La Cámara de Diputados de la Nación

RESUELVE:

Dirigirse al Poder Ejecutivo Nacional, para que a través de los organismos que correspondan, arbitren los medios necesarios a los fines de restituir al patrimonio histórico cultural de provincia de Misiones, parte de los archivos y libros que pertenecieron a las reducciones jesuitas, publicadas entre los siglos XV y XVIII, especialmente las especialmente las obras impresas en guaraní.

Señor presidente:

En el año 1695, salieron los primeros libros impresos en el Río de la Plata, desde la imprenta instalada por los jesuitas a un costado del río Paraná y que fuese manejada por indios reducidos a la vida civilizada. Los jesuitas siempre estuvieron a la vanguardia en la Iglesia y jugaron un papel importante en sus reducciones habitados por indios en lo que es hoy Paraguay y zonas cercanas, donde fueron consideradas modelos de desarrollo e integración.

Después de décadas de abandono, el patrimonio bibliográfico más importante del país, junto a un valioso archivo que pertenecieron a los jesuitas, comenzaron a ser recuperados en el Colegio del Salvador de la Capital Federal, en un laboratorio de conservación, y con la asistencia del Instituto Latinoamericano y el Instituto Histórico la Compañía de Jesús.

Son 13.000 libros religiosos y de ciencias con valiosas obras de matemáticas, astronomía, botánicas, derecho, historia, filosofía y literatura, algunas editadas en Europa y otras impresas en guaraní. Como asimismo, cartas y documentos en tratamiento de recuperación con contenidos que hablan de las correspondencias de los jesuitas en la época colonial, como recomendaciones acerca de la evangelización en América y nombramientos de sacerdotes.

No todas las cartas y documentos se refieren a cuestiones religiosas, hay muchas que abordan cuestiones políticas que dejan ver la alianza entre los españoles y los jesuitas en la lucha contra los cazadores de esclavos. Cartas y documentos que arrancan en 1595 y terminan en 1767.

El patrimonio bibliográfico de la antigua provincia de Paraguay y zonas cercanas eran de unos 56.000 volúmenes, luego de la expulsión de los jesuitas en 1767 estas bibliotecas fueron dispersadas y una gran parte de los libros constituyó el núcleo de la Biblioteca Nacional, otros quedaron en la Universidad Nacional de Córdoba, y muchos acabaron en bibliotecas privadas y miles se perdieron definitivamente.

Estos libros significan un trozo de las memoria conjugaba con un gran esfuerzo para lograr fe y cultura, donde se formaron generaciones de misioneros que luego se comprometieron en las fronteras más expuestas por la evangelización, la promoción humana y el desarrollo cultural.

Se considera a la Compañía de Jesús, herederos legítimos de aquellos hombres misioneros del siglo XV y XVIII, pero la intención del presente proyecto es que, todo este caudal de cultura y ciencia, sirva para la reivindicación del patrimonio cultural e histórico de la provincia de Misiones. Por todo lo acá expuesto, solicito a mis pares la aprobación del presente Proyecto de Resolución.