La Cámara de Diputados de la Nación

RESUELVE:

Solicitar al Poder Ejecutivo Nacional, informe a esta Cámara de Diputados, a través del Ministerio de Defensa, sobre el proyecto IA 63 Pampa III/ Pampa GT que se está llevando adelante en la fabrica argentina de aviones "Brigadier San Martín" y específicamente informe:

1.- Si el primer prototipo del IA 63 Pampa III podrá realizar su vuelo inaugural durante el primer cuatrimestre de este año como se había anunciado a los medios;

2.- De no ser así, informe cuál sería la fecha estimada de dicho vuelo;

3.- Informe si la línea de producción se encuentra en funcionamiento, dado que según fuentes periodísticas ella se encontraría paralizada;

4.- Informe cuál es el motivo de la relentificación del proyecto y qué plazos se prevé para su reactivación;

5.- Informe si se han concretado acuerdos con países extra Otan para sustituir componentes de las aeronaves nombradas, detalle cuáles son esos componentes y si los acuerdos incluyen transferencia de tecnología;

6.- Informe si se han entablado conversaciones enderezadas para exportar estas aeronaves.

Señor presidente:

Las Fuerzas Armadas Argentinas se encuentran seriamente afectadas por la falta de material idóneo que les permita cumplir sus funciones básicas. Dentro de este panorama, nuestra Fuerza Área, que cumpliera su misión con excelencia y grandes resultados durante el conflicto del Atlántico Sur por nuestras Islas Malvinas, sufre con más rigor la fatiga de material con una antigüedad mayor de 40 años de servicio, sin actualizaciones y que en muchos casos simplemente deja de volar porque se ha superado las horas de vuelo. A esto debe adicionarse que la última incorporación importante por parte de nuestra Fuerza Áérea pos Guerra de Las Malvinas fue un pequeño lote de alrededor 20 Mirage III CJ/ BJ israelíes con su horas de vuelo casi al limite, lo que a los pocos años motivó su baja. Tenemos un panorama claro de porque es de gran interés el desarrollo de aproximadamente 40 aviones Pampa en las dos versiones prometidas y que de una u otra forma ven siempre dilatada su puesta en producción, incluso cuando la retórica y los fondos del gobierno en principio estarían orientados hacia ese objetivo.

Esta situación resulta difícil de entender incluso para un país que dice no tener hipótesis de conflicto, si la comparamos con el interés de otros Estados de la Región, como por ejemplo Chile, que se plantea adquirir un segundo buque de desembarco (como contrapartida nuestro país dio de baja el BDT ARA Cabo San Antonio hace décadas y hoy no posee un buque similar) o Brasil que hoy en día es el cuarto exportador mundial de armas ligeras y que tiene previsto una inversión en defensa de hasta 300 mil millones de dólares en un periodo de 20 años, planes que incluyen submarinos nucleares y hasta otro portaviones para defender "la Amazonia azul" (la porción del Atlántico Sur en donde se hallan grandes reservas de petróleo y rutas comerciales).

Nuestro país anunció en 2010, por intermedio de a la sazón ministra de Defensa, que "se continuaba con el programa para construir un submarino nuclear". En ocasión de que el Jefe de Gabinete compareciese ante esta Cámara en 2012, le pregunté sobre cómo marchaba ese plan, contestándome que "seguía su curso". Sin embargo, desde ese momento hubo un completo silencio que genera la suspicacia de que no se están ejecutando los programas, en este caso para proteger a nuestra "Pampa mojada", es decir la inmensa y esplendorosamente dotada plataforma marítima argentina.

En este panorama es de vital importancia conocer el estado de este proyecto de FADEA.

Por esto solicito la aprobación del presente.