La Cámara de Diputados de la Nación

RESUELVE:

Se rinda homenaje al patriota Raúl Scalabrini Ortiz por su trascendente obra y ejemplar conducta política al cumplirse este mes el 110 aniversario de su nacimiento ocurrido el 14 de Febrero de 1898 en la provincia de Corrientes.

Señor presidente:

Raúl Scalabrini Ortiz nació el 14 de febrero de 1898 en la provincia de Corrientes y hoy, al conmemorarse los 110 años de su nacimiento, su imagen se agiganta y adquiere un valor más significativo aún.

Entendió, como pocos, la constitución federal del país y pregonó el desarrollo equilibrado y armónico de la Nación. Tal vez, su profesión de agrimensor le permitió engendrar una visión total del país, despojándose de la perspectiva porteña en la cual creció.

Fue un brillante escritor y sufrió el sabotaje de los editores del poder, siempre inclinados a publicaciones pueriles que no cuestionasen las injustas realidades sociales, económicas y políticas que pudieran perjudicar a nuestro pueblo.

Desde muy temprana edad se involucró en lo público y se convirtió en un severo cuestionador de los atropellos que el imperialismo les propinaba a sus compatriotas. Sus primeros pasos los dio en un grupo de inclinación marxista llamado "Insurrexit" donde advirtió la significancia de los factores económicos (como los recursos naturales y los ferrocarriles) en el desarrollo de nuestro país.

Con sólo 30 años ya había detectado "los robos" que la colonia británica junto con sus cómplices y socios argentinos realizaban, comenzando con los ferrocarriles, continuando con los frigoríficos y con sus bancos; el círculo se completaba con el ingreso a nuestro país de barcos cargados de manufacturas provenientes del imperio que terminaron oprimiendo la industria nacional.

No se limitó a entender la realidad social, no se limitó a ser un estudioso de los andamiajes económicos del poder, no se limitó a ser docente de sus compatriotas, no se limitó a constituir una militancia diaria y sin tregua; a la hora de poner el cuerpo así también lo hizo. Participó de la última Revolución Radical (Pasos de los Libres 1933) donde los yrigoyenistas buscaban restaurar las libertades cercenadas por la criminal dictadura comenzada el 6 de Septiembre de 1930. Esa participación le valió primero la cárcel (en la isla Martín García) y posteriormente el exilio. Estas arbitrariedades sólo templaron su espíritu fortaleciéndolo.

El poder y el imperio nunca comprendieron su lógica. No pudieron entender por qué este hombre con inteligencia y brillantez no fue comprado o seducido por los beneficios materiales que se le ofrecieron.

Así fue que vuelto del exilio con más energía aún produjo lo más trascendente de toda su obra: conforma F.O.R.J.A. (Fuerza de Orientación Radical para la Joven Argentina) junto con otros patriotas de la talla de Jauretche, Manzi, Del Mazo, Dellepiane, y desde esa trinchera enfrenta y desnuda los negociados que el imperio inglés realizaba en nuestra Nación.