La Cámara de Diputados de la Nación

DECLARA:

Repudio por la distribución gratuita en todos los hospitales públicos de la llamada "Píldora del día después" que ha realizado el Ministerio de Salud de la Nación amparándose en el marco de la ley de salud reproductiva.

Señor presidente:

El Ministerio de Salud de la Nación decidió distribuir en forma gratuita en todos los hospitales públicos del país la llamada píldora del día después, disimulando el carácter abortivo de la misma y argumentando que el Ministerio se encuentra trabajando en una política de Estado que tiene como estrategia la prevención del aborto y, que por tal razón, el acceso a los métodos anticonceptivos debe ser igualitario para todas las mujeres del país.

Al celebrarse la semana pasada el Día Internacional de la Mujer se publicaron los datos de la Primera Encuesta Nacional de Salud Sexual y Reproductiva en la cual se reveló que el 80% de las mujeres con vida sexual activa utiliza algún método anticonceptivo, por lo que a mi entender resulta innecesario la distribución gratuita de una pastilla que encubre el aborto, reavivando de esta manera una polémica con los distintos sectores sociales que se oponen a estas practicas y que asumen la defensa de la vida humana desde la concepción misma.

Según el derecho argentino, la vida humana comienza en el momento de la concepción (en la unión de un óvulo con el espermatozoide), y desde ese momento se es persona (sujeto apto para ser titular de derechos, en particular, del derecho a nacer y del derecho a la vida). De ninguna manera la calidad de persona surge con el acto de la animación, sino que su condición es previa.

La Declaración Universal de Derechos Humanos, adoptada por la Asamblea General de las Naciones Unidas el 10 de diciembre de 1948, proclamó que la libertad, la justicia y la paz en el mundo tienen por base el reconocimiento de toda persona como ente susceptible de adquirir derechos y contraer obligaciones. Dicha declaración fue prescripta constitucionalmente por nuestro país y conforme la Legislación Civil y Penal, la vida se inicia en el momento de producirse la concepción.

Señor Presidente, como legislador nacional, como creyente y como persona que defiende la vida desde la concepción, me niego terminantemente a aceptar que el Ministerio de Salud de la Nación proyecte en los argentinos un método que, para impedir una gran cantidad de abortos y mantener una política de Estado antiabortista, impida llevar a adelante embarazos no deseados, con la intención de evitar un mal mayor (el aborto) aceptando un mal menor (la Píldora del Día Después - abortiva), resultando éste un argumento repudiable sumamente inconsistente para fundamentar su masiva y gratuita distribución, legalizando paralelamente numerosos homicidios.

Señor Presidente, por las razones expuestas precedentemente solicito a mis pares que me acompañen con su voto en el presente proyecto.