediante la creación de ingentes fuentes de empleo. Debemos crear una "fuerza laboral altamente calificada", pero ella debe estar orientada hacia aquellas fuentes de producción que "naturalmente" poseemos, llámese agro o agroindustria o industria liviana. Nuestro país ya está encaminado hacia esa meta y, en un plazo no muy lejano, cosecharemos importantes frutos.

Podemos decir con orgullo que se está consolidando un largo proceso de profesionalización de todo el sector agrícola ganadero como producción primaria; pero vemos también cómo crece a pasos agigantados dicho fenómeno en los sectores secundarios tales como la industria frigorífica, en la de las maquinarias en la industria de la biotecnología y bioenergía, en la investigación científica en mejoras de productos de la más diversa especie; en la industria automotriz en todos sus niveles, etc. etc... Nuestro país está por la buena senda, explotando de modo óptimo sus riquezas naturales, expandiéndolas en calidad y cantidad, y está produciendo desde sus altas casas de estudios todos los técnicos que su economía necesita e incluso se da el lujo de que muchos de ellos emigren y sean bien aceptados por la comunidad internacional que los demanda. Ello no es óbice para que, en aras a mejorar lo que ya hacemos bien, no dejemos de observar atentamente lo hecho por otros países del mundo para superarse, y luego podamos adecuar aquello que nos pueda hacer crecer aún más como una comunidad que desea borrar para siempre los imperdonables errores económicos, políticos y sociales cometidos en su pasado institucional."

En la misma línea de lo desarrollado hasta aquí podemos leer en La Gaceta de Tucumán, del día viernes 23 de marzo de 2007, algunos comentarios sobre el tema haciendo hincapié específicamente en la producción del NOROESTE ARGENTINO.

ENCUENTRO AGROPECUARIO-DEBATE EN LA SOCIEDAD RURAL

Productores se quejan de la fuerte presión fiscal

Afirman que las expectativas son inmejorables, pero critican la falta de una política agropecuaria firme y el "sesgo antiexportador" oficial. Pronostican una cosecha récord. Pero advierten que hay "muchas luces amarillas". Panorama de la soja, del poroto y del maíz.

El escenario no puede ser mejor: los precios internacionales se sostienen, con una tendencia hacia el alza a largo plazo (20 años); las lluvias propiciaron un excelente desarrollo del cultivo y la cotización del dólar continúa por encima de los tres pesos. La producción de granos sigue siendo un gran negocio en la Argentina. Sin embargo, el sector se queja de las distorsiones que le provoca el Gobierno nacional, que aún no exhibe una política agropecuaria seria.

Esta es la conclusión que surgió de la "Jornada Agropecuaria NOA 2007", de la que participaron alrededor de 200 productores granarios, especialistas técnicos, economistas, directivos de empresas y funcionarios provinciales.

Las expectativas para esta campaña son buenas: estiman que la producción de granos en el país este año será de 90 a 94 millones de toneladas; y en Tucumán, unas 800.000 toneladas. Pero los productores son críticos con el Gobierno nacional. El propio presidente de la Sociedad Rural de Tucumán (SRT), Víctor Pereyra, lo hizo notar, al inaugurar la jornada. "Estamos a las puertas de una cosecha que, seguramente, será récord, pero con muchas luces amarillas", afirmó. El directivo mencionó, entre los principales problemas, las elevadas tarifas del transporte, sobre las cuales dijo que deben ser diferenciales por regiones. También, se quejó de la política impositiva... "El Gobierno nacional observa sólo los precios internacionales, que están en un muy buen nivel, pero no pondera la estructura de costos, que está subiendo cada vez más. Insumos, como los fertilizantes subieron, en dólares, un 50%; también, aumentaron las tarifas de servicios y del transporte y los salarios", aseveró Pereyra.

A su vez, el presidente de la Bolsa de Cereales de Córdoba, Erardo Gallo, cuestionó el aumento de los derechos de exportación.

"El aumento en las retenciones (del 23,7% al 27,5%) para mantener los precios internos de la canasta básica, es, nuevamente, un castigo a un sólo sector. Por suerte, estamos en condiciones de cederlo, pero había otras alternativas para generar esos recursos, que las entidades agropecuarias las habían propuesto al Gobierno", remarcó. El directivo mencionó como uno de los principales problemas para todo el sector agropecuario la falta de infraestructura vial. "Esto es lo más importante. No tenemos, por ejemplo, una autopista que venga desde el NOA hacia los puertos. Y eso incide directamente en los altos costos que tiene el flete. Transportar las cosechas por ruta que tiene muchos obstáculos, incrementa el consumo de gasoil entre un 7% y un 10%, o más", aseveró. Gallo dijo que la relación entre el sector agropecuario y el Gobierno es un diálogo de sordos. "Estamos llenos de anuncios, pero faltan realidades. La autopista Córdoba-Rosario, por ejemplo, es un proyecto de los 60, pero hoy está concretado sólo un 30%", afirmó. Por su parte, el productor tucumano Jorge Posse criticó la presión impositiva aplicada al sector. "Hoy, de cada tres camiones que enviamos a Rosario, uno se lo queda el Gobierno, porque las retenciones son el 23,8%, más el 4% para subsidiar la canasta básica, más el 1,2% del impuesto al Cheque, lo cual redunda en un gravamen total del 29%", reflexionó. Entre las complicaciones de índole productivo mencionó la cosecha en simultáneo de la zona núcleo de producción granaria del país con la de Tucumán y su área de influencia, lo cual podría generar inconvenientes con la disponibilidad de equipamiento. Arturo Forenza, otro agricultor de la provincia, aseguró que también preocupa la falta de sol y de luz en la soja, justamente, a causa de las lluvias. Pero se quejó del deterioro de las carreteras que pasan por la provincia. "Esto traerá graves consecuencias en la cosecha, si es que no se reparan adecuadamente", aseveró Forenza.

Por el lado del maíz, el especialista Martín Rosenkjaer (miembro de la Cámara de Legumbres de la Argentina) también afirmó que las perspectivas son muy buenas. "Hay precios sostenidos y altos. Hay una oportunidad única para incluir el maíz en el sistema de rotación, por precios y por su impacto en la sustentabilidad del sistema productivo", aseveró Rosenkjaer, que fue uno de los disertantes.

En cambio, por el lado del poroto, los augurios no son tan buenos. Este cultivo encuentra serios problemas para ubicar compradores externos y para contar con precios sostenidos y competitivos, en función de la producción. "En el NOA se van a sembrar entre 100.000 y 120.000 hectáreas de poroto blanco y de 25 a 30.000, del de color. Pero las del negro no van más de 50.000. Para el poroto negro va ser un mal año", sentenció Sergio Uhart, especialista en granos.

Por último, también podemos leer en la edición del día 17 de marzo de 2007 en el diario La Nación, el siguiente artículo:

Fuertes críticas a las retenciones y a la actual política agropecuaria

Elisa Carrió, Mauricio Macri, Ricardo López Murphy y Jorge Sobisch destacaron la importancia del sector

JUNIN.- Con una afluencia de público que ya supera los 135.000 visitantes, Expoagro recibió ayer a más políticos en campaña. Los candidatos presidenciales Ricardo López Murphy, Jorge Sobisch, Elisa Carrió; el aspirante a la jefatura de Gobierno porteña, Mauricio Macri; y los presidentes de la Unión Cívica Radical (UCR) y del Partido Socialista, Gerardo Morales y Rubén Giustiniani, respectivamente, firmaron un compromiso público con la cadena agroindustrial en un encuentro organizado por el grupo Pampa Sur.

El panel fue coordinado por la diputada nacional María del Carmen Alarcón, la legisladora que a principios de 2006 fue expulsada del bloque oficialista y de la presidencia de la Comisión de Agricultura de la Cámara baja por oponerse al manejo del Gobierno en el mercado de carnes. Alarcón lamentó la ausencia de Roberto Lavagna.

En ese encuentro, algunos dirigentes repitieron lo que ya habían adelantado anteayer, otros trataron de ser originales, y ninguno logró demasiados aplausos. Carrió sorprendió al "valorar la cultura conservadora de la tierra del hombre de campo. No es lo mismo vivir en la ciudad que esperar que la vaca crezca. El campo debe ser conservador porque, si no, no hay ganadería ni agricultura posible", afirmó la ex diputada nacional en su segundo día de visita a la muestra, donde anteayer propuso eliminar las retenciones a las exportaciones de carne y leche y reducir las que se aplican a los granos.

A la vez que llamó a "dejar en paz al campo", la candidata presidencial, ex líder de Alternativa para una República de Iguales (ARI), afirmó: "Yo soy liberal para el campo y socialista para la distribución de la riqueza. Llaman oligarquía ganadera al campo, pero la única oligarquía que yo conozco es la de los políticos corruptos que se está quedando con los campos", afirmó. En tanto, un eufórico López Murphy levantó los aplausos más espontáneos cuando calificó de "perversas" a las retenciones. "Son perversas porque hacen inviables las tierras marginales, que quedan desocupadas, y porque nos degrada tecnológicamente; y no es verdad que sean necesarias para la distribución de la riqueza", afirmó el candidato de Recrear, que reconoció estar con "una gran energía y un entusiasmo natural para esta campaña".

En el auditorio principal de Expoagro, ante unos 200 asistentes, Macri destacó "el compromiso que el sector siempre tuvo con la reinversión, incluso en la época de la convertibilidad", y pidió reglas claras. Además, recordó las peleas familiares "en la casa de la abuela entre los tíos del campo y los partidarios de la industria" y pidió asumir el desafío del "volumen de la cosecha, pero también el del valor agregado".

Con alguna evidente nostalgia por la candidatura a jefe de Estado que desestimó semanas atrás, el presidente de Boca Juniors también recorrió algunos stands donde se interiorizó del gran momento que vive el sector agropecuario en general, y particularmente el de la maquinaria. "Solamente el 26% de los $ 14.300 millones que se recaudan con las retenciones va a los planes Jefes y Jefas de Hogar. ¿Qué se hace con el resto?", se preguntó.

El gobernador de Neuquén y también candidato a la presidencia de la Nación, Jorge Sobisch, detalló la política agropecuaria que desarrolló en su distrito. "En Neuquén se pagan los impuestos más bajos. Y no sólo eso, nosotros le pagamos a los productores para producir, para que no ocurra el éxodo hacia el conurbano que sufren otras provincias. Cuando a alguien le va bien, este Gobierno le pone un impuesto al éxito. Yo quiero que en mi la Argentina nadie le diga oligarca a alguien que trabaja en el campo", afirmó.

El senador nacional Gerardo Morales, presidente de la UCR y principal impulsor de la candidatura de Roberto Lavagna por ese partido, afirmó que "no se puede prometer eliminar las retenciones porque eso sólo es posible en el mediano plazo y de manera gradual. Pero los productores tienen que controlar lo que el Gobierno hace con los recursos". Y Giustiniani, pidió una mayor inversión en infraestructura de comunicación, caminos y ferrocarriles. En primera fila escuchaban Juan Carlos Blumberg (que todavía coquetea con la posibilidad de ser candidato a gobernador bonaerense), la líder de Unión por Todos (y virtual aliada de Carrió), Patricia Bullrich; los también aspirantes a la gobernación bonaerense Jorge Macri y Francisco de Narváez, y varios diputados nacionales de Pro y dirigentes de las entidades ruralistas. Además, también recorrieron Expoagro los gobernadores de Santiago del Estero, Gerardo Zamora; de Formosa, Gildo Insfrán, y de La Pampa, Carlos Berna. Anteayer ya lo había hecho el de San Juan, José Luis Gioja.

Como se puede ver, desde todos los sectores y en todas las regiones se está solicitando al Poder Ejecutivo la necesidad imperiosa de implementar una Política de Estado tendiente a incentivar y apoyar a la producción agrícola-ganadera, por sus características estratégicas y por su importancia en el desenvolvimiento de la vida de los argentinos, en el marco del respeto por los presupuestos mínimos de protección ambiental.

Por todo lo expuesto solicito a mis pares que me acompañen en este proyecto.

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