La Cámara de Diputados de la Nación

RESUELVE:

Expresar su hondo pesar y consternación por el fallecimiento ocurrido el sábado 16 de febrero de 2008, del legislador porteño Elvio Antonio Vitali, fundador de la Librería y Foro Gandhi y ex director de la Biblioteca Nacional.-

Señor presidente:

Elvio Vitali, nació el 26 de marzo de 1953, en Lanús, pero su lugar de residencia, desde muy joven era la zona sur porteña.-

Si hiciéramos una breve reseña de su vida podríamos decir que fue secretario general del centro de estudiantes de Derecho en los años setenta, que en el año 1978, se debió exiliar en México y debido a ello no pudo terminar su carrera de abogado.-

En México integró la Comisión de Solidaridad, y allí empezó a interesarse por el mundo de los libros y de la gestión cultural.-

En 1984, regresa a la Argentina y funda la librería Gandhi, junto a Elsa Amado y Mauricio Achar.- También fue uno de los fundadores de la librería Losada y hasta el año 2005 fue el presidente de la comisión organizadora de la Feria Internacional del Libro de Buenos Aires y el principal impulsor de la creación del Instituto Nacional del Libro.-

En lo que hace a su aspecto político, Elvio fue un militante durante toda su vida, y uno de los fundadores del grupo Calafate junto con el ex presidente Néstor Kirchner.- Entre los años 2004 y 2005 fue director de la Biblioteca Nacional, poniendo en marcha el Programa Inventario de Libros.- Al cargo de Director renunció para asumir como Legislador de la Ciudad, labor que llevó a cabo hasta su fallecimiento.-

Sus amigos, tal como Horacio González y Nicolás Casullo lo definieron magistralmente.- El primero relata "En los libros que leímos, en los artículos que comentamos, en los cantantes de tango redescubiertos, en la afilada comprensión de los días que pasaban, podía sentirse la marca Vitali, porque todo ese tiempo tiene el sello de ciertas frases, de demasiadas angustias y de imágenes que no era difícil rememorar en común. ... Fue un hombre de grandes pasiones pero prudente al extremo para expresarlas. El tango bien bailado fue su religión personal, la política su divertimento intelectual, a la que le entregó piezas analíticas incomparables, con su sabiduría oral, siempre muy por encima de la política realmente practicada por nosotros." Casullo por su parte expresa "Elvio emergía en lenguaje, salida, broma, de ese mundo popular peronista revuelto, corajudo, peleador, imprevisible a veces, que siempre estaba, y que Elvio le dio dones como el de ser el permanente gestador de consignas, cánticos, versitos, lemas que luego bramaban en miles de gargantas. Las bellas muchachas que pasan, la familia tana, el fútbol, los fideos, el tuco, los asados sobre chapa en el piso, la calle, el café, la cantina, la sobremesa y el tango que lo envolvió como una oscura argentinidad supletoria en la última década y pico de su vida, compusieron su retrato cotidiano, el mural madre donde fue entrando el militante, el exiliado, el librero, el empresario, el candidato, el director de la Biblioteca Nacional, el legislador.-... Tuvo un inmenso don: nunca se la creyó del todo. A su propia trayectoria digo".-

Por todo lo antes expuesto solicito a mis pares el acompañamiento del presente Proyecto de Resolución.-