La Cámara de Diputados de la Nación

RESUELVE:

Dirigirse al Ministerio de Educación de la Nación para que en coordinación con el Consejo de Universidades, el Consejo Interuniversitario Nacional y el Consejo de Rectores de Universidades Privadas, en el marco de la Ley Nacional de Educación Superior Nº 24.521, o la que se dicte en su reemplazo, se incorpore a los planes de estudio, dentro de los contenidos cuniculares básicos y la formación práctica, la materia "Educación Física obligatoria", con contenidos teóricos sobre la relación actividad física, salud y calidad de vida, más la práctica deportiva en si misma.

Señor presidente:

Toda sociedad tiene necesidad de conocimiento para poder desarrollarse plenamente, superar sus adversidades y propiciar un futuro esperanzador. Sin conocimiento una sociedad está condenada a la decadencia, sin excepciones, aún cuando se asiente en un suelo prodigioso su destino será la pobreza. Y no hace falta abundar en ejemplos de unos y otros modelos para reconocer esta verdad. La cultura del conocimiento, la cultura del trabajo y la cultura del respeto a las normas y los valores éticos y morales, son finalmente la base de la estabilidad y progreso de una sociedad.

El desarrollo de las ciencias no tiene en si otro objetivo final que el de hacer mejor la calidad de vida de las personas, todo cuanto desvela al hombre finalmente se transforma en material de estudio, que el método científico buscará clarificar y explicar, de tal forma que ese nuevo conocimiento sea de provecho para el hombre o para la naturaleza. No escapa a este razonamiento el desarrollo de las artes, como medio de expresión del espíritu humano, sublimado en los valores estéticos que supone son propios de la actividad artística.

La forma más elevada de transmisión de tales conocimientos ocurre en los claustros universitarios, y es justamente esta necesidad de transmitir conocimientos complejos, la razón de ser de la Universidad, y consecuentemente la sociedad sostiene dichas estructuras, para contar con profesionales idóneos que sean capaces de atender a la problemática compleja y variada de los individuos, tales como salud, justicia, urbanismo, etc. En resumen digamos que la sociedad crea la Universidad para sostener una mejor calidad de vida de la población.

Sin embargo y en forma totalmente paradójica, los años de pasantía universitaria son probablemente los de peor calidad de vida de quienes han tenido la fortuna de acceder a estudios superiores. Ya desde el estrés inicial de los exámenes de ingreso (aunque estos fueran disimulados), la desproporción existente entre los escasos contenidos sugeridos en la Educación Media, a la profusa y compleja acumulación de conocimientos que debe enfrentar el estudiante desde el primer día de clases, los primeros exámenes parciales, la ansiedad por la regularización de las distintas materias y por último las verdaderas crisis psicológicas que representan siempre los exámenes finales, afectan seriamente la calidad de vida de los estudiantes, que comienzan a manifestar trastornos de ansiedad, fobias, hábitos insalubres como el tabaquismo, dietas desordenadas, perturbaciones del sueño, etc., que finalmente terminan por afectar su rendimiento académico, en muchos alumnos, ya que como fue antes mencionado, la Educación Media, lejos está de preparar al alumno para adquirir conocimientos superiores, tal como lo demuestran las elevadísimas cifras de fracaso en los exámenes de ingreso de las distintas Facultades de todo el País, de acuerdo a las publicaciones oficiales que leemos en los medios masivos de comunicación, durante los períodos correspondientes.

Por otra parte, es sabido también que como parte del déficit educativo global de la enseñanza media, la Educación Física no escapa a esta realidad, por la cual es dable observar una tendencia al sedentarismo en los egresados del sistema educativo, que no han incorporado como conducta o hábito de vida, la práctica regular de actividades físicas, como lo han demostrado las últimas encuestas dadas a conocer en los medios de comunicación, que revelan que la mayoría de la población no puede ser considerada como físicamente activa.

Y en relación con este hecho, se debe tener presente que hay una muy fuerte asociación entre los hábitos sedentarios de vida y un determinado número de enfermedades, que bien pueden prevenirse por el simple hecho de adoptar conductas saludables que hagan a una mejor calidad de vida. Aseveración que sostienen la Organización Mundial de la Salud, y a partir de allí los demás Organismos Gubernamentales y no Gubernamentales, como también y de manera obvia lo han hecho las Entidades Científicas relacionadas con el tema.

Las Universidades cuentan con Departamentos de Educación Física, que dependen del Área de Extensión Universitaria, los cuales ofrecen a los Estudiantes la posibilidad de realizar alguna forma de actividad física o de deporte, en forma voluntaria, dependiendo de las factibilidades horarias de los interesados. Así concurren a estas prácticas sólo aquellos alumnos que tienen interés por el deporte y en los períodos que sus horarios se lo permiten.

Pero estas prácticas están carentes de contenido teórico, solo se reducen a la ejercitación misma, por lo cual es probable que nuevamente la Educación Física fracase, dado que el ejercicio no se acompaña de una transmisión de conocimiento teórico como deber ocurrir en un verdadero proceso educativo.

Creo firmemente que haciendo abstracción de la carrera universitaria que se trate, siempre la adquisición de conocimientos sobre la biología humana y la relación entre calidad de vida, salud y enfermedad será de indudable provecho para el profesional, tanto para sí mismo como para el ejercicio de su profesión, sea Abogado, Ingeniero o Analista de Sistemas. No son pocos los casos jurídicos en los cuales se evalúa el riesgo, el daño o las secuelas físicas sufridas por las personas, que el profesional del derecho debe interpretar con ayuda de un perito. Cuanto mejor si tiene conocimientos previos sobre el particular. La obra de la Ingeniería se construye por personas para las personas, entonces los accidentes laborales, y optimización de los diseños de muchos proyectos requieren de un mínimo de conocimiento sobre la biología humana. Y como último ejemplo vemos que los mapas conceptuales, los algoritmos de estudio, los organigramas de funcionamiento, usados por los analistas, muchas veces son derivados de la fisiología humana, como ocurre por ejemplo con el funcionamiento de las redes neuronales.

Por todo lo expuesto creo que surge entonces la necesidad que la Ley de Educación Superior vigente o la que la sustituya, incorpore una Nueva Asignatura en el currículo universitario: La Educación Física, como materia teórico y práctica.