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PROYECTO DE TP
Expediente 0479-D-2008
Sumario: PEDIDO DE INFORMES AL PODER EJECUTIVO SOBRE LA POLITICA ENERGETICA DEL PAIS.
Fecha: 11/03/2008
Publicado en: Trámite Parlamentario N° 7
La Cámara de Diputados de la Nación
RESUELVE:
Dirigirse al Poder Ejecutivo a los
efectos de brindar la información que se requiere en el presente proyecto,
relacionada con la política energética del país
- Informar detalladamente si la
política energética del país está inserta y forma parte de un proyecto argentino de
desarrollo económico y social
- Detallar si en dicha política
energética se ha considerado la sustentabilidad en un plan de desarrollo para que
el sistema vuelva a reponer sus reservas y a ofrecer un suministro seguro y a
precios competitivos.
- Informar en detalle si tiene prevista
la política energética que urge desarrollar una estrategia de largo plazo y que
además fije objetivos concretos ,como:
- diversificación de fuentes primarias,
- alternativas de suministro en la
región y en el mundo);
- despeje de incertidumbres en
materia de reglas (contratos, marcos regulatorios de gas y electricidad,
- nueva ley de hidrocarburos,
- regímenes promocionales de
energías alternativas y de precios (tarifas que recuperen costos, tarifas más caras
en las horas pico, tarifa social para los sectores vulnerables, precios de referencia
regional e internacional para los combustibles)
- Al ser la industria energética
intensiva en el uso de capital y los cronogramas de ejecución de las obras
energéticas desbordan los plazos políticos de una administración de gobierno, en
la política energética del país, Detallar la situación de:
proyectos energéticos en
ejecución
proyectos energéticos con
pronta ejecución futura en corto y mediano plazo, si se encuentran o en proceso
licitatorio o adjudicadas
proyectos energéticos en
estudio
Sobre los proyectos mencionados
anteriormente se solicita:
1. Detallar si son referidos
exclusivamente al sector eléctrico o comprenden otros sectores energéticos.
2. Si los mismos se pueden encuadrar
como proyectos con inversiones de riesgo y alto contenido tecnológico
3. Fuente de financiamiento de los
proyectos en ejecución, en ejecución futura, y en estudio. Recursos que se
utilizarán para concretar los proyectos.
FUNDAMENTOS
Señor presidente:
La trayectoria de fracaso de los
distintos modelos de gestión de la industria energética tiene características
comunes: la manipulación política de los precios de la energía, la discapacidad del
Estado en sus distintos roles (a veces como proveedor de bienes y servicios
energéticos, otras como regulador y garante de la competencia, y siempre como
gestor de estrategias de largo plazo) y el proceso de desdesarrollo
subyacente.
¿Podemos plantear un proyecto
energético de largo plazo sin un proyecto de desarrollo de largo plazo? ¿Es
posible hablar de desarrollo económico y social en un país donde las políticas
populistas inhiben las políticas de Estado?
La alternativa es república y
desarrollo.
- la falta de dicho proyecto de
desarrollo económico y social, ha dejado hasta ahora al descubierto la expansión
de la oferta energética
- la crisis energética debería
acompañar la expansión productiva en una estrategia de largo plazo, con un
crecimiento de la economía
- el problema energético
necesita ser considerado como parte de la solución del desarrollo crónico que
venimos padeciendo.
- La energía argentina,
entrampada en el corto plazo, es una de las víctimas del desarrollo ausente
La administración de la crisis es
necesaria para enfrentar la escasez de los próximos veranos y del próximo
invierno, pero la sustentabilidad energética en un plan de desarrollo depende de
que el sistema vuelva a reponer sus reservas y a ofrecer un suministro seguro y a
precios competitivos.
Si la economía crece a un 5%
sostenido anual, la inversión energética en petróleo, gas, electricidad, para
satisfacer la demanda es de alrededor de dos puntos del PBI (entre 3500 y 4000
millones de dólares cada año).
Por eso urge una estrategia de largo
plazo que fije objetivos concretos (diversificación de fuentes primarias, alternativas
de suministro en la región y en el mundo); despeje de incertidumbres en materia
de reglas (contratos, marco regulatorio de los servicios públicos, marcos
regulatorios de gas y electricidad, nueva ley de hidrocarburos, regímenes
promocionales de energías alternativas) y de precios (tarifas que recuperen
costos, tarifas más caras en las horas pico, tarifa social para los sectores
vulnerables, precios de referencia regional e internacional para los combustibles).
La industria energética es intensiva en
el uso de capital y los cronogramas de ejecución de las obras energéticas
desbordan los plazos políticos de una administración de gobierno. Las decisiones
energéticas no pueden quedar subordinadas al próximo turno electoral.
Ni estamos condenados al éxito ni podemos resignarnos al fracaso. La alerta
temprana de otra crisis en potencia, que va más allá de la energía, obliga a la
dirigencia toda a prevenir una nueva frustración.
El punto de inflexión requiere el
liderazgo que, consustanciado con el proyecto de largo plazo, despersonalice el
proceso político. En democracia, el desarrollo promueve la alternancia política y la
vigencia de políticas de Estado. No hay solución energética sin solución
política.
El punto de inflexión depende de
acuerdos básicos. A partir de ellos, puede existir un proyecto de desarrollo donde
las demandas sociales insatisfechas son priorizadas en función de las
restricciones presentes y las soluciones posibles respetan las coincidencias
fundamentales, y los intereses de corto plazo ceden prioridad a los objetivos de
cohesión social, de crecimiento sostenido y de fortaleza institucional.
Nos encontramos además como
realidad puntual que las principales licitaciones que el Gobierno lanzó contra reloj
para tratar de morigerar el impacto de la crisis energética se han topado con
diversos escollos que provocaron una prórroga generalizada para la recepción de
las ofertas.
Las demoras alcanzaron a tres
contrataciones salientes lanzadas a principios de agosto: las cinco centrales
térmicas de 1.500 MW; la incorporación de pequeñas usinas y barcazas
generadoras y los turbocompresores para el Gasoducto del Noroeste.
Si bien las licitaciones despertaron el
interés de varios oferentes, la gran mayoría solicitó una extensión de los plazos
porque no podían cumplir con los requisitos exigidos para la conformación legal de
los consorcios. Además, reclaman una mayor flexibilidad con el plazo de las obras
porque consideran que son casi imposibles de cumplir.
Requerimos sea aprobado el presente
pedido de informes para conocer en definitiva cual es la política energética que
tiene el gobierno.
| Firmante | Distrito | Bloque |
|---|---|---|
| GALVALISI, LUIS ALBERTO | CIUDAD de BUENOS AIRES | PRO |
Giro a comisiones en Diputados
| Comisión |
|---|
| ENERGIA Y COMBUSTIBLES (Primera Competencia) |