La Cámara de Diputados de la Nación

RESUELVE:

1 - Brindar su homenaje al doctor Miguel Ragone, ex gobernador de la Provincia de Salta, único ex gobernador constitucional en Latinoamérica desaparecido como consecuencia del terrorismo de Estado, al cumplirse el próximo 11 de marzo el 30° aniversario de su desaparición.

2 - Adherir a la iniciativa de la Comisión de Derechos Humanos de la Provincia de Salta de incorporar su conmemoración en la agenda nacional que marcará los actos del 30° aniversario del golpe militar.

3 - Impulsar el logro de la verdad y la justicia en este caso, tomándolo como símbolo y ejemplo a seguir en la búsqueda de la verdad de todos los casos de víctimas del terrorismo de Estado en el entendimiento de que es un deber moral de la Argentina, de toda la Nación, apoyar y estimular la investigación, entendiendo el presente homenaje a un ex gobernador democrático, elegido por el mayor porcentaje de votos del pueblo salteño de la historia, como extensivo a todas las víctimas del terrorismo de Estado ejercido en la Argentina en la década del 70.

Señor presidente:

Miguel Ragone nació en San Miguel de Tucumán, Provincia de Tucumán, el 25 de mayo de 1921. Vivió en Salta desde sus 12 años hasta su desaparición, en 1976. Allí se recibió de Bachiller, luego estudió medicina en la Universidad Nacional de Buenos Aires. Cuando estaba a punto de finalizar su carrera, junto a su compañero en la especialidad de neurocirugía, Raúl Matera, fue convocado por el ministro de Salud de la Nación durante la presidencia de Juan Domingo Perón, Ramón Carrillo, para que se desempeñara como secretario privado y colaborador del Plan de Salud. Desde ese puesto comenzó a tomar participación en las determinaciones del peronismo a nivel nacional. Con la inauguración del Hospital Neurosiquiátrico en Salta, Ragone se transformó en su primer director y tiempo después entró de lleno a la política salteña. A principios de los años 70, pasó a liderar la Lista Verde identificado como el "médico del pueblo'', calificativo con el que se presentó como candidato a gobernador por el justicialismo salteño el 11 de marzo de 1973. La fórmula Ragone-Ríos obtuvo un triunfo aplastante sobre las otras fuerzas políticas de la provincia: el 65 por ciento de los votos, el porcentaje más alto obtenido por un candidato a gobernador en toda la historia de Salta. El 23 de noviembre de 1974 fue desplazado del gobierno por una intervención federal como consecuencia de las luchas internas que en esos días minaban al peronismo en todo el país.

Paradójicamente, el 11 de marzo de 1976, a las 8.30 de la mañana, a tres años del abrumador triunfo obtenido en las elecciones democráticas, y trece días antes de que se produjera el golpe militar que inauguró la dictadura más sangrienta de la historia argentina, Ragone fue secuestrado por un grupo paramilitar a tres cuadras de su domicilio, convirtiéndose en el único ex gobernador desaparecido de la República Argentina y de toda Latinoamérica. Su cuerpo nunca apareció.

Su secuestro, sólo trece días antes que se produjera el golpe militar, lleva inexorablemente a relacionarlo con la situación que se vivía en la Argentina en los meses previos a la caída del gobierno constitucional de Isabel Martínez de Perón, cuando, además de los enfrentamientos internos, el poder militar ya había comenzado una campaña en contra de todos aquellos que podían liderar una oposición al golpe militar y a los cambios económicos que se gestaban en los cuarteles. Sin duda, Ragone era un dirigente con ese perfil.

Además de considerar como imperioso que las instituciones democráticas rindan un póstumo y justiciero homenaje a la memoria de aquellos hombres que a través de su paso por la función pública supieron dignificar las tareas que desempeñaron, jalonando su acción con hechos de significativa trascendencia que hasta el presente constituyen fundamento básico de la organización y progreso de nuestra comunidad, hay que destacar la figura de Ragone como la de uno de los dirigentes más comprometido con las causas populares y de una enorme calidad humana.

El 25 de mayo de 1973 tuvo lugar la transmisión del mando. Después de 18 años un gobernador de facto entregaba el poder a un civil.

Ragone consideraba a la democracia como el camino para la paz. El mensaje que dio ante la Legislatura al asumir marca las ideas políticas que guiaron su gestión de gobierno. Entre otras cosas, sostuvo:

"Como soldado de Perón, declaro con todo énfasis que continúo y continuaré con humildad y modestia, procurando interpretarlo....La humanidad asiste al advenimiento de un nuevo orden social. Nuestro país no puede quedar marginado de este proceso que conduce a los pueblos al encuentro con su emancipación. Este nuevo orden social surge con fuerza, ante el fracaso del sistema liberal capitalista que ha sido incapaz de dar respuestas a los imperativos que el ser humano reclama. Nuestro conductor, el General Juan Domingo Perón así lo expresa y con ello nos marca sabiamente cual es el camino a transitar. En este sentido, nos hemos pronunciado por la liberación rechazando la dependencia", "...los caminos de la liberación no pueden ser los de la violencia".

Sobre el término revolución, reiteraba "una revolución, transforma sin destruir". En reiteradas oportunidades, Ragone declaró su intención de llevar adelante un cambio de estructuras, pero en paz.

"El mío será un gobierno de austeridad, con profundo sentido humanitario y revolucionario. Entiendo que revolucionario significa un cambio que nosotros lo queremos como lo quiere el General Perón, hecho en paz, apelando a la razón y no a la fuerza. Trabajo, vivienda y alimentos sanos son los componentes indirectos de la salud y el bienestar del pueblo y es en este terreno donde el gobierno provincial debe sentar su mayor esfuerzo y cumplir el verdadero sentido de previsión del individuo..."

Ragone priorizó la política social e impuso un estilo propio caracterizado por sus fuertes convicciones democráticas, su rechazo al más mínimo gesto represivo, su preocupación por los sectores populares, la honestidad en el gasto público y austeridad de vida, el impulso al logro del país federal que proclama la Constitución de la Nación.

La causa por la desaparición de Ragone fue reabierta el 22 de octubre de 2004 y en diciembre de ese año fueron procesados el ex jefe de la Policía salteña, coronel retirado Miguel Gentil, y los ex policías Rubén y Pedro Herrera. Posteriormente fueron imputados como responsables, entre otros, el ex titular de la Guarnición Salta del Ejército, Carlos Mulhall; el ex Jefe del III Cuerpo de Ejército, Luciano Benjamín Menéndez; y el ex gobernador de facto de Tucumán, Antonio Bussi. La causa está abierta y la Justicia salteña está dispuesta a llegar a la verdad total. Las instituciones democráticas deben apoyar las investigaciones para llegar al esclarecimiento de lo sucedido, reiterar el reclamo de Justicia para saldar una deuda moral de nuestra provincia y del país todo: en el caso Ragone, que aparezcan sus restos y que se conozca la verdad.

El homenaje a Ragone y el reclamo de verdad, Justicia y memoria, por tratarse de un ex gobernador elegido por la mayoría del pueblo salteño, debe tomarse como simbólico y extensivo a todas las víctimas del terrorismo de Estado ejercido en nuestro país. En este caso como en todos los demás, todos los argentinos tenemos un deber moral y debemos ser conscientes que los homenajes son importantes, pero no suficientes, sólo se restablecerá la dignidad humana a los desaparecidos con Justicia y memoria.

Por lo expuesto precedentemente, es que solicito se apruebe el presente proyecto.